
Los Sims 4
- PlataformaPC8XBO6.5PS46.5
- G¨¦neroSimulaci¨®n
- DesarrolladorMaxis
- Lanzamiento04/09/2014 (PC)17/11/2017 (XBO, PS4)
- TextoEspa?ol
- EditorElectronic Arts
Los Sims 4
Los Sims 4 llegan por fin a nuestros ordenadores, con la meta de hacernos disfrutar con las historias m¨¢s extra?as y extravagantes de toda la saga. Dise?o, jugabilidad y opciones renovadas, para un t¨ªtulo que celebra, con este lanzamiento, su cuarta iteraci¨®n. Vive cientos de vidas y an¨¦cdotas virtuales, con la ¨²nica ayuda de tu teclado y rat¨®n.
Con casi 15 a?os de existencia a sus espaldas, Los Sims siguen tan frescos e incansables como el primer d¨ªa. En estos 3 lustros, la saga ha visto m¨¢s de 50 t¨ªtulos, entre cada nueva entraga, expansiones, versiones para consolas o port¨¢tiles e incluso juegos para m¨®vil. El resultado final ha sido el de convertirse en uno de los videojuegos m¨¢s vendidos de todos los tiempos, con una gran legi¨®n de seguidores. Si hace unas semanas pudimos probar de primera mano las novedades incluidas en el Editor de Personajes -incluido, evidentemente, de forma completa en el juego- ahora ha llegado el turno de hacer lo propio con uno de los t¨ªtulos m¨¢s esperados de este final del verano: Los Sims 4.
Como con cada nueva iteraci¨®n, Maxis y Electronic Arts han hecho borr¨®n y cuenta nueva. Se nos proporciona el juego base que permanecer¨¢ vigente durante los pr¨®ximos a?os, y sin ninguno de los contenidos que los aficionados ya han aprendido a identificar con cada una de las expasiones: Viajes, mascotas, universidades, ... Un lienzo que, sin embargo, no est¨¢ completamente en blanco. Sus desarrolladores han agregado una serie de interesantes novedades, que completan una familiar mec¨¢nica a la que ya nos hemos acostumbrado. Los Sims 4 han querido dar una nueva vuelta de tuerca al exitoso concepto, manteniendo en todo momento las bases m¨¢s firmes y asentadas de la licencia. El resultado es una entrega que, a pesar de las nuevas inclusiones, resulta familiar y fresca en casi todo momento.

Comenzamos con el cambio de aspecto, tanto para los propios sims como para su entorno... Y el nuestro como jugadores. Partimos de una colecci¨®n de interfaces de usuario mucho m¨¢s sencillos, casi minimalistas, desde las que se muestran la m¨ªnima informaci¨®n necesaria para poder completar lo que ocurre en pantalla. La intenci¨®n es clara: Nuestros ojos tienen que estar puestos en los protagonistas, no en las barras coloreadas ni en los n¨²meros o descripciones que puedan acompa?arlas. Sus gestos, movimientos, caminar o expresiones, deber¨ªan ser espejo suficiente sobre el que se reflejen los estados an¨ªmicos y necesidades de cada personaje. Por supuesto que la pantalla nos mostrar¨¢ otras pistas, y podremos extender las opciones de interfaz para obtener informaci¨®n adicional, pero la idea es no transgredir la experiencia de juego.
Solamente permanecen visibles, en todo momento, la imagen del sim que estamos controlando, sobre los retratos de los que pertenecen a la unidad familiar. Esta informaci¨®n se dispone sobre una fina barra inferior, que ocupa menos de la mitad del espacio que en versiones anteriores. Desde ah¨ª podemos acceder a todos los men¨²s y opciones habituales: Empleo, habilidades, necesidades, inventario, velocidad del juego... Se facilita el uso de nuestro tel¨¦fono m¨®vil, tan importante para Los Sims de hoy d¨ªa como para nosotros, creando un bot¨®n de acceso directo al mismo. Los datos necesarios para disfrutar de la partida aparecen ubicados de forma elegante. Por ejemplo, se han sustituido los deseos de cada sim, por "bocadillos" de pensamiento al m¨¢s puro estilo c¨®mic, aunque su funcionamiento es pr¨¢cticamente igual que en versiones anteriores.

