Frenazo del Atl¨¦tico en Cornell¨¤

Ante la perspectiva de hacer un tr¨ªo (liderato en solitario, mejor inicio de la historia de la Liga y centenario feliz para Simeone), al Atleti le pudo la presi¨®n. Plante¨® Aguirre, viejo zorro, un juego de espejos, con el Espanyol copiando la intensidad, la concentraci¨®n y el orden propios de su rival, y los rojiblancos se ahogaron, v¨ªctimas de esa carencia de creatividad individual que tan bien maquilla desde el despliegue colectivo. No esta vez. Decidi¨® el Cholo dar descanso a Arda tras sus partidos con Turqu¨ªa (el Virus FIFA, enfermedad de grande, ya acecha) y el Atleti mostr¨® por qu¨¦ sigue so?ando con Diego Ribas: no Arda, no party.

La tendencia de Simeone es fortificarse con Ra¨²l Garc¨ªa en cuanto el Atleti se aleja de casa, le ha funcionado y no disimula. As¨ª que el escenario en Cornell¨¤ record¨® a los del Pizju¨¢n, Zorrilla u Oporto: al tran tran hasta el descanso y dos marchas m¨¢s para apuntillar tras el par¨®n. Pero desde el primer minuto se vio a un equipo sin enchufar. Presi¨®n tibia, imprecisi¨®n en el pase, despistes en defensa. La noche iba a ser larga.

El Espanyol no quiso inventar nada. Sidnei lider¨® una defensa impecable, David L¨®pez intercambi¨® golpe a golpe con los medios visitantes y Sergio Garc¨ªa revoloteaba esperando que una bala perdida se convirtiese en letal. Ante tanta solidez, el Atleti, acostumbrado a generar boquetes, fue incapaz de encontrar las grietas. Koke necesitaba un amiguito m¨¢s que Trist¨®n y todo se redujo a Diego Costa contra el mundo. Y casi le funciona.

Entre bostezo y bostezo, la primera parte dej¨® dos cabalgadas marca de la casa del brasile?o o espa?ol o vaya usted a saber qu¨¦. Dej¨¦moslo en el portento. Chocar contra ¨¦l debe estar en el nuevo cat¨¢logo b¨¢sico del torturador junto a los palillos en las u?as, la gotita de agua en la coronilla y las 100 horas de escucha continuada de canciones de Melendi. As¨ª llegaron las dos mejores ocasiones del Atleti en la noche. A los 39¡¯, recorte va, zancada viene, lleg¨® a la l¨ªnea de fondo y su centro lo remat¨® Koke, tan listo como h¨¢bil, al poste. A los 45¡¯, parti¨® ¨¦l contra cuatro y casi se mete en la porter¨ªa, pero acab¨® rematando fuera.

El despertar del segundo tiempo fue inesperado. Arda permanec¨ªa en el banquillo y el anunciado cambio de ritmo rojiblanco nunca lleg¨®. Al contrario: fren¨®. Era el escenario que hab¨ªa so?ado el Espanyol, que ech¨® los colmillos al tobillo rival para no soltarlo. Avis¨® Lanzarote con una doble ocasi¨®n que provoc¨® dos paradas de Courtois. Pero al belga le abandon¨® el ¨¢ngel en el minuto 54. Gran centro de Fuentes desde la banda izquierda, Sergio Garc¨ªa le gana la posici¨®n a Alderweireld (al que el debut debi¨® pillarle por sorpresa y tuvo que abandonar la peluquer¨ªa a medio corte) pero no llega a tocar y Courtois, al intentar despejar con el pie, acaba metiendo dentro un bal¨®n que se iba fuera.

Quedaba mucho tiempo y Simeone recurri¨® a la caballer¨ªa. Entraron Arda, Adri¨¢n y el Cebolla; asumi¨® el dominio y mejor¨® el juego. Pero poco, muy poco. Sidnei y H¨¦ctor Moreno acabaron por anular a Diego Costa mientras Villa se anulaba solo, toda la noche metido en cuitas con el ¨¢rbitro y los rivales. Aun as¨ª le dio tiempo a facilitarle a Costa la ¨²nica oportunidad de empatar, con un gran pase que el pichichi cruz¨® demasiado.

Y as¨ª, con el Espanyol agigantado y el Atleti impotente, acab¨® la racha victoriosa de los de Simeone. Han sido ocho victorias seguidas que dan idea del potencial del equipo, pero la ¨²nica derrota dej¨® muy claro por d¨®nde se descose. Como el alcalde de Amanece que no es poco, los dem¨¢s con contingentes, pero Arda es necesario. Indispensable, incluso.