?rase una vez en... el Bernab¨¦u
La historia prueba que nunca segundas partes fueron buenas, que nadie imagina un final feliz para el entrenador que regresa. Zidane quiere demostrar lo contrario.

Columna libre de spoilers (y de ventajismos). Si, como yo, eres de los que se quedar¨ªa a vivir en la novena pel¨ªcula de Tarantino, con Rick Dalton y su ¨¢ngel de la guarda Cliff Booth (?qu¨¦ cl¨¢usula de rescisi¨®n tiene Brad Pitt?) danzando en una fiesta eterna con Sharon Tate, Steve McQueen, Bruce Lee y hasta con el lacio pedante de Polanski, entender¨¢s que Zinedine Zidane haya vuelto al Real Madrid despu¨¦s de haberlo ganado todo. Tambi¨¦n que los blancos pretendan a Marc Roca, pero ese es otro relato (de terror) que pondr¨ªa a mi Espanyol patas arriba.
La historia prueba que nunca segundas partes fueron buenas, que nadie imagina un final feliz para el entrenador que regresa. Y, sin embargo, Zidane, que, tras la marcha de Cristiano, es el gran ¨ªdolo, el aut¨¦ntico s¨ªmbolo del Real Madrid, quiere seguir sacando sonrisas de la chistera. Su presencia es hoy la frontera f¨ªsica entre el ¨¦xito y el desastre, la ¨²nica raz¨®n para hacer de la realidad algo m¨¢s imaginativo, un nuevo cuento con el que seguir resistiendo y llevando la contraria a los agoreros. Y agosto, el mejor momento para la distracci¨®n.
La Liga en agosto estorba incluso a algunos futboleros, quiz¨¢ los mismos que no van al cine en verano por no encerrarse a oscuras con sus propias ilusiones. Ser¨¢ el ¨²nico pulso que les quedar¨ªa a Tebas y Rubiales por mantener, pero son jornadas perfectas para mantener cierto aire de irrealidad en el ambiente. Todo ha comenzado ya, pero a¨²n no es el momento: habr¨¢ tiempo para ponerse al d¨ªa cuando llegue septiembre. Tan borroso est¨¢ todo todav¨ªa que mi hijo me pregunt¨® ayer por qu¨¦ le sali¨® el cromo de Hermoso perico si ya jugaba en el Atleti. Aplicado al ni?o que llevamos dentro, esos ?ltimos Fichajes del ¨¢lbum generan el mismo desconcierto que el cierre de mercado diferido a los clubes. Tarantiniana desde el principio, la temporada del Real Madrid lleva camino de ser la pel¨ªcula de 2020 si Zidane consigue montar su fiesta sin los matarifes de Charles Manson pintando cerdos voladores de Toshack en las paredes del Bernab¨¦u.