Las necesidades -esas que fueron protagonistas durante la primera entrega- se mantienen simplificadas, y sabremos de su urgencia mediante un c¨®digo de iconos y colores, tanto en la barra de opciones inferior como en las expresiones de Los Sims. Haciendo clic en esa opci¨®n, abriremos la totalidad de necesidades b¨¢sicas: Hambre, energ¨ªa, higiene, diversi¨®n, social, ... Simplemente haciendo clic en una de ellas, nuestro sim pondr¨¢ en cola una acci¨®n que le permita satisfacer la misma. Esta funcionalidad, ya existente en Los Sims 3, ayuda a simplificar mucho el manejo de las necesidades de nuestros protagonistas, sin tener que ir buscando por la casa cada elemento para satisfacerlas, salvo cuando queramos hacerlo de una forma concreta o personalizada.
Destaca sobre la interfaz, en todo momento, el estado de ¨¢nimo de cada sim. Este elemento, que explicaremos m¨¢s adelante, es el coraz¨®n de esta nueva entrega, y da cuerpo a los cambios de las mec¨¢nicas t¨ªpicas de la saga. Tambi¨¦n se nos muestra informaci¨®n adicional al colocar el cursor sobre un objeto, indic¨¢ndonos su propietario o qui¨¦n lo ha dejado ah¨ª, y durante las interacciones sociales con otros sims. Los datos est¨¢n ah¨ª, visibles en pantalla pero sin destacar en ning¨²n momento, y aunque a veces tengamos que movernos entre los atajos de la barra inferior para localizarlos, ayudan a que el juego transcurra con transparencia y fluidez. Porque si algo se deja notar en la nueva versi¨®n, es una mejora m¨¢s que notable del rendimiento.

Esto se puede deber a varios aspectos, pero la reducci¨®n del tama?o de los vecindarios tiene todas las papeletas para ser uno de los puntos clave a la hora de lograr una mejor fluidez. Los barrios son mucho m¨¢s reducidos que en versiones anteriores, con capacidad para una decena de familias y media docena de locales p¨²blicos. Mucho menos que en Los Sims 3, por ejemplo, y si comparamos se antojan escasos. Antes dispon¨ªamos de varios tipos de comercios, parques o edificios que visitar, pero en Los Sims 4 los vecindarios cuentan con apenas un gimnasio, bar o pub, biblioteca, museo y parque. Poca cantidad, pero no pocas opciones de interacci¨®n, porque lo cierto es que cada zona -incluyendo nuestra parcela- est¨¢ ahora m¨¢s llena de vida que nunca.
Por cada solar no dejan de pasear distintos sims, simplemente de paso o realizando su rutina de footing diaria. En cualquier momento podemos entablar conversaci¨®n con cualquiera de ellos, y lo mismo ocurre en las zonas comunes. Regresan, por cierto, algunas caras conocidas de anteriores versiones, como los L¨¢pida, omnipresentes en toda la saga. Tambi¨¦n podemos visitar cualquier vivienda, con la intenci¨®n de saludar a los vecinos o aprovecharnos un poco de su hospitalidad. Aunque, por supuesto, la que m¨¢s nos importar¨¢ ser¨¢ la nuestra, que podremos construir y modificar a nuestro antojo con el nuevo editor de parcelas. Esta herramienta tambi¨¦n goza de novedades muy bien planteadas, que facilitan mucho la acci¨®n de construir o remodelar casas... Y compartirlas posteriormente con la comunidad de usuarios del juego.

