Greenpeace ¡®se col¨®¡¯ por sorpresa entre Ancelotti y Pepe
Los activistas de la organizaci¨®n ecologista protestaron contra el gigante ruso del gas y el petr¨®leo y sus perforaciones en el ?rtico. "Ense?emos a Gazprom la tarjeta roja".


El Madrid es un veh¨ªculo publicitario de dimensi¨®n planetaria y Greenpeace lo aprovech¨® ayer para protestar contra las prospecciones petrol¨ªferas en el ?rtico. La organizaci¨®n medioambiental ¡®se col¨®¡¯ en la conferencia de prensa de Ancelotti y Pepe para desplegar, delante de 15 c¨¢maras de televisi¨®n y cerca de cincuenta periodistas, una pancarta contra la petrolera rusa Gazprom. Ante el estupor del t¨¦cnico italiano y el central portugu¨¦s, y mientras ¨¦ste respond¨ªa a una pregunta, se empez¨® a desenrollar de forma autom¨¢tica una pancarta justo a sus espaldas: ¡°Salvemos el ?rtico, mu¨¦strale la tarjeta roja a Gazprom¡±.
Un original m¨¦todo y cuidadosamente planeado, ya que Greenpeace logr¨® burlar la seguridad de la UEFA y del Copenhague para insertar la pancarta en la pantalla desplegable de un proyector. Llegado el momento, s¨®lo tuvieron que accionarla a distancia y el mensaje empez¨® a mostrarse encima del panel donde figuran los sponsors de la Champions. Durante algo menos de un minuto, all¨ª sigui¨®, entre las risas de los presentes y el ataque de p¨¢nico de los delegados de la UEFA. Uno de ellos acab¨® interviniendo para ocultar la pancarta. Pepe, en broma pero algo desconcertado, le felicit¨® por el capote: ¡°Gracias, amigo¡±.
La simb¨®lica protesta de Greenpeace no fue casual. Gazprom es uno de los seis patrocinadores de la Champions League y su proyecto de perforar el ?rtico para hallar petr¨®leo est¨¢ encontrando mucha oposici¨®n entre los activistas medioambientales.
A la UEFA, eso s¨ª, no le hizo ninguna gracia. Una vez que Ancelotti y Pepe abandonaron la sala, empez¨® la ¡®caza¡¯ del responsable. En sus pesquisas, un visiblemente nervioso miembro del m¨¢ximo organismo continental lleg¨® a tener un careo con un periodista espa?ol, al que acusaba de ser un infiltrado de Greenpeace. Aclarado el asunto con la intermediaci¨®n del departamento de prensa del Madrid, el delegado reconoci¨® que todo¡± hab¨ªa sido un error¡± y pidi¨® disculpas...