'Trash-talking' y una sonrisa: Doncic y el respeto de Nowitzki
En el podcast de Bill Simmons, la leyenda alemana explica su primer contacto con el jugador esloveno y el momento exacto en el que vio su genialidad.


Cuando Luka Doncic debut¨® en la NBA, Dirk Nowitzki estaba a un mes de cumplir cuarenta a?os. Era la ¨²ltima temporada de una de las mayores leyendas de la competici¨®n, un antes y un despu¨¦s. El jugador m¨¢s importante de la historia de Dallas Mavericks, tras 21 temporadas, dec¨ªa adi¨®s al baloncesto. A su espalda, 1522 partidos, 31560 puntos, 14 All Star, un MVP y el anillo, el ¨²nico en el registro de la franquicia. Gloria eterna y vac¨ªo inabarcable, como en cualquier despedida de semejantes dimensiones. Donnie Nelson, general manager de la franquicia, sin embargo, no tem¨ªa la nueva era. Los mismos ojos que, dos d¨¦cadas antes, se hab¨ªan ensimismado con los movimientos del ala-p¨ªvot alem¨¢n, ahora lo hac¨ªan con los de un joven base esloveno que, con 19 a?os, ya lo hab¨ªa ganado todo en Europa. Le sigui¨® desde el primer d¨ªa. Para ser exactos, desde su tercer partido como profesional, y ten¨ªa clara que ¨¦l deb¨ªa ser su elecci¨®n en el Draft llegado el momento, ¨¦l deb¨ªa ser el que, con el tiempo, optara (porque nunca se puede m¨¢s que eso) a rellenar ese futuro vac¨ªo: "Tuve este sentimiento y pens¨¦ que pod¨ªa jugar como organizador, que era como un cruce entre Magic y Bird. Eso es lo primero que vi. Eso y que era una m¨¢quina del triple-doble", ha recordado esta misma temporada sobre sus primeros apuntes en la libreta de ojeador.
Luca y Dirk pudieron compartir una temporada, a modo de escenificaci¨®n de ese relevo que s¨®lo el tiempo juzgar¨¢. Aunque las revoluciones sean altas, a¨²n es pronto; pero la l¨ªnea de sucesi¨®n deb¨ªa ser esa. Dallas hizo todo lo posible por situarse en un lugar privilegiado en la loter¨ªa del Draft y, multa de 600.000 d¨®lares e intercambio de por medio, consigui¨® su objetivo: 24 victorias, decimotercera posici¨®n, Trae Young y Doncic. El siguiente curso, a modo de pre¨¢mbulo de todo lo que ha acaecido despu¨¦s, ya fue otra cosa: 33 victorias y sensaci¨®n de proyecto en fermentaci¨®n. Para Dirk, 7,3 puntos y 3,1 rebotes a modo de despedida; para Luka, 21,2+7,8+6 y muchas ense?anzas. 21 a?os de liderazgo europeo le daban la mano y le invitaban a seguir por el mismo sendero; aunque se lo tuvo que ganar.
En el podcast de Bill Simmons (The Ringer), la leyenda alemana ha asegurado que sus primeras impresiones al ver jugar a Doncic fueron una mezcla de dudas y certezas. Era sabedor de su potencial, mostrado de forma m¨¢s que suficiente en ACB y Euroliga; pero no ten¨ªa claro que su estilo de juego pudiera explotar dentro de los sistemas imperantes y entre los perfiles m¨¢s f¨ªsicos de Estados Unidos. Luego, los titubeos duraron poco. "Prepar¨¢ndome para ese Draft, s¨®lo pude ver algunos aspectos destacados en ¨¦l. Pens¨¦: 'Oh, se ve grande para ser base, pero no s¨¦ si podr¨¢ seguir el ritmo atl¨¦tico que se demanda aqu¨ª, no parece el m¨¢s r¨¢pido, ha superado con facilidad a sus rivales en la Euroliga, pero los defensores en la NBA son algo diferentes'. Realmente no lo sab¨ªa muy bien, pero tambi¨¦n pens¨¦ que podr¨ªa llegar a ser un jugador muy h¨¢bil, un gran exterior. No sab¨ªa que en realidad era m¨¢s r¨¢pido de lo que parec¨ªa, y no sab¨ªa qu¨¦ tan buen pasador y tirador era. As¨ª que me sorprendi¨® en varios niveles", asegura Nowitzki ante el periodista norteamericano.
Ese step-back, esa falsa lentitud, ese don para encestar en los momentos cruciales... Dirk, como el resto de la NBA, necesit¨® poco tiempo para darse cuenta de lo especial que era el ex del Real Madrid. En su caso, eso s¨ª, recuerda el momento exacto en el que se percat¨® de ello. No lo esper¨® y lo provoc¨® ¨¦l mismo en la primera ocasi¨®n que tuvo: en el primer "entrenamiento" al lado de Doncic: "Vino al campo de preparaci¨®n, y ya sabes, antes de empezar la pretemporada, un par de semanas antes, los jugadores hacen ejercicio juntos, cinco contra cinco... El primer d¨ªa, ¨¦l (Doncic) ya estaba jugando genial y dejando grandes pases. Fij¨¦ la mirada en ¨¦l y me dije: 'Tengo que ponerlo a prueba un poco'. Comet¨ª una falta bastante fuerte sobre ¨¦l y le mand¨¦ a la l¨ªnea de tiros libres. Me acerqu¨¦ a ¨¦l y empec¨¦ con el trash-talking: 'No hay forma de que hagas estos dos tiros libres'. ?l solo me sonri¨® y no dijo nada. Y anot¨® esos dos tiros. Entonces, se gan¨® mi respeto de inmediato por su compostura, por lo maduro que era cuando ten¨ªa 19 a?os", narra la leyenda alemana. Pasado, presente y futuro.