La principal novedad del editor, es la inclusi¨®n de las habitaciones como entidad. Esto permite que se puedan contar con habitaciones predise?adas, o idear nuestras propias salas. De esta manera, colocar salones, dormitorios, cocinas, ba?os o comedores es extremadamente sencillo: Simplemente escogemos un estilo que nos guste -existen variaciones de color para cada uno- y lo colocamos en el solar. Si no nos place el tama?o inicial, simplemente tendremos arrastrar los muros que queremos ampliar o reducir, y toda la sala se acoplar¨¢ a la nueva medida, eliminando los objetos que ya no quepan y manteniendo el dise?o en caso de agrandarla. Lo mismo se aplica para cada pared de la casa, y para muchos elementos arquitect¨®nicos como vallas y escaleras. Mucho m¨¢s sencillo y transparente, al igual que el editor de personajes.
Podemos trabajar de la forma tradicional, creando los muros uno a uno y despu¨¦s decorando las salas a nuestro antojo, sin dise?os predefinidos que valga. Y a¨²n as¨ª, contamos con bastantes ventajas, como la posibilidad de colocar ventanas de forma autom¨¢tica en una sala -que tender¨¢n a situarse de forma homog¨¦nea- o aprovecharnos de la nueva forma de clasificar objetos, que incluso cuenta con un buscador para facilitar la tarea. El paso del Modo Construir al Modo Vivir es casi autom¨¢tico, apenas necesita transici¨®n, por lo que ir cambiando nuestro hogar seg¨²n lo que necesitemos es todav¨ªa m¨¢s sencillo y amigable. Se echan en falta elementos consagrados -o casi consagrados- en la saga, como las piscinas o veh¨ªculos. De hecho, estos ¨²ltimos no existen en el juego en absoluto: Ni taxis, ni bicicletas, ni nada de nada...

El juego en s¨ª, en cuanto a jugabilidad se refiere, mantiene lo visto en las 3 versiones anteriores. Crearemos nuestra Unidad Familiar, y despu¨¦s iremos dando rienda suelta a nuestros deseos para ir moldeando su vida. Elegir trabajo, hacer amigos, ligar, casarse y tener hijos. Convertirnos en un as de la guitarra o un experto programador... La idea sigue siendo la misma. Tambi¨¦n la forma de interactuar con otros personajes y el entorno, mediante men¨²s radiales que se abren al hacer clic sobre un elemento del juego. Hasta aqu¨ª, todo igual a lo que hemos visto durante los ¨²ltimos 15 a?os... Pero eso no significa que Los Sims 4 no hayan incluido unas cuantas novedades en el terreno de la jugabilidad, y menos a¨²n que no sean determinantes para entender la nueva forma con la que se da forma a la vida artificial de Los Sims.
Regresan las habilidades, que se aprenden nuevamente mediante su pr¨¢ctica y estudio. Podemos adquirir libros para mejorarlas, o simplemente ponernos manos a la obra. Los Sims 4 ven aumentado el n¨²mero de pericias, a?adiendo novedades como Piller¨ªa, Comedia, Cocina Gourmet, Videojuegos o Programaci¨®n -entre otras- muy relacionadas con algunas de las nuevas carreras profesionales disponibles y ambiciones. No solamente eso, ya que ir dominando una habilidad desbloquear¨¢ nuevas opciones de interacci¨®n social o con objetos del entorno. As¨ª, alguien con mucha pr¨¢ctica en las artes musicales, podr¨¢ apreciar mejor las canciones que escucha o tocar nuevas melod¨ªas con la guitarra. Las emociones, punto fuerte de esta cuarta entrega, tambi¨¦n influir¨¢n mucho en este aspecto.

Porque el motor de Los Sims 4 es, sin lugar a dudas, el sistema de emociones. Esta nueva mec¨¢nica es la que da forma a todo el t¨ªtulo, y lo renueva. En un momento nada, cada sim -controlado por el jugador o no- presentar¨¢ un estado an¨ªmico. Pueden sentirse normales, simplemente, o inspirados, coquetos, defraudados, contentos, avergonzados, centrados, ... Existen m¨¢s de 15 combinaciones, a lo que se llega de distintas formas: En ocasiones, simplemente surgen a ra¨ªz del uso de un objeto concreto, que deriva en que nos inunde cierta emoci¨®n. Unos cuantos gestos delante del espejo, por ejemplo, pueden despertar nuestro lado m¨¢s coqueto. En otros casos, pueden surgir a ra¨ªz de lo que sucede en el entorno: Podemos sentirnos inc¨®modos si la casa est¨¢ sucia, y contentos si tiene buen aspecto.
Las emociones tambi¨¦n se desbloquean a trav¨¦s de las interacciones sociales. Si metemos la pata en una conversaci¨®n, nos sentiremos avergonzados... Y si alguien se pone a contar chistes, podremos pasar a estar contentos. Esto mismo se aplica a Los Sims controlados por la IA. Cada acto que influya en el estado an¨ªmico, quedar¨¢ marcado bajo el retrato de nuestro sim, acompa?ado de una breve informaci¨®n. Al acumularse estos eventos, nuestro sim pasar¨¢ a estar dominado por un estado an¨ªmico de los descritos, siendo su aura la primera muestra de este cambio. Porque el retrato del sim aparecer¨¢ rodeado de un color que pronto aprenderemos a identificar con cada estado de ¨¢nimo. Adem¨¢s, estas emociones pueden potenciarse entre ellas, dando lugar a resultados distintos, con combinaciones distintas.

