Xenoblade Chronicles X, Impresiones E3
Aunque no tuvo un papel muy destacado en el correspondiente Nintendo Direct, Xenoblade Chronicles X hizo acto de presencia en el showfloor de Los ?ngeles con una demostraci¨®n real de cuarenta minutos que desgranamos de principio a fin. La secuela espiritual del aclamado t¨ªtulo de Wii perfila su lanzamiento para 2015 y estas son sus credenciales.
Xenoblade Chronicles fue sin duda uno de los t¨ªtulos m¨¢s destacados del cat¨¢logo de Wii no s¨®lo en los ¨²ltimos meses de su actividad en el mercado, sino en general en la dilatada vida ¨²til que tuvo la consola. Mucho se ha hablado de la influencia que tuvo sobre el desarrollo de JRPGs de nuevo cu?o y de la interesante vuelta de tuerca que supuso dejar atr¨¢s el tradicional sistema lineal (o siempre centrado en un argumento) para ofrecer un mundo extenso y con un sinf¨ªn de misiones secundarias que realizar. La idea de poder disfrutar s¨®lo de la trama profundizando en determinados aspectos en funci¨®n de los intereses de cada jugador fue una de las virtudes con las que consigui¨® conquistar al p¨²blico occidental, que tuvo que pasar por un tedioso proceso de espera entre el lanzamiento japon¨¦s y el europeo. Finalmente fue Nintendo la compa?¨ªa que se encargar¨ªa de la distribuci¨®n del t¨ªtulo cuando ya muchos daban por perdida toda esperanza de verlo por estos lares.
No es de extra?ar por lo tanto que su secuela, Xenoblade Chronicles X, sea desde su anuncio uno de los videojuegos que se esperan con m¨¢s ansia. Se daba por sentado que el t¨ªtulo iba a ser uno de los pilares de la particular ¡°conferencia¡± que Nintendo ofrece durante la celebraci¨®n anual del E3, pero curiosamente no ha sido as¨ª. Monolith sorprendi¨® con un breve tr¨¢iler de dos minutos de duraci¨®n en el que se dejaba entrever una notable mejora gr¨¢fica con respecto a lo que se conoc¨ªa anteriormente, as¨ª como algunas caracter¨ªsticas b¨¢sicas del gui¨®n, del que ahora conocemos no se trata de una secuela directa, sino m¨¢s bien espiritual que pese a todo cuenta con todo el equipo del proyecto original a sus espaldas. El director del mismo, el conocido Tetsuya Takahashi, explicaba que de esta manera se pod¨ªan permitir ser fieles al estilo ser verse condicionados por los acontecimientos que tuvieron lugar en el original.

Personaliza tu historia
Por suerte, el tr¨¢iler s¨®lo era la primera muesca visual de Xenoblade en la feria angelina. Fue Nintendo la encargada de anunciar pocos minutos despu¨¦s que se mostrar¨ªa una demostraci¨®n en tiempo real y guiada por uno de sus creadores, en la que se muestra metraje del juego en una aproximaci¨®n de cuarenta minutos a los primeros pasos de la aventura. A trav¨¦s de ella, accesible desde el canal oficial de Nintendo, comprobamos que se mantienen intactas muchas de las se?as de identidad del t¨ªtulo original, adem¨¢s de regocijarnos con el indiscutible potencial que muestra Wii U a la hora de generar grandes escenarios repletos de fauna y flora de diversas clases y tipos.
El pistoletazo de salida tiene lugar con una introducci¨®n que nos sit¨²a directamente en los acontecimientos que tuvieron lugar al finalizar Xenoblade, en la hipot¨¦tica realidad donde dos razas alien¨ªgenas pelean entre s¨ª en lo que parece ser la ¨®rbita del planeta Tierra. La raza humana se ve forzada a luchar y posteriormente a abandonar su hogar para dirigirse a un nuevo planeta en el que aterriza de forma brusca. Entre los supervivientes se encuentra nuestro alter-ego virtual,? una figura que podemos personalizar a trav¨¦s de distintas capas en las fases previas a la primera toma de contacto real con la mec¨¢nica de juego. Aqu¨ª se hace ¨¦nfasis en la calidad visual que muestran los rostros, altamente personalizables, aunque el representante de Nintendo apenas se detiene unos segundos en este punto. ¡°Lo que realmente importa es comenzar a jugar¡±, comenta, ¡°y que podremos cambiar desde el color del pelo a la apariencia¡±, siempre con la mirada puesta en conseguir que nos sintamos m¨¢s protagonistas de la aventura.



