SEVILLA 4 - ZARAGOZA 0
El Sevilla, con doble de Coke, apabulla a un Zaragoza muerto
El lateral hizo doblete en la goleada del Sevilla al Zaragoza, que jug¨® una hora con diez por la expulsi¨®n de Babovic. Tambi¨¦n anotaron Reyes y Negredo.

El Zaragoza no presenta constantes vitales y esta tarde ha sido un aut¨¦ntico pelele en manos del Sevilla. El cuadro de Emery no ha tenido piedad de los de Jim¨¦nez, que volvieron a salir del Pizju¨¢n goleados, igual que hace mes y medio en la Copa. Y el gui¨®n fue similar al de entonces: t¨ªmido dominio inicial de los aragoneses pero sin claridad arriba, una expulsi¨®n definitiva a la media hora y barra libre para Reyes y Navas. Ellos solitos desarmaron a un Zaragoza que se hunde en la clasificaci¨®n y relanzan al Sevilla en su sue?o europeo. Y eso que los aragoneses empezaron mejor situados y combinando con facilidad. Pero su dominio inicial fue de mentira. El Sevilla, a la contra, ya hab¨ªa avisado en varias ocasiones. Con el c¨¦sped r¨¢pido por la lluvia, Navas y Reyes (¨¦ste por el centro pese a que en la pizarra haya que ponerlo en la izquierda) eran peligros¨ªsimos. El golo lo acab¨® encontrando el Sevilla de la manera m¨¢s extra?a. Rakitic sac¨® rasa una falta en el lateral del ¨¢rea, Negredo hizo bien el desmarque y, contra natura, le dio de tac¨®n hacia atr¨¢s justo en las narices de Leo Franco, en vez de rematar a gol. El bal¨®n acab¨® en los pies de Coke, que fusil¨® a la red, salvando de las cr¨ªticas a su compa?ero. Las cosas de Negredo...
Hasta entonces Jos¨¦ Mari y Babovic la tocaron mucho, pero Postiga apenas la ol¨ªa y se desesperaba minuto a minuto. El tanto de Coke acab¨® con el ficticio dominio inicial del Zaragoza, que qued¨® grogui. Los de Emery sacaron su instinto y en cuanto volvieron a coger el bal¨®n, Navas se plant¨® solo ante Leo Franco, tras asistencia de lujo de Negredo. ?lvaro actu¨® r¨¢pido y apareci¨® providencial para meter la pierna. Los de Jim¨¦nez se hab¨ªan salido del partido, algo que pudo ser transitorio hasta que Babovic vio la roja y lo convirti¨® en definitivo. El montenegrino, ya con una amarilla, se vio obligado a placar a Kondogbia cuando ¨¦ste se dispon¨ªa a dar una asistencia letal a Negredo. Una hora con diez le esperaba al Zaragoza, que ya iba abajo en el marcador y empezaba a bajar los brazos. El gui¨®n era como el de la Copa, que tambi¨¦n acab¨® 4-0.
El Sevilla se adue?¨® del bal¨®n con descaro. No hac¨ªa falta que Kondogbia estuviera haciendo un buen partido, pero Medel distribu¨ªa con criterio (muchas veces desde la posici¨®n de central, para que Navarro cayera al lateral y Alberto recorriera la banda) y Navas y Coke intentaran de todo por la derecha. En el bando aragon¨¦s las cosas eran distintas. Pocos balones cog¨ªan ya Jos¨¦ Mari por dentro y V¨ªctor y Monta?¨¦s por fuera. La desesperaci¨®n de Postiga iba en aumento. El portugu¨¦s se ilusionaba cuando alg¨²n zapatazo de Loovens o Pinter merodeaba por donde ¨¦l estaba, pero Fazio ten¨ªa ventaja siempre.
Como si no hubiera habido descanso, nada m¨¢s arrancar la segunda mitad el Sevilla se puso de gol dos veces. Un mal pase de Kondogbia impidi¨® el mano a mano de Reyes con Leo Franco. Poco despu¨¦s, Negredo, que estaba en fuera de juego, le quit¨® el bal¨®n a Navas justo delante del portero argentino. Y, como en la primera parte, a la tercera fue la vencida: una contra de Lujo trenzada entre Reyes y Navas acab¨® en los pies de Rakitic, pues Negredo no lleg¨® al casi perfecto pase del palaciego. El Zaragoza tard¨® una eternidad en replegarse y el Sevilla tuvo una segunda oportunidad, en los pies de Coke, que puso un derechazo desde fuera del ¨¢rea casi en la escuadra. Doblete del lateral, criticad¨ªsimo hasta que Emery lo ha reconvertido en util¨ªsimo, por encima incluso de Cicinho. Todo esto lo miraba abatido Jim¨¦nez. Y Postiga, por supuesto. Nunca un partido fue tan aburrido para un delantero, quien tampoco supo buscarse la vida. Para colmo, cuando m¨¢s cerca estuvo el Zaragoza del gol, Postiga no estaba por ah¨ª. Fue justo despu¨¦s del 2-0, cuando Palop volvi¨® a medir mal otra salida y bal¨®n acab¨® siendo salvado bajo palos por Negredo, ayudado por el larguero.
El Zaragoza estaba vencido, pese a ese t¨ªmido arrebato de orgullo. Reyes lo remat¨® faltando media hora, en una contra espectacular que esta vez s¨ª supo trenzar el Sevilla: Negredo despej¨® de cabeza en el ¨¢rea, Rakitic prolong¨® para Navas, quien se la dej¨® atr¨¢s, pero Reyes se la volvi¨® a poner en carrera, devolvi¨¦ndole el palaciego el favor con una asistencia lujosa de tac¨®n y a mil por hora. El utrerano no tuvo ning¨²n tipo de piedad de Leo Franco. Al Zaragoza le quedaba un suplicio y a Negredo tiempo para prolongar su racha (Postiga ya no se desesperaba, pues hab¨ªa sido sustituido por Bienvenu). Lo logr¨® el vallecano gracias a Reyes, que certific¨® su partidazo evitando todo tipo de ego¨ªsmo y asistiendo con calidad al internacional. El Sevilla, necesitado de credibilidad, no levant¨® el pie ante un rival entregado, como queriendo buscar lo que se dej¨® lastimosamente en Mallorca. Lo tendr¨¢ delante de s¨ª el S¨¢bado Santo, en Valencia, ante el Levante. Ah¨ª veremos si el Sevilla tiene algo que decir en la encarnizada lucha por Europa. Mientras, al Zaragoza le urge un cambio radical. Acumula once jornadas sin ganar y eso suele ser letal cuando el final se acerca. Ayer dio muestras de estar muerto y este a?o se empecina en obligarse a otra machada. A¨²n est¨¢ a tiempo, pero cada a?o uno se suele ir al hoyo cayendo poco a poco, de la misma forma en que este Zaragoza se est¨¢ quedando sin aire.