Cuando las emociones entran en juego -y esto es casi siempre- Los Sims se ven afectados de m¨²ltiples maneras. Lo primero que notaremos, es que se desbloquear¨¢n nuevas opciones de interacci¨®n con el entorno, objetos y otros sims. As¨ª, un sim inspirado podr¨¢ pintar mejor, y uno coqueto abrir¨¢ opciones nuevas para relacionarse. Adem¨¢s, los deseos del sim cambiar¨¢n para verse tambi¨¦n afectados por el estado an¨ªmico. Generalmente, querremos realizar las acciones que potencien los estados buenos, y las que aten¨²en los negativos. Por eso, un sim estresado puede querer un ba?o relajante, mientras que uno muy coqueto quiz¨¢s quiera un "?iqui-?iqui". Las emociones influyen hasta en el uso de las habilidades, mejorando muchas de ellas. Por cierto, tambi¨¦n hay veces que cambiar¨¢n simplemente al despertarnos por la ma?ana. Al fin y al cabo, uno puede despertarse contento, inc¨®modo o especialmente inspirado.
Afectan tambi¨¦n los rasgos de personalidad de cada sim, e incluso el trabajo puede requerir de ciertos estados de ¨¢nimo para nuestro ascenso, o para desempe?ar mejor nuestra labor. Es l¨®gico, puesto que los artistas rendir¨¢n mucho mejor en el caso de encontrarse inspirados, por ejemplo. Lo contrario tambi¨¦n suele darse: Lo que haya ocurrido durante las horas laborables, afectar¨¢n a nuestras emociones. Uno puede llegar estresado de la oficina, o defraudado por alg¨²n motivo... No siempre ser¨¢n negativos, por supuesto, y pronto aprenderemos a buscar los elementos y acciones que nos permitir¨¢n llegar a las emociones que deseamos tener en cada momento, pues hasta podemos leer libros de auto-ayuda que nos permitan alcanzarlos. Pero, por mucho que lo intentemos, Los Sims son gente de car¨¢cter variable, y no es posible controlar sus sentimientos en todo momento.

Para darnos cuenta de las emociones de un sim, podemos hacer varias cosas. Si es uno de nuestra unidad familiar, lo veremos reflejado en su retrato. Y forme parte, o no, de los que controlamos directamente, sus gestos y forma de andar cambiar¨¢n. Un sim enfadado ir¨¢ enfurecido de un lado a otro, y uno avergonzado parecer¨¢ que quiere que se le trague la tierra. Adem¨¢s, si entablamos una conversaci¨®n, recibiremos informaci¨®n del estado an¨ªmico de cada uno de los interlocutores. S¨ª, hablamos en plural, porque en Los Sims 4 pueden unirse varias personas en una misma charla. Mejor a¨²n, porque ahora pueden realizar otras tareas mientras hablan, como cocinar, ver la tele, practicar o hacer deporte... Incluso en grupos. Y ah¨ª tendremos sims dominados por todo tipo de emociones, en cada momento.
La IA se ha mejorado en ciertos aspectos, y a su vez parece haberse reducido en otros. En cuanto a comportamiento de los personajes, dej¨¢ndose guiar por las emociones, el trabajo es magistral y apenas hay m¨¢cula que criticar. Pero en cuanto a relaci¨®n con el entorno, parece haber perdido algunas caracter¨ªsticas. Los Sims tienden, de forma general, a no escoger los mejores elementos para satisfacer sus necesidades, y en ocasiones parece que todo lo que ocurre a su alrededor se la trae -con perd¨®n- un poco floja. Poco importa que nuestra mujer nos vea poni¨¦ndonos coquetos con la vecina, os aseguramos que luego no tendr¨¦is bronca en casa. Esto s¨ª que suced¨ªa en versiones anteriores, y habr¨ªa sido magn¨ªfico verlo en conjunci¨®n con el nuevo sistema de emociones.

