Ser cornerback es el trabajo m¨¢s ingrato del football
El partido entre Buffalo Bills y New York Jets dej¨® en evidencia una realidad: la inferioridad de los cornerbacks respecto a los receptores.

El partido del jueves noche entre Buffalo Bills y New York Jets dej¨® en evidencia una realidad de la NFL que cada jornada se hace evidente: la inferioridad de los cornerbacks respecto a los receptores. En ese encuentro vimos a Ryan Fitzpatrick completar m¨¢s pases profundos que en toda su carrera y a Tyrod Taylor sobrevivir a base de lanzamientos largos en una secuencia poco habitual de big play tras big play.
No es el primer bombardeo de este calibre que se ve en la liga. El a?o pasado hubo un Giants-Saints que acab¨® con m¨¢s de 800 yardas y 13 touchdowns entre los dos QBs pero la diferencia entre ese partido y este es que en los Bills y en los Jets hay buenos cornerbacks. Y cuando digo quiero decir jugadores entre los 10-15 mejores en su posici¨®n. Darrelle Revis, a pesar de sus limitaciones por la edad, Ronald Darby y Stephon Gilmore son tres cornerbacks respetados y contra los que toda ofensiva tiene que prepararse a fondo. ?Qu¨¦ pas¨® entonces el jueves para que vi¨¦ramos quemados a los tres?
Sencillamente que hay jugadores y jugadas que un cornerback no puede frenar solo por muy bueno que sea. El primer ejemplo es el touchdown de Marquise Goodwin superando a Revis. Goodwin marc¨® el mejor tercer tiempo de la historia en la 40 yardas de la Combine hace tres a?os (4.27) y ha competido en los Juegos Ol¨ªmpicos. Esperar que Revis pueda plantar cara en un pase de 60 yardas a Goodwin es pedir un milagro. Probablemente ni el mejor Revis, el de 2009-2011, habr¨ªa sido capaz de imponerse. Y digo probablemente porque ese Revis s¨ª hac¨ªa milagros pero esto es demasiado.
El segundo ejemplo es un pase de 40 yardas a Quincy Enunwasobre Gilmore en el primer drive del partido. Veamos el momento de la recepci¨®n:

Fitzpatrick pone el bal¨®n medido donde solo Enunwa lo puede atrapar. Gilmore hace todo lo que puede pero es imposible que fuerce un incompleto en una jugada como esta. Incluso si el pase no hubiera sido perfecto, Enunwa le saca 20 kilos a Gilmore. En caso de tener que luchar por el bal¨®n est¨¢ claro qui¨¦n tiene ventaja.
En ambas jugadas, el cornerback aparece como el malo de la pel¨ªcula cuando en realidad no ten¨ªa nada que hacer. Quiz¨¢s Revis podr¨ªa haberse situado m¨¢s profundo en el snap pero habr¨ªa dejado muchas yardas libres para un pase corto. Quiz¨¢s Gilmore podr¨ªa haber sido m¨¢s agresivo durante la ruta pero se arriesgaba a cometer una falta o a que Enunwa impusiera su f¨ªsico y costarle m¨¢s yardas todav¨ªa.
No pueden ganar. As¨ª de sencillo. Hubo muchas situaciones como estas en el partido, especialmente con los CBs de los Bills como v¨ªctimas y por ah¨ª se explica la derrota de su equipo.Vemos dos ejemplos m¨¢s:

Brandon Marshallcontra Darby. Este es el principio de la ruta. La diferencia de tama?o es notable y el control que tiene el receptor sobre el cornerback todav¨ªa m¨¢s. Darby fue capaz de recuperar la posici¨®n pero no puedo evitar la recepci¨®n. Los Jets avanzaron 37 yardas con este jugada.

Eric Decker contra Darby. La ruta es una finta de out para luego atacar verticalmente. Aqu¨ª Darby no est¨¢ libre de culpa porque se traga la finta como se ve en la imagen pero esperar que pueda defender ¨¦l solo esta ruta es de locos. Y m¨¢s despu¨¦s del continuo abuso al que le hab¨ªa sometido Marshall durante los tres cuartos anteriores
La clave de estas situaciones est¨¢ en los interrogantes de la ¨²ltima imagen. ?Qu¨¦ hace ese safety? ?Qu¨¦ est¨¢ defendiendo? Los ejemplos que he puesto son situaciones de uno contra uno, sin ayuda del safety, que ponen much¨ªsima presi¨®n sobre los cornerbacks. A pesar de las evidencias Rex Ryan no cambi¨® ni un ¨¢pice su plan y sigui¨® as¨ª hasta el final del partido con el resultado que todos conocemos.
Esta es la intercepci¨®n de Marcus Williamsal principio del ¨²ltimo cuarto:

El pase no es perfecto ni mucho menos pero si Williams se puede permitir jugar agresivo, buscando la intercepci¨®n, es porque sabe que tiene al safety cerca y, si el bal¨®n le supera, va a llegar Marcus Gilchrist a tiempo.
Esa es la diferencia respecto a lo que hemos visto anteriormente. Y si es diferente es porque Williams no tiene el nombre que tienen Revis, Gilmore o Darby. En la NFL se lleva mucho eso de dejar a tu mejor cornerback en continuos 1vs1 contra el mejor receptor rival y la mayor¨ªa sale mal o fatal.
Cada vez vemos receptores m¨¢s altos, m¨¢s r¨¢pidos y m¨¢s fuertes mientras que los cornerbacks no crecen proporcionalmente. La nueva hornada de receptores que est¨¢ llegando a la liga es tan variada y completa que no puedes esperar que el mismo corner cubra de la misma manera a Mike Evans y a Brandin Cooks.
Los esfuerzos defensivos para frenar a estos jugadores deben ser colectivos, da igual c¨®mo se llame tu CB1, cu¨¢nto cobre o c¨®mo de grande sea su ego. Si los entrenadores no quieren ver a sus cornerbacks quemados cada dos por tres, tienen que adaptar sus ideas a la realidad del campo.