Blon: ¡°Soy m¨¢s un escritor que rapea que un rapero que escribe¡±

Pablo P¨¦rez Rueda (Barcelona, 1991) cumpli¨® su sue?o cuando sali¨® volando de la costa del Sol a lomos de una alfombra empolvada, como en las noches m¨¢gicas y rojizas de ?grabah. Tres a?os han pasado desde que Blon recogi¨® lo sembrado en la Nacional de Red Bull Batalla: el rey sin corona ni blas¨®n termin¨® con laureola y haciendo de M¨¢laga su particular Palacio de la Medianoche. Hab¨ªa cerrado una de las puertas. Sin embargo, m¨¢s all¨¢ del arte de la improvisaci¨®n quedaban todav¨ªa proyectos en el tintero y deseos en la l¨¢mpara del genio.

Blon aguarda risue?o bajo una gorra de visera curva en una sala de reuniones ubicada en la primera planta de un edificio inmenso en el centro de Madrid. En sus manos, un libro en cuya cubierta se lee aquello que uno espera encontrar, precisamente, en la ¨²ltima p¨¢gina de una obra: Color¨ªn colorado (Aguilar, 2025). Las paredes eran blancas y el ventanal separaba el calor del habit¨¢culo de un d¨ªa gris y lluvioso; un servidor hubiera entendido a la perfecci¨®n que el artista, en lugar de acudir, se quedase en su casa tomando un chocolate caliente. Pero all¨ª estaba. Y no hab¨ªa desayunado. No suele hacerlo nunca, aunque confiesa que debe empezar a hacerlo porque ¡°llega la hora de la comida y parezco Marcos Llorente¡±. De una forma u otra all¨ª se encontraba: visiblemente orgulloso por su m¨¢s reciente trabajo con la pluma y con la sonrisa de quien se sabe en buena direcci¨®n al caminar una senda tan enrevesada como es la que lleva al ¨¦xito literario.

-?Por qu¨¦ Color¨ªn colorado?

-Porque el libro son cuentos infantiles reversionados a una tem¨¢tica actual, m¨¢s adulta. Ten¨ªamos varios nombres en mente, pero este era muy guay y directo; la gente lo iba a relacionar r¨¢pido con los cuentos porque cuando se transmit¨ªan de forma oral tradicionalmente terminaban as¨ª.

-?Le¨ªas mucho de peque?o o te le¨ªan a ti?

-S¨ª, mucho. Ambas. Mi madre me contaba muchos cuentos. De peque?o lo que m¨¢s le¨ªa eran tebeos: Mortadelo y Filem¨®n, 13, Rue del Percebe, los S¨²per Humor... Era muy fan. Luego empec¨¦ con libros de elegir tu propia aventura, con cuadernos para resolver misterios y enigmas, que me encantaban; supongo que todo eso me ha moldeado a m¨ª como persona porque ahora soy un friki de los escape rooms (r¨ªe). S¨ª que le¨ªa. Y luego, m¨¢s de adolescente, mucha novela de fantas¨ªa. Harry Potter, Eragon... Siempre he estado muy ligado a la literatura.

-?Y ahora?

-Thriller lo que m¨¢s. Tambi¨¦n novela negra y terror. Pero leo de todo. Adem¨¢s, ahora estoy en un club de lectura con unos amigos y leemos lo que cada uno ponga.

Sobre su libro, la voz literaria y la nostalgia

-Me llama la atenci¨®n la interpretaci¨®n que haces de los cuentos. Te basas en la arquitectura narrativa del relato para trasladar experiencias propias vitales, lo que, sin duda, conlleva acercarte a ti mismo desde otra perspectiva. ?Has aprendido algo en este proceso?

-Siempre aprendo cuando escribo; es un proceso donde te vuelcas mucho y tu voz interior saca cosas que igual no conoc¨ªas porque no has exteriorizado o lo has hecho de otra manera. En este caso dir¨ªa que, sobre todo, la velocidad de los a?os porque, como dices, me baso en m¨ª mismo. He tenido una vida tan r¨¢pida con el tema del freestyle y de las batallas que no me he sentado a pensar en ning¨²n momento; cuando me he puesto a escribir este libro he recordado todo este tiempo y me he dado cuenta de que hace dos meses ten¨ªa 20 a?os y ahora, 34. Me asusta, pero estoy vivo.

-?Y qu¨¦ papel juega ah¨ª la nostalgia?