A¨²n as¨ª, repetimos, s¨ª que se aprecia una ligera mejora en la IA que controla su comportamiento. Eso da lugar a situaciones de todo tipo: Desde sims contentos intentando alegrar el d¨ªa a otros enfurecidos, a sims coquetos que no conseguir¨¢n nada por sentirse inc¨®moda la otra persona. Y de ah¨ª nacen las historias tan extravagantes que promet¨ªan Maxis y Electronic Arts durante las presentaciones del t¨ªtulo. Porque si juntamos a varios sims, con distintos rasgos, emociones y deseos, la mezcla puede dar lugar a todo tipo de situaciones. Aqu¨ª el gran acierto de los responsables de la saga, y el mayor punto a favor de Los Sims 4: Que una mec¨¢nica tan asentada como la de Los Sims, haya conseguido modificarse mediante la introducci¨®n de este nuevo elemento, pero sin perder la base que todos recordamos de entregas anteriores.
De hecho, su efecto en la jugabilidad queda patente desde el primer momento -afortunadamente, nuestros primeros pasos en Los Sims 4 estar¨¢n guiados, para ayudarnos a la hora de asumir los cambios realizados en el juego- y cambian significativamente su din¨¢mica. A¨²n as¨ª, seguiremos teniendo esa sensaci¨®n de que las horas del d¨ªa se nos quedan cortas, entre satisfacer necesidades y trabajar. Sigue ocurriendo que el juego se convierta, m¨¢s que en una simulaci¨®n de vida artificial, en un trabajo de gesti¨®n del tiempo... Que al final es lo que sucede, m¨¢s o menos, en las vidas de -hasta el m¨¢s pintado de- los mortales. Este efecto, que tambi¨¦n se produce en anteriores entregas, puede minimizarse con las recompensas que iremos obteniendo al cumplir los deseos de nuestros sims, y satisfacer sus ambiciones.

Porque las ambiciones regresan, una vez m¨¢s, marcadas a su vez por los rasgos de personalidad. Sin embargo, ahora es posible cambiar nuestra meta en cualquier momento, por otra que nos parezca m¨¢s adecuada. Esta primera elecci¨®n de personalidad -la ambici¨®n- es la que definir¨¢ el primero de nuestros rasgos, que luego acompa?aremos con otros 3 elegidos por nosotros. As¨ª, podremos ser creativos, amables, irascibles, rom¨¢nticos, vagos, pulcros, mezquinos, buenos, ... Y, como todo lo visto en la cuarta entrega, esto afectar¨¢ a nuestras acciones y, a su vez, se ver¨¢ influenciado por los estados an¨ªmicos. As¨ª durante toda la vida de nuestros sims, conformada por distintas etapas: ni?ez, adolescencia, adultez, madurez y senectud. Desaparece la etapa de infante, que ampliaba el paso de beb¨¦ a ni?o, durante la cual muchos aprovechaban para aumentar las caracter¨ªsticas de cara al futuro.
Hay otros cambios jugables, como los eventos sociales. Ahora, las fiestas tendr¨¢n su propio objetivo de forma que, si conseguimos realizar una celebraci¨®n muy buena, recibiremos recompensas. La interfaz de preparaci¨®n de fiestas nos permitir¨¢ escoger hasta 8 anfitriones, 15 invitados, un artista para que amenice el evento, encargado del catering y camarero. Pero, adem¨¢s, tendremos que ir cumpliendo algunos hitos durante la celebraci¨®n: Conseguir que los invitados cuenten cierta cantidad de chistes, se beban unas cuantas copas o que se disfruten de los juegos disponibles, Cuantos m¨¢s objetivos cumplamos, mejor ser¨¢ la impresi¨®n general de la fiesta y mayor nuestra puntuaci¨®n, hasta lograr la ansiada recompensa. Claro que, con esto de los estados de ¨¢nimo, lograr que todo el mundo se r¨ªa no es tan f¨¢cil.

