De la herencia recibida, solo queda en los Nets Brook Lopez
Los Nets tratan de minimizar da?os y encontrar formas de arrancar de nuevo, condenados en los draft y con muy poco margen en el mercado.


El marem¨¢gnum orquestado por Prokhorov y Billy King dej¨® casi sin margen de maniobra en el corto y medio plazo a los Nets. Sin ni siquiera el alivio de una primera ronda alta de draft, en Brooklyn al menos ya solo cargan, de la herencia recibida por Sean Marks, con el contrato gigante de Brook Lopez: 43 millones de d¨®lares hasta el verano de 2018.
El panorama era tan complicado que ni siquiera pudieron hacerse con Tyler Johnson y Allen Crabbe por unos desproporcionad¨ªsimos 125 millones de euros totales. Un exceso que al menos habr¨ªa llevado al equipo una inyecci¨®n notable (aunque arriesgada) de talento joven. Sin probar y con mucho factor riesgo, pero talento joven al fin y al cabo. Mientras amaina la tormenta y va pasando el desastre que supuso el fara¨®nico y fallido primer proyecto Prokhorov, los Nets buscan una identidad que parece perdida desde el traslado a Brooklyn y, al menos, han minimizado posibles errores al firmar contratos muy asequibles a Luis Scola, Greivis Vasquez, Anthony Bennett, Joe Harris, Randy Foye y Trevor Booker.
Hasta el 36x3 de Jeremy Lin es una buena operaci¨®n en el actual despegue del salary cap y tras la brillante temporada del base en los Hornets. Las bajas de Thad Young, Thomas Robinson, Willie Reed, Sergey Karasev, Wayne Ellington, Donald Sloan o Shane Larkin tampoco har¨¢n un da?o especial en un equipo que tiene ahora problemas mayores que el buen mont¨®n de derrotas que va a acumular en esta nueva temporada. Otra vez.
