En busca del tach¨®n demandado
El ¨¦xito del Villarreal se ha sustentado en no gastar m¨¢s de lo que ingresa y en apostar por el talento en el banquillo y oficinas.

Acostumbrados a los palos a la Selecci¨®n, Madrid o Bar?a cuando el bal¨®n no entra, hay gente de mi entorno que me achaca que por qu¨¦ s¨®lo hablo y escribo bien del Villarreal. Como si Roig, con el que jam¨¢s cruc¨¦ una palabra, me tuviera en plantilla. La respuesta es una consecuencia de los hechos: es complicado encontrar en este club un tach¨®n desde que ameniza mi vida. All¨ª se marcharon 16 canteranos de mi Alba en 2006, en una operaci¨®n en la que el Submarino repunt¨® como cantera (Mario Gaspar la lider¨®) y rescat¨® al club manchego. All¨ª dio fe del ejemplar nivel formativo mi primo Javier, ahora en el Aris. Y all¨ª miran mis cr¨®nicas desde hace siete a?os. En este tiempo vi pocos proyectos mejor edificados.
El crecimiento no es casual. Ni la Europa League. Su ¨¦xito se ha sustentado en no gastar m¨¢s de lo que ingresa y en apostar por el talento en el banquillo y oficinas. S¨®lo as¨ª logra comprar barato, sembrar gratis y exportar a precio de gal¨¢ctico. Desde Marcelino, en la vuelta a Primera, hasta Emery, el futbolista siente que en La Cer¨¢mica se revaloriza. Por eso Albiol, Trigueros y Yeremy han renovado, Pau se neg¨® a salir vendido y Danjuma o Chukwueze lo apuestan todo al amarillo. Llaneza tiene mucha culpa de esta salud y Negueroles, de asegurar el futuro. Pero es Fernando padre el que lidera un imposible: que un equipo de pueblo sea mundialmente admirado.