Si hace unos cuantos p¨¢rrafos habl¨¢bamos de las novedades del Modo Construir, la compra de objetos tampoco se ha quedado atr¨¢s. Desaparecen algunos que han quedado obsoletos, como los tel¨¦fono fijos o inal¨¢mbricos... Y otros que echamos de menos, como el triturador de basuras. Por supuesto, se a?aden unas cuantas novedades. Las videoconsolas, por ejemplo, ya no son de mesa o port¨¢tiles: Se trata de peque?os espacios de realidad aumentada en los que Los Sims interaccionan con el juego. Algunos objetos han mejorado su capacidad de interacci¨®n, y ahora podemos escoger lo que queremos cocinar directamente desde el frigor¨ªfico u horno, y se nos indicar¨¢ si nos faltan ingredientes o las raciones que queremos producir. Una vez m¨¢s, los objetos pueden cambiarse en dise?o y color, moverse libremente o colocarse en el inventario.
Cabe destacar que, en Los Sims 4, los personajes pueden sentarse sobre casi cualquier superficie. M¨¢s all¨¢ de sillas y sof¨¢s, lo m¨¢s evidente, una conversaci¨®n en el dormitorio puede acabar con alg¨²n sim sentado en el borde de la cama... Y cosas as¨ª. Adem¨¢s, Los Sims pueden moverse mientras hablan, y una vez formado un grupo de conversaci¨®n puede hacerse que se desplace unido. Tambi¨¦n, hablando de grupos, se ha mejorado la b¨²squeda de caminos para llegar a los elementos con los que se interacciona. Los Sims ya no tienden a formar colas, bloque¨¢ndose unos a otros para llegar al ba?o o al frigo, por ejemplo. Y la rara vez que lo hace, aprovechan para comenzar una conversaci¨®n con qui¨¦n les est¨¢ obstaculizando, que luego no interrumpe su propio movimiento.

Pero la falta de contenido, que ya hemos mencionado anteriormente, est¨¢ ah¨ª. No es una percepci¨®n comparada con Los Sims 3 junto con todas sus expansiones -donde la cantidad de elementos ya resulta colosal- si no como concepto b¨¢sico de cada nueva iteraci¨®n. El verdadero error de Maxis y Electronic Arts, ha sido el de recortar algunas opciones que exist¨ªan desde los inicios de la serie. S¨ª, se puede aludir a razones t¨¦cnicas... Pero es como defender la ausencia de un bal¨®n en FIFA porque se ha necesitado mucho esfuerzo para que Cristiano Ronaldo haga chilenas m¨¢s realistas. Las bases de contenido deber¨ªan haberse respetado con la misma rectitud que las jugables, y el resultado final habr¨ªa dado una sensaci¨®n mucho m¨¢s completa. Actualmente, y por desgracia, Los Sims 4 parecen un espacio vac¨ªo destinado a las expansiones.
Gr¨¢ficamente, nos encontramos ante la versi¨®n m¨¢s animada y colorida de la saga de Maxis. Partiendo de un estilo ligeramente m¨¢s caricaturizado, Los Sims gozan de movimientos mucho m¨¢s variados y naturales, lo que favorece la identificaci¨®n de sus estados an¨ªmicos. Desde la forma de caminar, hasta los gestos en cada acci¨®n -como cocinar- son dignos de cualquier pel¨ªcula de animaci¨®n que se precie. Las texturas, acompa?ando a lo c¨®mico del dise?o, est¨¢n repletas de color y son mucho m¨¢s vivas. El resultado es un juego muy atractivo a nivel visual, con una gran calidad que no llega a restar fluidez al t¨ªtulo, quiz¨¢s porque son otros los elementos que han sido eliminados para favorecer esto. Dejar a Los Sims a su aire, es ahora mucho m¨¢s divertido, dando la impresi¨®n de que estamos presenciando alguna sit-com en versi¨®n animada.

