XGRA (GameCube)

Desde los albores de la extrema velocidad, en aquellos circuitos de 64 bits de Nintendo, Acclaim sabía que calaría hondo en muchos aficionados al género de la conducción futurista. La inercia y ligereza de control que ofrecía Extreme-G se ha mantenido casi al cien por cien en todas y cada una de las sucesivas entregas. Tras el salto a la nueva generación de consolas, XGRA promete ser distinto. ?Será bueno o malo?

?Alguien puede decir cómo se genera una idea feliz en el ser humano? No voy a tratar temas filosóficos en este artículo, pero es obvio que estas ideas son el principio de los grandes juegos, aquellos que sientan cátedra y, con el paso de los tiempos, arrastras legiones de programas que copian parte o todas sus directrices. Asentando los cimientos del género de las carreras futuristas, surgieron títulos como WipeOut o F-Zero, dos juegos que, a pesar del tiempo transcurrido y tras haber sido superados claramente en la parte técnica por el lógico avance, aún consiguen transmitirnos una sensación vibrante y de pura y auténtica velocidad.

Acclaim cogió un poco de allí y de allá, dando el protagonismo esta vez a innovadores vehículos de dos ruedas 'algo' más avanzados que las motos que conocemos hoy día. De este modo comenzaba la vertiginosa competición de Extreme-G, un peligroso deporte del siglo XXIII, la fama y el dinero a costa de poner en riesgo la vida. Aún con el semáforo en rojo, quedémonos en boxes para preparar la cuarta edición de la liga de las estrellas más rápidas del universo. Y para empezar, ?qué diablos significa XGRA?

Elige tu escudería

Ni más ni menos que las siglas de la compa?ía que maneja los hilos del espectáculo, eXtreme Gravity Racing Association. En esta nueva edición, Acclaim promete mejorar y potenciar al máximo la maquinaria que se pondrá a disposición de los temerarios corredores, tanto en el apartado de vehículos como en el variado arsenal de armas y avanzados artefactos, que incluirán implantes biónicos para nuestro cuerpo al más puro estilo Cyberpunk.

Para poder hacerse con este amplio abanico de motos y complementos usaremos el dinero que vayamos consiguiendo por conseguir una serie de objetivos que nos marque el equipo, otra novedad ideada por la división de Cheltenham de Acclaim. Nuestra escudería nos fichará exigiéndonos el máximo rendimiento, y podrá prescindir de nosotros si no se encuentra satisfecha con los resultados. El contrato con nuestro patrocinador no nos eximirá ni siquiera de llevar a cabo misiones secundarias a favor de la empresa que aumentarán nuestro caché y nuestra cuenta bancaria. Existirá rivalidad entre ciertos equipos, afectando este hecho a la posible IA de los conductores enemigos que controlará la CPU. Parece que Acclaim quiere redimensionar la competición dotándola de la profundidad que proporcionan las estrategias de equipo y alejándose un poco del individualismo de otras entregas.

Entrando ya en detalles propios de jugabilidad, hay algo que sobresale por encima de lo demás: el ritmo de juego va a ralentizarse, por un lado, en un porcentaje lo suficientemente alto como para que el combate directo con los contrincantes cobre una dimensión mucho más importante que en anteriores entregas; y por otro lado, en un porcentaje lo bastante bajo como para que sigamos disfrutando de esa sensación de velocidad tan característica y especial que ha ido forjando Extreme-G capítulo a capítulo. A priori parece difícil de equilibrar esta balanza, y para ello XGRA contará con circuitos mucho más anchos de lo que estamos acostumbrados. Aún a riesgo de perder el espíritu XG, es plausible el esfuerzo que Acclaim está haciendo por construir un juego que de verdad se desmarque del resto de la saga.

Rozando el límite

Otro de los puntos más característicos de los Extreme-G es el peculiar control de las motocicletas. La dirección es muy ligera, de modo que el giro hacia los lados se lleva a cabo con mucha rapidez. Esto ha impregnado de una endiablada dificultad a los XG, exigiendo un largo proceso de aprendizaje y adaptación a este control. Para esta cuarta entrega, Acclaim habilitará el uso de los botones L y R para ajustar aún más la traumática maniobra del giro, recordando en este sentido al manejo que ofrecía el original Wipeout.

Respecto al apartado gráfico, el engine será una vuelta de tuerca más al sobresaliente trabajo realizado con Extreme-G 3. Los escenarios serán más anchos y amplios en general, y gozarán de un detalle gráfico similar a su predecesor, eso sí, con una mayor definición. Es digno de destacar la transición día/noche y la aparición de efectos climatológicos de carácter aleatorio en el transcurso de las carreras, que afectarán sobremanera a nuestra conducción y realzará el buen nivel del conjunto gráfico.

Alcanza el extremo G

Tras el gran sabor de boca que dejó la tercera parte de Extreme-G, XGRA presenta sus credenciales para mantener el excelente nivel que mostró su predecesor. Acclaim ha optado por sacrificar velocidad y ganar en profundidad y estrategia. Quizá no siente demasiado bien a los fanáticos de XG, pero es indudable que cuando una saga alcanza cierto número de entregas, siempre agradece un soplo de aire fresco. En unos meses veremos cómo acaba el campeonato