Solari acert¨® al recuperar a Pintus
Son los misterios del f¨²tbol. El Madrid ha recobrado la energ¨ªa y el ¨¢nimo, que van de la mano, y luce una vez m¨¢s ese aspecto imponente que le coloca por encima de cualquier amenaza.
Son los misterios del f¨²tbol. De repente el Madrid ha recobrado la energ¨ªa y el ¨¢nimo, que siempre van de la mano, y luce una vez m¨¢s ese aspecto imponente que le coloca por encima de cualquier amenaza. As¨ª que va a ser verdad eso de que ¡®el Madrid siempre vuelve¡¯. Ya veo a Roncero echando cuentas y diez puntos no le parecen tanto, y quien piensa que la cuarta consecutiva puede llegar, aun sin los goles de Cristiano. El Madrid es sobre todo un dep¨®sito de fe, al que generaciones y generaciones de jugadores y aficionados acuden en las malas para rellenar sus cantimploras. Siempre hay algo en el pasado a lo que acudir. Esta vez lo hab¨ªa en el pasado m¨¢s pr¨®ximo, y se trata de Pintus.
Hombre discreto, Pintus fue, ya saben, el preparador f¨ªsico de Zidane, que le consider¨® tan necesario que consigui¨® que Florentino le sacara del Olympique de Lyon. Funcion¨®. Los jugadores se identificaron con sus m¨¦todos, vieron que les serv¨ªa, hubo comuni¨®n entre plantilla y cuerpo t¨¦cnico. Pero cuando lleg¨® Lopetegui, tir¨® de un hombre suyo, ?scar Caro, y releg¨® a Pintus. Las cosas no salieron. Tres a?os y tres Champions no se borran con cualquier cosa, y menos si en la nueva etapa falta el supercrack de la anterior. Faltaron goles, faltaron resultados, cundi¨® el pesimismo... Salt¨® Lopetegui, apareci¨® Solari, ascendido s¨²bitamente del Castilla, en plena crisis, sin m¨¦ritos previos. Como Zidane...
Y, como Zidane, ha tirado de Pintus, con cuyos m¨¦todos se ha reencontrado c¨®modo el grupo. Al llegar, dispuso una especie de pretemporada invernal, con el riesgo controlado de sufrir lesiones (las ha habido) y ha resultado. Mucho habr¨¢ de acierto en lo que hace, pero quiz¨¢ haya tambi¨¦n algo de efecto placebo. Al tiempo, Solari ha sobresaltado a ¡®titular¨ªsimos¡¯ refrescando la sangre del equipo con apariciones frecuentes de los Odriozola, Reguil¨®n, Llorente, Ceballos y sobre todo Vinicius. M¨¢s Nacho y Lucas V¨¢zquez, que siempre est¨¢n ah¨ª. Lo f¨ªsico y lo an¨ªmico se han elevado al comp¨¢s y nadie espera que sea algo fugaz. El Madrid vuelve a tener muy buena pinta.