Bernie y las personas que tocan
Ecclestone tiene fama de astuto, ambicioso y seductor. Hay una leyenda urbana que le coloca como asaltante del tren de Glasgow (1963).

Hay dos tipos de personas, sin que se admitan en este caso las clasificaciones intermedias: las que tocan y las que no. La identificaci¨®n es bien sencilla. Si usted tiene tendencia a tocar a su interlocutor, el brazo habitualmente, aunque tambi¨¦n podr¨ªa palparle el hombro o el cuello, y en casos m¨¢s osados la cintura, usted es de los que tocan. Como Bernie Ecclestone.
La costumbre no es preocupante siempre y cuando al interlocutor le guste el roce humano o el cacheo policial. Se recomienda, por tanto, una m¨ªnima aceptaci¨®n de la persona con la que se establece el contacto. De otro modo se multiplican los riesgos. Son muchos los j¨®venes inexpertos, habitualmente varones, que confunden el toqueteo amistoso de una compa?era (amiga o incluso desconocida) con una invitaci¨®n al amor sin barreras. Cuidado, por tanto. Si alguien les agarra el brazo tal vez s¨®lo quiera tomarles el pulso.
Cuesta distinguir cuando se toca para sentir el calor humano y cuando se trastea para satisfacer otro tipo de calores. El caso de Ecclestone vuelve a servirnos de ejemplo. Bernie, de 85 a?os, podr¨ªa pasar por un anciano venerable, encogido por la edad y dulcificado por su indudable parecido con Fof¨®. Desde esa perspectiva, nada habr¨ªa que destacar en su aproximaci¨®n a la azafata, s¨®lo lo afectuoso del gesto, entra?able jefe que departe con sus empleados.
Ecclestone, sin embargo, es un hombre precedido por su fama. Fama de astuto, de ambicioso y fama de seductor. No se dejen enga?ar por su fisonom¨ªa de jockey del Grand National (1,58 metros). Bernie ha sido un combatiente en el mundo de los pesos pesados, tanto en los negocios como en el amor. Hay una leyenda urbana que le coloca como asaltante del tren de Glasgow (1963), vinculaci¨®n que desmiente con kilom¨¦trico cinismo: ¡°No hab¨ªa suficiente dinero en ese tren¡±.
Las leyendas sentimentales son m¨¢s f¨¢cilmente comprobables. En 1985 se cas¨® con la modelo croata Slavica Radic, 28 a?os m¨¢s joven y 30 cent¨ªmetros m¨¢s alta. En 2012 volvi¨® a desposarse, esta vez con una brasile?a 45 a?os m¨¢s joven. Si los opuestos se atraen, podemos afirmar que a Ecclestone le atraen los opuestos y las opuestas.
Por tal motivo (por tantas razones) se hace dif¨ªcil imaginar un acercamiento insustancial a la azafata del cartel¨®n en Brasil. Es posible que Bernie la recomendara una rebequita para evitar resfriados, pero es mucho m¨¢s probable que la pidiera en matrimonio, anillo de diamantes escondido en el pu?o izquierdo y luna de miel en Glasgow.