Muniain reanima al Athletic ante un Espanyol de pega
Doblete del punta navarro y gol en propia puerta de V¨ªctor G¨®mez que hacen recordar a los leones el sabor de la victoria cinco partidos despu¨¦s.

Un simple movimiento t¨¢ctico, esto es, devolver a Muniain al sitio donde le ha llamado el f¨²tbol, bast¨® para consolar al Athletic con un triunfo de urgencia, y para devolver al Espanyol a los tiempos de los nubarrones con Gallego. En 15 minutos, casi con el partido sac¨¢ndose las lega?as, San Mam¨¦s ya hab¨ªa dictado sentencia. Garitano prob¨® con Ra¨²l Garc¨ªa de nueve y Williams en la banda derecha, ese costado que dej¨® muchos meses atr¨¢s seg¨²n se levantaba acta del declive de Aduriz. Con ese inesperado giro, visti¨® dos santos, ya que encomend¨® la mediapunta a Muniain.
El caso es que en el minuto cuatro inici¨® jugada y acab¨® el bal¨®n en centro al ¨¢rea que no pudo engatillar Ra¨²l Garc¨ªa. Iker andaba atento y cruz¨® perfectamente a las mallas. En un c¨®rner poco despu¨¦s, volvi¨® a estar en el escenario del crimen en un bal¨®n corto despejado por la zaga perica, para lanzar un zapatazo gal¨¢ctico a la escuadra. Y tambi¨¦n estuvo arrimado en el tercer y ¨²ltimo gol, con colaboraci¨®n de V¨ªctor G¨®mez, que desvi¨® a la meta propia el bal¨®n. Solo otras tres veces el Athletic hab¨ªa marcado tres goles en Liga con el actual inquilino del banquillo, pero nunca con una diferencia tan grande (s¨ª en Copa, en Huesca).?El Athletic logr¨® tres de distancia tras 90 partidos sin hacerlo (desde abril de 2017, 0-3 en Balaidos). Todo lo dio por bien empleado para romper la racha de cinco partidos sin ganar.
El planteamiento local funcion¨® a las mil maravillas y aturdi¨® al Espanyol. Si Garitano hab¨ªa dicho en la previa del partido que "el tr¨¢mite" estaba bien pero hab¨ªa que afinar en el cl¨ªmax, el equipo cogi¨® la letra de la melod¨ªa a la primera. Fue el cl¨¢sico Athletic jabato en casa, con el remangue necesario, mientras el Espanyol y su amplia colecci¨®n de centrales andaba en plan rampl¨®n. Para mostrar cierto decoro, empez¨® a estirarse a la media hora y fomentar la estrategia; le anularon un gol a Bernardo tras saque de falta de V¨ªctor S¨¢nchez, por un fuera de juego raspado. Poco despu¨¦s Campuzano cabece¨® y pudo desquitarse Unai Sim¨®n del vinagre que se tra¨ªa del Wanda. La lupa estaba sobre su cabeza tras las sospechas de que su entrenador rotar¨ªa entre semana y pondr¨ªa a Herrer¨ªn para hacerle un cari?ito.
El Athletic, solidario, flu¨ªa por dentro, ten¨ªa algo m¨¢s de f¨²tbol con esos locos bajitos Unai L¨®pez-Muniain. S¨®lo desentonaba C¨®rdoba, que escucha murmullos como otros muchos zurdos antes en la Catedral. Tambi¨¦n sumaba la baliza de Ra¨²l Garc¨ªa, batallando contra Naldo, David L¨®pez y Bernardo. En la segunda parte el Espanyol dio un paso al frente m¨¢s decisivo al fin, pero la porter¨ªa de Unai Sim¨®n segu¨ªa borrosa. Cay¨® Unai L¨®pez lesionado y le frustr¨® perderse una noche de deleite, aunque estaba previsto antes que San Jos¨¦ entrase a dar m¨¢s pulm¨®n. Antes tuvo un remate C¨®rdoba muy claro.
El Athletic iba sumando oficio por la derecha, por donde emergi¨® Williams, que ya se sabe, cuando la fruta va madurando ¨¦l crece y crece con las piernas que debi¨® de comprar a Bolt. Se exprimi¨® hasta casi el ecuador de la segunda parte y dej¨® su sitio a Larrazabal, que sigue con el sue?o jugar en San Mam¨¦s, lo ha hecho en dos comparecencias consecutivas, ante el escrutinio de su padre, el hist¨®rico Aitor, comentarista en el Carrusel. Mach¨ªn agot¨® cambios en el 70, metiendo a Wu Lei, Granero y Ferreyra, pero su gente andaba ya con la cabeza en otra cosa. Y en esa cavilaci¨®n, hasta dejando pasar el tiempo para evitar m¨¢s hemorragia (al margen de una osad¨ªa de V¨ªctor S¨¢nchez intentado marcar desde el medio campo), recibi¨® el tercero, con la participaci¨®n de Muniain (sin ¡®hat tricks¡¯ como le¨®n, y lo roz¨®) que impuls¨® la bola y vio el ¨²ltimo golpe de ri?¨®n hacia la meta propia de V¨ªctor G¨®mez.