Goleada de ilusi¨®n
El Bar?a se afina bajo la direcci¨®n de Messi a tres d¨ªas de recibir al PSG. Dos goles de Trinc¨¡o y partidazo del diez para conjurar el regalo de cada d¨ªa.
Este Bar?a es s¨®lo para creyentes. Cada partido del equipo de Koeman se convierte desde la alineaci¨®n al desenlace en una cuesti¨®n de fe inquebrantable. Es un conjunto de rachas que es capaz de ilusionar, deprimir, ser v¨ªctima de sus propios errores y volver a ilusionar. Ante el Alav¨¦s pas¨® por todos estos estados y acab¨® felizmente en un momento clave de la temporada. El 5-1 al Alav¨¦s es un resultado estupendo que vuelve a ilusionar a las puertas de la Champions.
Por mucho que Koeman no mentara al Par¨ªs Saint-Germain en la previa, qued¨® claro en el inicio del duelo que el Bar?a ten¨ªa muy presente el partido de Champions del martes. Y por doble motivo, adem¨¢s. De entrada, por la alineaci¨®n de Koerman, que dio descanso a Jordi Alba, Demb¨¦l¨¦ y Pedri y reserv¨® a Umtiti y a Dest. En consecuencia, Ilaix apareci¨® en el centro del campo debutando en Primera junto a Riqui. Dos cadetes a las ¨®rdenes de Busquets mientras que Trinc¨¡o consegu¨ªa su primera titularidad en LaLiga.
Tambi¨¦n se not¨® que la sombra del PSG estaba sobre el partido porque el Bar?a sali¨® con la idea de solventar lo m¨¢s r¨¢pido posible el compromiso pensando en posibles descansos con el partido ya avanzado.
La salida del equipo de Koeman fue vertiginosa. Al primer minuto de juego Mart¨ªn evit¨® el gol de Griezmann y a los tres minutos la tuvo el extremo portugu¨¦s. El Alav¨¦s resisti¨® la salida del Bar?a, se orden¨® y estabiliz¨® el duelo llev¨¢ndolo a su terreno. Cerr¨® l¨ªneas, redujo espacios y le hizo el escenario inc¨®modo a Messi. Incluso los de Abelardo se llegaron a estirar y visitaron la porter¨ªa de Ter Stegen, que tuvo que esforzarse ante un disparo de Battaglia.
El partido corr¨ªa el peligro de ser una cena de acelgas para un ni?o. Pod¨ªa hacerse bola y eternizarse en el plato si alguien no le daba una sacudida, porque tras un inicio animado entr¨® en una fase de sopor absoluto.
Fueron los j¨®venes los que sacaron al Bar?a de la modorra. A la media hora, una progresi¨®n de Mingueza por la banda fue controlada por Ilaix, que tuvo el cuajo de no precipitarse para asistir a Trinc¨¡o, que anot¨® el primer tanto.
Con el gol en contra, el plan de Abelardo empez¨® a hacer aguar y el Bar?a vio la oportunidad de cerrar el partido antes del descanso. Messi marc¨® el segundo despu¨¦s de que Griezmann fallara un cara a cara ante Pacheco, pero el VAR anul¨® el tanto por fuera de juego del franc¨¦s en el inicio de la jugada. Una decisi¨®n que, incluso con la imagen congelada, hace un flaco favor a la tecnolog¨ªa y que aumenta el enojo de Koeman ante esta herramienta.
No se cay¨® el Bar?a tras la anulaci¨®n del gol y si en primera instancia fueron los j¨®venes los que movieron el partido, en el tramo final de la primera parte fue Messi, quien en el minuto 46 marc¨® un golazo brutal de un zurdazo desde fuera del ¨¢rea. El Bar?a ten¨ªa medio trabajo hecho.
En consecuencia, Busquets pudo descansar en la segunda parte y Umtiti ingres¨® en el campo para que De Jong pasara al centro del campo.
Fue v¨ªctima de nuevo el Bar?a de su s¨ªndrome de invitado gentil, que cada d¨ªa que va a ver a alguien o recibe a un amigo lo hace con un regalo. En este caso fue de Ilaix, que ofreci¨® en bandeja el gol a Rioja que apret¨® el partido.
Pero supo reaccionar el equipo blaugrana comandado por un Messi definitivo. Trinc¨¡o marc¨® el tercer para conjurar los b?nervios tras jugada de Leo ante Pacheco. Messi marc¨® el cuarto un minuto despu¨¦s de nuevo desde lejos y organiz¨® la jugada para que Junior cerrada una goleada que desata la ilusi¨®n.