-Uno muy importante. Ya no solo en este libro, sino en toda mi obra: en los otros tres y tambi¨¦n en mi carrera musical. Pas¨¦ una infancia y una adolescencia muy buenas y tengo recuerdos incre¨ªbles. La vida me ha ido bien en muchos aspectos, he tenido mucho ¨¦xito dentro de mi campo y he cumplido muchos sue?os. Pero, a¨²n as¨ª, a ti nada ni nadie te prepara para la vida adulta cuando eres un ni?o o un adolescente. Y lo que termina pasando es que echas de menos muchas cosas. No obstante, ahora lo pienso y cuando tenga 60 echar¨¦ de menos los 30. Forma parte de la nostalgia: escribir de lo que soy, pero tambi¨¦n de lo que he sido.

-?Has notado en este libro una evoluci¨®n de tu voz literaria o un cambio de postura vital respecto a los anteriores?

-Creo que el salto m¨¢s grande lo di entre Hemisferios y El castigo de S¨ªsifo, pero veo un estilo y una voz muy parecida entre este ¨²ltimo que te digo y Color¨ªn Colorado. Sobre todo en el hecho de que El castigo de S¨ªsifo es una reinterpretaci¨®n de mitos, y este una reinterpretaci¨®n de cuentos. El proceso creativo es muy parecido en tanto que consiste en pensar en una tem¨¢tica que pueda adaptarse a la raci¨®n inicial. Incluso los veo parecidos en forma. De hecho podr¨ªan formar parte de una trilog¨ªa y que sacara un tercero, no s¨¦, de pel¨ªculas de Tarantino (r¨ªe).

-O de tebeos, como los que le¨ªas tiempo atr¨¢s.

-S¨ª, por ejemplo. Al final es que tienen mucho en com¨²n los mitos y los cuentos; ambos comparten esa tradici¨®n oral. Veo a los dos libros como parte de un todo, de una colecci¨®n.

Nadie te prepara para la vida cuando eres un ni?o o un adolescente

Pablo P¨¦rez Rueda, Blon

-Incluso comparten una finalidad extraliteraria: los mitos se empleaban para dar una explicaci¨®n al entorno y los cuentos, en ocasiones, eran utilizados para un objetivo pr¨¢ctico, como pod¨ªa ser infundir miedo a un ni?o para que no entrase al bosque.

-Exacto. Al final cada uno guarda un mensaje. El patito feo, Hansel y Gretel... Buscan huir de esos cantos de sirena. Todos tienen un mensaje. Aqu¨ª lo que he intentado es coger esos mensajes de cada uno y traerlos al mundo actual, pero bas¨¢ndome en esa identidad. Y tambi¨¦n en otras cosas. Por ejemplo, el de Rapunzel no tiene nada que ver con el cuento: hablo del cambio clim¨¢tico porque le salen ra¨ªces en la cabeza en lugar de la trenza. Son cosas que se me van ocurriendo y para m¨ª es lo m¨¢s divertido. Sentarme, leer el cuento y darle vueltas.

-Tambi¨¦n en el de los tres cerditos se aprecia una fuerte conciencia de clase en la voz po¨¦tica. ?Crees que la poes¨ªa tiene poder para mover el mundo?

-Es un veh¨ªculo important¨ªsimo para la denuncia y para darle voz a todo aquello que en otros ¨¢mbitos no ser¨ªa posible. En el poema de El traje nuevo del emperador es contra la monarqu¨ªa. Al final yo no me guardo nada cuando escribo. ?Si tiene poder? No s¨¦ si para cambiar el mundo, pero s¨ª para remover conciencias.

-Y lo haces a trav¨¦s de elementos concretos. Es un libro muy simbolista donde algunas figuras concentran a lo largo de las p¨¢ginas ciertas connotaciones recurrentes. Quiz¨¢ la m¨¢s clara sea la del lobo.

-Aparece en varios poemas y creo que en cada uno con un significado distinto. En el poema de Los tres cerditos representa el poder y las altas esferas; en el de Caperucita le doy una vuelta y, al final, la propia chica es el lobo... La figura del lobo se ha relacionado siempre con el peligro, la ferocidad, el instinto m¨¢s primitivo. Y yo lo he intentado hacer as¨ª, pero lig¨¢ndolo a la actualidad. De ah¨ª que, por ejemplo, cuando representa a las altas esferas, no pare de comer, no escuche lo que hay fuera de los muros de su palacio o que, directamente, se lleve por delante a quien llegue a ¨¦l. Como hist¨®ricamente se ha descrito a un lobo, pero en 2025.

-?Qu¨¦ ocurrir¨ªa si le llevas este poemario a los hermanos Grimm?

-Se quedar¨ªan flipados (r¨ªe). Igual leen el poema de Pinocho, que va de redes sociales, y se preguntar¨ªan ¡®?pero qu¨¦ es eso?¡¯. En realidad, creo que hay un cambio de paradigma y ambas visiones colisionar¨ªan. Han pasado much¨ªsimos a?os y la sociedad ha cambiado, igual que seguramente este libro en un siglo se ver¨¢ como algo arcaico, casi prehist¨®rico. Pero seguro que les har¨ªa gracia ver una reinterpretaci¨®n de sus historias.

