Toda fe necesita un milagro
Dec¨ªa Calleja que le motiva la posibilidad de hacer algo que quede para siempre e hist¨®rico ser¨ªa darle la vuelta a la eliminatoria contra el Valencia
La fe no se negocia, se tiene. La fe en el f¨²tbol se supone que siempre est¨¢ ah¨ª, no se pierde aunque la cosa sea muy complicada. Se pueden tener fases de dudas, de enfado, de resignaci¨®n y de hast¨ªo¡ Que se lo digan a Jes¨²s, que siendo hijo de Dios, tuvo sus momentos de desfallecer, de duda. O a Santo Tom¨¢s, que no crey¨® en Cristo resucitado. Tanto que tuvo que meter sus dedos en la llaga para tener la certeza. Si ellos dudaron, que no haremos el resto de mortales. Y no s¨®lo de fe vive el hombre. De vez en cuando no viene mal alg¨²n milagro. Uno de esos que dispare la euforia, que haga creer que hay algo superior.
En esas est¨¢n los del Villarreal, esperando un milagro. Dec¨ªa Calleja que le motiva la posibilidad de hacer algo que quede para siempre e hist¨®rico ser¨ªa darle la vuelta a la eliminatoria contra el Valencia. La cosa no pinta nada f¨¢cil. El Valencia de Marcelino y en Mestalla no es equipo al que se le pueda tumbar y menos golear. Pero siempre queda esa sensaci¨®n de que los milagros (y los descalabros) llegan cuando nadie los espera. As¨ª que el Villarreal tiene hoy la oportunidad de hacer algo que no ha hecho nunca, y eso pasa por tumbar a Goliat de una pedrada certera.