El Villarreal empata: para pasar sin favores debe ganar en Chipre

El Villarreal se complica la vida tras mostrar dos caras bien distintas en un mismo partido. De un lado, la de la brillantez. Del otro, la de los regalos. En el primer tiempo brill¨® a una gran altura, sacando lo mejor de sus once jugadores y retratando a un campe¨®n alem¨¢n. Por eso se adelant¨® con un gran gol de Vietto. En el segundo, casi de forma inexplicable, dio un verdadero gatillazo, por el desgaste y el cansancio acumulado, y fue superado por un rival resucitado que a punto estuvo de darle un disgusto mayor. Ahora, con este nuevo pinchazo, el Villarreal deber¨¢ ir a Chipre a ganar al Apollon (ya eliminado) para asegurarse el pase sin esperar favores. Todav¨ªa es segundo y depende de s¨ª mismo. Pero esto es f¨²tbol. Y la fiabilidad del Submarino no est¨¢ ahora para apostar m¨¢s que lo justo.

Parece mentira el resultado final recordando el arranque. Cheryshev fue el que empez¨® tirando del carro. Por su banda hizo un surco. L¨¢stima que se equivoque demasiado en la elecci¨®n de las alternativas. El ruso se asoci¨® de maravilla con Jaume Costa, serio en defensa, inspirado en ataque. Ellos dos, siendo claves en el juego coral de su equipo en ese intervalo, no eran ni siquiera lo mejor. Imaginen el recital. Bruno y Vietto repitieron como l¨ªderes. El mediocentro gracias a ese amor propio que le hace ¨²nico. El ariete, a¨²n un ni?o, con esa t¨¦cnica depurada que va sorteando adversarios y abriendo rendijas. Suyo fue el primer gol. Una joya en la que orient¨® bien un pase al hueco y que defini¨® mejor. Todo esto ser¨ªa un espejismo.

Del Borussia no hab¨ªa demasiadas noticias. Se las guard¨® todas para la segunda mitad. Tras arrastrarse por la plaga de bajas y por la intensidad que puso el Villarreal, se sacudi¨® los temores y se adue?¨® del partido. Con orgullo y calidad. Sin necesidad de disfrutar de mil ocasiones. Primero avis¨® con un doble disparo desde el m¨¢s all¨¢. Y m¨¢s tarde, ya sin llamar a la puerta, empat¨® con un zapatazo de Raffael en el que Asenjo pudo hacer m¨¢s que ver su brazo ceder. El portero titular en Liga y suplente en Europa cambi¨® su rol esta vez por los fallos de Juan Carlos en Z¨²rich. Pero no pudo mejorar el resultado. El Villarreal estaba tocado porque no hab¨ªa merecido tanto castigo. Y aun as¨ª, tuvo otra oportunidad de volver a sonre¨ªr. Fue en una jugada aislada en la que Mario conect¨® con Vietto en profundidad (en fuera de juego) y en la que el argentino puso un bal¨®n en el ¨¢rea que Korb despej¨® defectuosamente para dejarle un bal¨®n muerto a Cheryshev. El extremo, esta vez s¨ª, decidi¨® correctamente.

Cuatro minutos dur¨® la alegr¨ªa. El Borussia sigui¨® a lo suyo. Gan¨® la batalla del medio campo, junt¨® las l¨ªneas y le dio el bal¨®n a los que mejor lo tratan: Xhaka y Raffael. Poco a poco fueron arrinconando a un Villarreal desconocido. Hasta que le volvieron a hacer da?o. Esta vez con una falta lejana de Xhaka que super¨® de nuevo a Asenjo con una facilidad desmesurada. La pegada con la zurda era tremenda. La estirada del portero fue insuficiente.

Marcelino reaccion¨® con cambios. Pese a las urgencias, entr¨® Pina y sali¨® Uche para equilibrar la zona que hab¨ªa tomado el Borussia. Como si el t¨¦cnico, algo l¨®gico, ya no quisiera tener m¨¢s da?os y viera el empate hasta bueno. Sea como fuere, el Villarreal se olvid¨® de atacar como suele. Y, para colmo, continu¨® concediendo espacios. As¨ª, en un mal balance defensivo, Hermaan estrell¨® un disparo en el palo. El Madrigal ped¨ªa la hora. Y no para apurar las opciones de ser primeros de grupo. M¨¢s bien para llegar sin peores sobresaltos a la ¨²ltima jornada. Chipre pod¨ªa ser una excursi¨®n. Y se ha convertido en un clavo ardiendo.

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