Alves y la revoluci車n silenciosa de Xavi
Mientras la Selecci車n remataba su clasificaci車n para Qatar, en Barcelona Xavi iba poniendo los primeros ladrillos del dif赤cil proyecto de reconstrucci車n del Bar?a, una tarea complicada para la que cuenta en principio con benevolencia general. Es un buen tipo, funde la escuela acad谷mica de La Masia, que produjo el mejor Bar?a que se ha conocido, con la ciencia de la calle del &Sabio de Hortaleza*, del que fue jugador favorito, piedra angular de aquel felic赤simo tiempo. Y es un tipo valiente, que dej車 una c車moda y muy agradecida posici車n en Qatar para comprometerse en la reparaci車n urgente del club de su alma, metido en desastre.
Sin ruido, pero sin pausa, ha ido ocupando las zonas estrat谷gicas relacionadas con la primera plantilla, principio y final de todo lo importante en cualquier club de f迆tbol. Con 谷l han entrado siete personas, y con Koeman se han ido otras siete, a m芍s del secretario t谷cnico, Ram車n Planes, en cuyo expediente alternan aciertos (Pedri, Ara迆jo) con cantadas (Boateng, Braithwaite, Todibo, J迆nior, la venta de Semedo, mal sustituido#). Con su salida, se entiende que Xavi tiene el control, al estilo de los cl芍sicos managers ingleses. Medidas excepcionales para quien despu谷s de todo es un principiante. Pero un principiante con un prestigio inmenso.
Ahora ha sorprendido (a m赤 tambi谷n) el regreso de Alves, con 38 a?os y, para decirlo claro, en paro. Otro excompa?ero, pero se ve que Xavi, que de momento ya ha borrado de la agenda de Piqu谷 un viaje a Madrid para una entrevista en El Hormiguero, no teme que le tomen por colega los que ahora son sus subordinados. Perdida la velocidad, ya no veo a Alves de lateral, pero quiz芍 s赤 de interior, para competir con Frenkie de Jong, que todav赤a est芍 en un s赤, pero no. Recuerdo a Alves como jugador ※para todo el tiempo, para todo el campo, para todos los campos§, como reclamaba Sacchi. Por desgracia, Frenkie de Jong no es eso.