Scola se reserva para anotar
Un carioca en Brasil. Lo mejor y lo peor de la selecci¨®n de Brasil es que casi nunca parece brasile?a. En el partido de ayer contra Serbia quiso ser alemana o italiana cuando se puso dieciocho puntos por delante en el marcador durante la primera mitad. Serbia cambi¨® el pulso y el partido en el tercer cuarto, provoc¨® p¨¦rdidas de bal¨®n e inseguridades de los sudamericanos, luci¨® a Bircevic como cuatro abierto y construy¨® un parcial de 41-17 a su favor. Al equipo de Magnano lo sac¨® del apag¨®n Marquinhos Vieira con una racha muy carioca (Vieira naci¨® en R¨ªo de Janeiro). El alero del Flamengo meti¨® once puntos en el ¨²ltimo cuarto.
Los p¨ªvots de Serbia. Serbia tuvo a su alcance el segundo puesto del Grupo A pero se le escap¨® de las manos permitiendo el sol naciente de Grecia en el horizonte de octavos de final. Djordjevic ya pudo disfrutar ayer de Krstic, en pista durante 19 minutos, pero tuvo que recurrir l¨®gicamente a Raduljica en la decisi¨®n del partido. El p¨ªvot de la barba y los tatuajes sum¨® dos faltas en ataque, tres tiros libres fallados y le concedi¨® el escenario a su par Splitter en los ¨²ltimos cinco minutos de encuentro. Mejores sensaciones ofreci¨® Teodosic, m¨¢s l¨²cido y entonado cada d¨ªa.
EE UU y el abismo. A falta de una jornada para el final de la primera fase, el Grupo C no tiene nada claro en cuanto a su desenlace fuera de EE UU, incidiendo en la sensaci¨®n de que no cay¨® en Bilbao ning¨²n segundo gran equipo. Ucrania se disculpa por la lesi¨®n de Gladyr y Turqu¨ªa ofreci¨® su mejor cara en una derrota, durante tres cuartos frente a los estadounidenses. ?Cu¨¢ntos querr¨¢n el cuarto puesto para toparse con Eslovenia en el partido de octavos de final? Australia y Lituania parecen optimistas para el fin de semana.
Argentina es Scola. Argentina solo cede por limitaciones propias, m¨¢s que por dejadez o especulaci¨®n. Su ADN les lleva a ir al m¨¢ximo en cada partido y en creer en la justicia del esfuerzo y el compromiso. Scola finalmente est¨¢ poniendo sobre el parqu¨¦ algo m¨¢s de lo requerido, demostrando de nuevo su disposici¨®n a portar la bandera. Reserva todo su f¨ªsico para anotar, con menos ayuda en esta suerte de la que ha podido tener nunca. Nocioni debe aparecer para darle relevos cuanto antes.