Cinco sue?os vuelan al Everest
El 3 de septiembre vuelan a Kathmand¨² (Nepal) la expedici¨®n de Diab¨¦ticos al Everest liderada por el alpinista vitoriano Josu Feijoo.

El mi¨¦rcoles 3 de septiembre partir¨¢ un avi¨®n desde Madrid rumbo Kathmandu. En ¨¦l volar¨¢n Laura, Iv¨¢n, Jose Ram¨®n, Vanesa y ?ngel. Junto a las botas, sacos de dormir, mochilas y dem¨¢s material de monta?a tambi¨¦n viajaran gluc¨®metros e insulina. Porque los cinco forman parte de la Expedici¨®n Diab¨¦ticos al Everest liderada por el alpinista vitoriano Josu Feijoo y patrocinada por Telef¨®nica, Saluspot, Menarini y Faes Farma.
Despu¨¦s una avioneta hasta Lukla, donde comenzar¨¢ el trekking hasta el campo base del Everest (5300 metros). Diez d¨ªas de camino por la regi¨®n de Khumbu pasando por lugares tan espectaculares como el pueblo de Namche Bazar o el monasterio de Thyangboche.
Entre ellos distintas expectativas. Sin embargo a todos les une las ganas de compartir su enfermedad, sus h¨¢bitos de vida e intentar ser un ejemplo para los diab¨¦ticos. Romper barreras, superar miedos, demostrar que hoy en d¨ªa es posible llegar todo lo lejos que se planteen. No son deportistas de ¨¦lite, ni superh¨¦roes con ansias de gloria. Son simplemente cinco historias que compartir¨¢n camino y experiencias camino del Everest.
Laura M¨¢rmol G¨®mez vive en Legan¨¦s (Madrid) y est¨¢ reci¨¦n graduada en Biolog¨ªa por la Universidad Rey Juan Carlos. Es la m¨¢s joven del grupo con tan s¨®lo 22 a?os y es diab¨¦tica desde hace s¨®lo dos meses. Para ella ¡°este viaje me marcar¨¢ la vida¡±. En la sierra de Madrid ha hecho casi todas sus salidas de campo y por qu¨¦ no entender este trekking por el Himalaya como otra salida de campo m¨¢s. Por qu¨¦ no volver a casa con alguna flor en su cuaderno de campo.
Iv¨¢n Ant¨®n Rodrigo es barcelon¨¦s, pero actualmente trabaja en San Sebasti¨¢n como m¨¦dico especialista en geriatr¨ªa. Tiene 33 a?os y es diab¨¦tico desde los 5. Para ¨¦l ¡°todo el mundo tiene que subir una escalera para finalizar un proyecto, pero nosotros solemos tener un par de escalones m¨¢s¡±. Tiene muchas ganas de descubrir la cultura nepal¨ª, y tambi¨¦n de ¡°saber c¨®mo responde mi cuerpo a determinadas alturas¡±.
Jose Ram¨®n Casta?ares es madrile?o de 41 a?os. Trabaja en recursos humanos de Telef¨®nica, asesorando a los trabajadores en temas de h¨¢bitos laborales saludables. Cree que los diab¨¦ticos son m¨¢s sanos que el resto de las personas, ¡°controlamos mucho nuestra alimentaci¨®n, estamos obligados a hacer ejercicio f¨ªsico, somos muy responsables y organizados¡±.
Vanesa Guijarro Oca?a vive en Lleida y tiene 3 hijos, Dar¨ªo con 4 a?os tambi¨¦n diab¨¦tico. A sus 35 a?os recuerda salir a la monta?a desde peque?a, ¡°mi padre particip¨® en dos expediciones al Himalaya en 1986 y 1987¡± y aunque ahora est¨¢ de excedencia, trabaja como t¨¦cnico de laboratorio en la Universidad. Hace diez a?os estuvo de viaje por la India con su marido y sobrevolaron las monta?as desde una avioneta, ¡°recuerdo imaginarme a los alpinistas peque?itos frente a esas grandes monta?as, ahora quiero estar abajo¡±.
?ngel Mangas Qui?ones tiene 30 a?os y vive en Hernan-P¨¦rez (C¨¢ceres), un peque?o pueblo de la Sierra de Gata que vive principalmente de la oliva. Trabaja en una peque?a empresa familiar de reformas, ¡°antes hac¨ªamos desde los cimientos al tejado, ahora andamos con peque?as cosillas para ir tirando¡±. Su madre tuvo algunos miedos al principio de saberse uno de los seleccionados, ¡°pero ahora me est¨¢ animando como la que m¨¢s¡±.
Y en ese avi¨®n se mezclar¨¢n todas las historias. Laura recordar¨¢ cuando hace s¨®lo dos meses un an¨¢lisis le diagnostic¨® diabetes Tipo 1. Ese d¨ªa donde los miedos sobrevolaron la cabeza, donde algunos consejos la asustaron e imagin¨® puertas que se iban cerrando. Iv¨¢n mirar¨¢ por la ventanilla y ver¨¢ el atardecer, como tantas otras veces lo ha visto desde el Puigmal, y responder¨¢ con un gran viaje a los que alguna vez le han dicho no vayas tan lejos. Vanesa pensar¨¢ en el peque?o Dar¨ªo y en todas las ni?as de la asociaci¨®n de Lleida a las que repite cada d¨ªa que todo lo que se propongan puede hacerse realidad. ?ngel quiz¨¢s vaya imaginando lo que se va a encontrar, lo que va a descubrir al otro lado del mundo, al otro lado de sus sue?os. Jose Ram¨®n se acordar¨¢ de Laura, que al enterarse de su viaje se di¨® cuenta que mientras ca¨ªan sus l¨¢grimas tambi¨¦n lo hac¨ªan las barreras a las que pensaba que se tendr¨ªa que enfrentar su hija diab¨¦tica.
Planeando entre monta?as aterrizaran en el espectacular aeropuerto Tenzing-Hillary. Caminar¨¢n durante d¨ªas por lugares incre¨ªbles que se cre¨ªan casi prohibidos para ellos. Se enfrentar¨¢n a su enfermedad con pura vida. Porque al fin y al cabo la diabetes es la ¨²nica enfermedad donde algunas de sus pastillas son palmeras de chocolate. O expediciones al Everest.