Investigadores de la Universidad de Texas, en Austin, analizaron las bases hormonales del razonamiento moral, ya que un nuevo estudio relaciona el nivel de testosterona con un comportamiento inmoral. Y es que estudios anteriores han investigado el juicio moral sobre la base de las respuestas conductuales y la actividad cerebral, pero el estudio actual va más allá, analizando el papel de los factores biológicos profundos, en particular la testosterona.

"Ha habido un creciente interés en cómo las hormonas influyen en los juicios morales de una manera fundamental al regular la actividad cerebral", dijo Bertram Gawronski, profesor de psicología en UT Austin. "En la medida en que el razonamiento moral esté, al menos en parte, enraizado en factores biológicos profundamente arraigados, algunos conflictos morales podrían ser difíciles de resolver con argumentos".

Testosterona y moralidad

Los investigadores tomaron prestado el paradigma del problema del carro de la filosofía para probar la influencia de la hormona testosterona en los juicios morales. En el problema, un carro desbocado matará a cinco personas a menos que alguien elija tirar de una palanca, redirigiendo el carro a otra pista, donde matará a una persona.

Los investigadores utilizaron 24 dilemas asociados con eventos de la vida real para simular una situación que confronta las decisiones tradicionales, que se centran en el bien común (salvar a un gran grupo de personas) contra las decisiones deontológicas, que se centran en las normas morales. (evitando acciones que da?arían a alguien).

Estudios previos sobre cómo las hormonas influyen en el juicio moral sugieren que los niveles más altos de testosterona están asociados con preferencias utilitarias más fuertes. 

El estudio fue dise?ado para evaluar si la testosterona influye directamente en los juicios morales y cómo", dijo Skylar Brannon, estudiante de psicología en UT Austin. "Nuestro dise?o también nos permitió examinar tres aspectos independientes del juicio moral, incluida la sensibilidad a las consecuencias, la sensibilidad a las normas morales y la preferencia general por la acción o la inacción".

Nuevo estudio: mayor sensibilidad a las normas morales

A diferencia de los estudios anteriores en los que la testosterona aumentada estaba vinculada a juicios utilitarios, los investigadores se sorprendieron al descubrir que aquellos que recibieron suplementos de testosterona tenían menos probabilidades de actuar por el bien común y, en cambio, se volvieron más sensibles a las normas morales. Sin embargo, los participantes con altos niveles de testosterona natural mostraron lo contrario, haciendo juicios que eran menos sensibles a las normas morales.

Los autores del estudio creen que la testosterona natural puede estar asociada con ciertos juicios morales porque las personas con rasgos de personalidad particulares tienden a tener diferentes niveles de testosterona. Por ejemplo, las personas con altos niveles de psicopatía tienden a tener altos niveles de testosterona natural y exhiben una menor sensibilidad a las normas morales.

Pero esto no significa que la testosterona sea la causa de la insensibilidad de los psicópatas a las normas morales. En todo caso, la testosterona parece tener el efecto contrario, aumentando la sensibilidad de las personas a las normas morales, como se encontró en el estudio actual.