El sonido, como siempre en la saga, muy cuidado. Desde las voces de los personajes, expresadas en distintos tonos y entonaciones seg¨²n cada sim y lo que quiera expresar, como las canciones y las melod¨ªas que escucharemos en la radio. Hay que destacar que se ha producido una sustancial mejora a la hora de que expresiones faciales y gestos, se correspondan con las voces de cada sim, facilitando as¨ª que las interacciones parezcan m¨¢s cre¨ªbles. Los efectos de sonido que acompa?an a las distintas interacciones vuelven a integrarse a la perfecci¨®n, como en anteriores ocasiones. Todo detalle t¨¦cnico, visual o sonoro, est¨¢ bastante cuidado en la nueva entrega... Nada se ha dejado al azar. Eso da lugar a un conjunto m¨¢s que notable, claramente el mejor que se ha producido en la saga, siendo uno de los mejores saltos audiovisuales desde que Los Sims adquiriesen su segunda entrega.
No existe modo en red, evidentemente, pero s¨ª la posibilidad de subir nuestras creaciones -unidades familiares o viviendas- a nuestra galer¨ªa personal. Desde all¨ª, cualquier amigo puede descargar lo que le guste de nuestra ideas, para integrarlas en la nueva partida. Sin embargo, la conexi¨®n en red no es obligatoria, y podemos jugar desconectados si no queremos usar esta opci¨®n. Cabe destacar una nueva opci¨®n del juego, que es la de habitar de forma autom¨¢tica las viviendas vac¨ªas, que se une a la de que el resto de vecinos envejezca a nuestro ritmo (Esta ¨²ltima ya exist¨ªa en Los Sims 3). De esta manera, se consigue que el escenario principal, nuestro vecindario, sea mucho m¨¢s realista y no acabemos con una familia en la que el abuelo, el padre y el hijo adolescente han tenido alg¨²n flirteo con la despampanante vecina de al lado, que nunca parece envejecer.

En cuanto a requisitos, el juego puede parecer un poco m¨¢s exigente que Los Sims 3 en su modo m¨¢s b¨¢sico, aunque lo cierto es que -como dec¨ªamos- corre de forma mucho m¨¢s fluida que cualquiera de los lanzamientos b¨¢sicos en su d¨ªa. Desde las opciones podemos activar un modo para ordenadores port¨¢tiles, que reducir¨¢ algo la carga para que estos dispositivos puedan correr el juego de forma optimizada. Se nota mucha mejor¨ªa a la hora de iniciar nuevas partidas, editar personajes o viviendas, desplazarnos a otras ubicaciones del barrio... Y todo ello teniendo en cuenta lo que hemos contado antes sobre el apartado t¨¦cnico. Posiblemente, junto al sistema de emociones, este es uno de los mayores logros de esta nueva edici¨®n de Los Sims. Evidentemente, todos sabemos que es a la hora de ir a?adiendo expansiones cuando el juego m¨¢s se resiente, pero en este caso se parte de una muy buena base.
El juego mantiene la esencia de la saga, de eso no hay ninguna duda. Pero, a su vez, han conseguido re-dise?ar opciones y mec¨¢nicas para que un t¨ªtulo, perfectamente asentado entre los usuarios, se vuelva a¨²n m¨¢s amigable y c¨®modo. La introducci¨®n de las emociones, que es el coraz¨®n de la nueva entrega, es a su vez una de las mec¨¢nicas m¨¢s originales que nos hemos encontrado en los ¨²ltimos a?os. Maxis ha retomado la saga con fuerzas, y aunque han recortado algunas opciones que ya parec¨ªan consolidadas, el resultado final es magn¨ªfico. Seguro que muchos de los elementos desaparecidos, acabaran regresando en los pr¨®ximos paquetes de expasi¨®n -que nadie dude que Los Sims 4 contar¨¢n con unos cuantos de estos, pues siempre ha sido as¨ª- y ya tenemos ganas de ver c¨®mo se integrar¨¢n las mascotas y todas esas opciones que acaban apareciendo en las opciones ampliadas.

Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.