Un nuevo mundo
Cuando comienza la partida se entiende con facilidad el ansia por mostrar el mundo que Xenoblade Chronicles X nos invita a explorar. La primera impresi¨®n que recibimos es la de estar ante una versi¨®n muy mejorada de la introducci¨®n del Xenoblade original, con dos personajes que se encuentran en una zona boscosa claramente delimitada. En la parte inferior aparece un HUD que nos indica mediante una flecha hacia d¨®nde debemos dirigirnos, as¨ª como la cl¨¢sica informaci¨®n sobre el estado del protagonista, su vitalidad, etc¨¦tera. La niebla y la lluvia son dos factores meteorol¨®gicos que dotan al bosque de un car¨¢cter opresivo y carism¨¢tico, muy com¨²n en el imaginario de pel¨ªculas de ciencia ficci¨®n que abordan el descubrimiento de un nuevo mundo.
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Estos primeros pasos sirven para que el jugador se familiarice con la mec¨¢nica de combate, que de nuevo se perfila como una versi¨®n mejorada del que tuvimos ocasi¨®n de conocer en el Xenoblade original. El sistema aboga por el uso de comandos desglosados en tiempo real, con un ataque b¨¢sico (digamos, atacar) y con posibilidad de potenciarlo para conseguir m¨¢s fuerza de ataque o de reacci¨®n. En la l¨ªnea del camino impuesto por The Last Story, parece que Monolith ha decidido nuevamente implementar un sistema cuya integraci¨®n depende de la pericia del jugador, ya que nos permite atacar de forma manual y/o estrat¨¦gica o semi-autom¨¢tica. Los ataques del protagonista se realizan mediante una pistola y a distancia, de manera que evita los embistes de los animales que campan por el bosque.




Hay una gran variedad de especies pululando de un lado a otro y cada uno muestra un estado distinto de excitaci¨®n ante nuestra presencia. El estado del tiempo (si llueve o hace sol), unido al momento del d¨ªa en el que nos encontremos (d¨ªa, mediod¨ªa, noche, madrugada¡) determina el comportamiento y de fiereza de los monstruos, contra los que no siempre nos vemos obligados? enfrentarnos. Se ofrece la opci¨®n de escoger si primero queremos explorar y observar los puntos d¨¦biles de los enemigos o si por el contrario preferimos simplemente atacar sin darle demasiadas vueltas a la cabeza. Cada jugador determina c¨®mo quiere que sea su experiencia, aunque cada decisi¨®n trae consigo consecuencias espec¨ªficas que est¨¢n ligadas al aumento de experiencia tanto de nuestro h¨¦roe como de los personajes que nos acompa?an en la aventura.
Pronto abandonamos el bosque para aparecer en una amplia pradera monta?osa, dominada por criaturas cuyo dise?o se asemeja al de un dinosaurio y desde la cual podemos vislumbrar el paisaje. Podemos ver hasta donde alcanza la vista toda clase de animales pastando o peleando por una zona territorial, cumbres, laderas y vegetaci¨®n variopinta. La excitaci¨®n es tal que los propios asistentes a la demostraci¨®n parecen sorprendidos ante el dr¨¢stico cambio que experimenta este mundo cuando el cresp¨²sculo comienza a dominar el cielo. Colores rojizos mezclados con tonalidades de gran belleza est¨¦tica indican que el d¨ªa est¨¢ pr¨®ximo a su fin, aunque para ver estas escenas primero hemos de pasar por varios combates en los que se analiza a consciencia c¨®mo discurren los enfrentamientos.
En esta ocasi¨®n el protagonista combate mano a mano con Alma, una muchacha que porta dos espadas y a la que b¨¢sicamente ofrece soporte: mientras ella lo distrae, nosotros tratamos de atacar en sus puntos d¨¦biles. La cooperaci¨®n entre varios jugadores es crucial para planificar bien los combates m¨¢s complejos, algo muy a tener en cuenta si nos fijamos en el tama?o que muestran algunas de las criaturas que conocemos en esta ocasi¨®n. La consola es capaz de reproducir toda clase de entornos sin mostrar ralentizaciones, aunque s¨ª observamos c¨®mo desaparecen o aparecen repentinamente algunas texturas que completan la decoraci¨®n de los senderos. L¨®gicamente habr¨¢ que esperar a conocer el resultado final de la obra cuando aparezca en el mercado en lo referente al plano gr¨¢fico, pero no cabe la menor duda que Nintendo y Monolith han llevado a otro nivel la capacidad t¨¦cnica de la consola. Al menos, a juzgar por el fant¨¢stico aspecto que luce la ciudad que conocemos cuando finalmente termina la demostraci¨®n.





