Dudas sobre que hubiera partido ¡®Fritzes-Tommies¡¯ en la Primera Guerra Mundial
Partido en Guerra. Este art¨ªculo no es para los que creen en los Reyes Magos, sino para los que tienen alma de historiadores. As¨ª que usted es uno de los primeros, como se dice en la BBC antes de anunciar los resultados de los partidos, deje de leer ahora mismo. A principios de diciembre, Platini present¨® un monumento en los Campos Flandes, al oeste de B¨¦lgica, donde se supone que se jug¨® un encuentro muy especial durante la tregua extraoficial en la Navidad del 1914, en plena Primera Guerra Mundial. Soldados alemanes y brit¨¢nicos salieron de sus trincheras en varios lugares del frente occidental y acabaron encontr¨¢ndose en tierra de nadie. Los que pod¨ªan hablar el idioma del otro se contaron historias, se mostraron fotograf¨ªas y se intercambiaron comida. El teniente alem¨¢n Johannes Niemann escribi¨®: ¡°De repente, un Tommy (brit¨¢nico) sali¨® con una pelota de f¨²tbol. R¨¢pidamente se armaron los equipos para un partido en el barro congelado, y los Fritzes (alemanes) vencieron 3-2 a los Tommies¡±.
Documental de FIFA. Aquel incidente captur¨® la imaginaci¨®n de muchos, especialmente en el Reino Unido (no tanto en B¨¦lgica o Francia, pa¨ªses ocupados por Alemania y que nunca podr¨ªan crear un mito de un partido de f¨²tbol entre invasores y brit¨¢nicos). De hecho, la FIFA est¨¢ preparando un documental ficcionalizado sobre el encuentro.
Homenaje. Platini presidi¨® el evento y afirm¨®: ¡°En Ploegsteert y probablemente en otros lugares en el inmenso campo de batalla, desde el Mar del Norte hasta Suiza, sacaron un bal¨®n de f¨²tbol, o una pelota de tela, y empezaron a patearla¡±. Ocurre que, justo en el lugar escogido para el homenaje, no se puede demostrar que se jugara ese encuentro o ning¨²n otro. Y adem¨¢s resulta que ese partido posiblemente nunca tuvo lugar.
En el frente. Para empezar, a no m¨¢s de cien metros, hab¨ªa soldados en las trincheras dispar¨¢ndose ese d¨ªa de Navidad. El frente franc¨¦s y belga estaba especialmente activo. Y lo del partido parece fantas¨ªa: la mayor¨ªa de soldados de la Primera Guerra Mundial eran veteranos de otras guerras, profesionales del ej¨¦rcito. Ser¨ªa extra?o que descubrieran de repente un halo de humanidad que les hiciera bajar la guardia. Lo que hac¨ªan era su trabajo. Hemos azucarado lo que ocurri¨® o quiz¨¢ no fuera de un modo inocente. La guerra, en realidad, dur¨® cuatro a?os m¨¢s: debemos admitir que aquellos hombres estaban preparados para hacer lo que hac¨ªan con frialdad y eficacia.
Sospechas de los historiadores. Es cierto que, en algunas partes de ese frente, las armas se detuvieron aquel d¨ªa de Navidad, pero los historiadores sospechan que se prefiri¨® mantener el silencio y no levantar la ira del enemigo. Conversaciones tuvieron lugar, pero fueron la excepci¨®n y nadie ha podido demostrar, pese al testimonio del teniente alem¨¢n, que ciertamente se jug¨® un partido.