Artes y evoluci¨®n
Hay algunos aspectos a destacar que pudimos observar durante la demostraci¨®n,? como la obtenci¨®n de artes o el desarrollo de nuevas habilidades espec¨ªficas al canjearlas por puntos recibidos en los combates. La complejidad de los men¨²s es tal que los propios presentadores bromean con la posibilidad de ¡°perderse¡± en su contenido. Desde aqu¨ª podemos personalizar a los personajes cambiando su indumentaria con nuevas armaduras o espadas que posteriormente aparecen tambi¨¦n representadas en pantalla. Habr¨¢ que ver hasta qu¨¦ punto se expande esta idea y si Monolith consigue rivalizar con las aventuras m¨¢s significativas del RPG Occidental, en el que se inspira sin el menor tapujo para potenciar las novedades que se introducen en el RPG japon¨¦s. El abanico de posibilidades con el que contamos nos permite, seg¨²n se explicaba en el showfloor, tomar las riendas de un veh¨ªculo mecanizado (un robot b¨ªpedo, por ejemplo) para explorar con facilidad la ciudad sin perder demasiado tiempo.
La exploraci¨®n vuelve a verse recompensada con logros introducidos en la propia interfaz de la aventura y con misiones secundarias que expanden el argumento, exactamente en la misma l¨ªnea del Xenoblade original. Aunque no siempre es obligatorio combatir a los enemigos que encontramos mientras descubrimos zonas salvajes, al hacerlo es posible que nos veamos recompensados con mejores armas o con objetos ¨²tiles para la creaci¨®n de nuevos hechizos o derivados. Para poder vivir una experiencia ¡°completa¡± es fundamental disfrutar de todo lo que ofrece la aventura, pero no es imprescindible para alcanzar el final de la misma. De nuevo aqu¨ª se entiende la intenci¨®n de Monolith al permitir que sean los jugadores los que elijan c¨®mo desean vivir Chronicles X, pese a que inevitablemente existen algunos puntos infranqueables que son gen¨¦ricos en cualquier RPG que se precie.


2015
Xenoblade Chronicles X se perfila como una secuela espiritual que potencia las virtudes de su antecesor en todos los apartados. Una vez m¨¢s, Monolith sit¨²a gran parte del atractivo de la aventura en explorar nuevos territorios y en comprender a los animales que en ellos habitan para nuestro propio beneficio. Los combates, de los que se han mostrado algunas pinceladas, permiten varios enfoques, con especial ¨¦nfasis en el sistema autom¨¢tico en tiempo real que nos permite realizar estrategias sin necesidad de parar la partida. Todo aquel que haya disfrutado del Xenoblade original ver¨¢ en estas novedades una evoluci¨®n natural de lo vivido hace unos a?os. Ser¨ªa absurdo negar este hecho, como tambi¨¦n que el contraste gr¨¢fico supone un punto muy a favor de la exploraci¨®n de escenarios. Permanecer en lo alto de una colina y observar c¨®mo se comporta un animal que parece estar a un buen par de kil¨®metros es una sensaci¨®n que a buen seguro empujar¨¢ a m¨¢s de un jugador a lanzarse a descubrir una aventura que no ver¨¢ la luz en Jap¨®n hasta 2015.
Siendo esta la primera vez que el juego se muestra en tiempo real, es de prever que Nintendo comience a ofrecer nuevos datos sobre el argumento, el punto que quiz¨¢s todav¨ªa permanece en un segundo plano, as¨ª como nuevos v¨ªdeos con los que seguir descubriendo la mec¨¢nica de combate o los nuevos m¨¦todos de desplazamiento dentro de las ciudades. M¨¢s importante que todo esto es, sin embargo, la idea de estar ante un JRPG que promete seguir los pasos de uno de los pocos exponentes que parece firme en la propuesta de cambiar la tradici¨®n del g¨¦nero. Xenoblade Chronicles X se perfila como uno de los candidatos a juego de la feria, o al menos as¨ª parece indicar la excelente recepci¨®n popular que ha tenido tanto la demostraci¨®n como el tr¨¢iler mostrado en el showfloor.

- Acci¨®n
- RPG
Xenoblade Chronicles X es un proyecto de Monolith Soft y Nintendo para Wii U, un RPG de corte futurista ambientado en un mundo centrado en el binomio entre humanos y robots.