-?Cu¨¢l de ellas es tu favorita?

-Me gusta mucho el de Aladd¨ªn por c¨®mo lo escrib¨ª, porque se parece mucho al estilo de mi poeta favorito, que es Luis Garc¨ªa Montero; pero por la idea, tanto el de Ricitos de oro, que habla del trastorno obsesivo-compulsivo, como el de Blancanieves, donde cada enanito es un s¨ªntoma de la ansiedad; para hacer eso me inspir¨¦ en una chirigota del carnaval de C¨¢diz en la que cada enano era una secuela negativa de las adicciones. Y luego me gusta mucho El traje del emperador. Hombre, gustarme me gustan todos porque si no no los hubiera publicado. Pero tengo favoritos, s¨ª.

-?Y un verso?

-Me gusta el verso final de Bambi. En ese poema mato dos p¨¢jaros de un tiro: hablo de la caza y del duelo. Trato tambi¨¦n el tema de la muerte, especialmente en el momento en el que Bambi se quiere esconder, pero la parca espera impasible. Se sabe que le acabar¨¢ alcanzando porque todos vamos a morir.

Una mente atormentada y un tren sin destino ni freno

-Percibo en el libro la voz de alguien que se ha roto y que se ha reconciliado consigo mismo. ?Te consideras emocionalmente estable?

-Ocurre exactamente as¨ª. No lo soy. He pasado momentos complicados: depresi¨®n, mucha ansiedad, tengo trastorno obsesivo-compulsivo... Y eso se ve reflejado en mi obra. Mi libro es uno de los pocos sitios donde puedo explicarlo tal y como es; donde puedo explicarme tal y como soy. En otras ocasiones me cuesta hablar de eso y lo puedo evitar, pero cuando me pongo a escribir no puedo enga?ar al folio.

Se ven momentos oscuros de mi vida, tanto en el libro como en mis canciones. Soy una persona bastante atormentada. Pero para eso est¨¢n los profesionales tambi¨¦n. Al final... Es una posici¨®n dif¨ªcil la del freestyler. Que todo sea tan cuantificable en redes y en todo lo que haces. Es muy jodido. Los tiempos cambian y lo que antes era espectacular igual ya no lo es tanto. A nivel mental te va minando. Y si no sabes afrontarlo te acaba pasando factura.

-Debido a esa volatilidad, ?convive el freestyler con el miedo al olvido?

-Constantemente. No ganar el dinero de la jornada es la ¨²ltima preocupaci¨®n para un freestyler que desciende de FMS. La preocupaci¨®n principal es que te olviden. Siempre. Yo he vivido siete temporadas y las siete con miedo a descender porque pensaba que el descenso era el olvido absoluto. Y me cost¨® mucho dar el paso para retirarme porque si no est¨¢s en el foco hay menos ojos encima de ti y menos voces que hablan de ti. Es complicado ver c¨®mo tus publicaciones pasan de tener un n¨²mero de likes o comentarios a tener la mitad; ver c¨®mo te paran menos por la calle.

Todo eso es dif¨ªcil, pero forma parte de la evoluci¨®n del artista. Mantenerse igual es muy complicado, pero seguir en primera l¨ªnea tambi¨¦n, y yo considero que lo he hecho. Tambi¨¦n es cierto, no nos vamos a enga?ar, que el freestyle ahora no est¨¢ en su mejor momento. Me pasa a m¨ª y le pasa a todos. Sinceramente, y esto puede sonar un poco ego¨ªsta, pero si el freestyle llega a estar como estaba en 2018 o 2019 yo no me hubiera retirado. Y esto es as¨ª. Cien por cien.

-No se habla tanto por la calle de free. Y cuando se menciona la gente sobreentiende que es algo desfasado.

-Claro. Me encuentro a gente por la calle y la frase recurrente es ¡®yo antes ve¨ªa free¡¯. Es duro, pero s¨ª: de cada diez personas que me paran, nueve me dicen ¡®yo antes ve¨ªa free¡¯. A nivel social ha quedado como algo un poco obsoleto.

-?Es una fuente creativa ese desequilibrio emocional de una vida tan intensa?

-Absolutamente. Dec¨ªa Lechowski que donde duele, inspira.

-?Es ¨¦tico pedir a un artista que ¡®sangre¡¯ y que escriba con dolor cuando el resultado es brillante?

-Ah¨ª es hasta donde cada artista quiera llegar. Si la gente quisiera eso por activa y por pasiva y a m¨ª no me nace... Es algo muy personal. En mi caso, desde que empec¨¦ a escribir, va impl¨ªcito en m¨ª; inevitablemente me sana por todo lo que he sufrido, m¨¢s por ser muy sufridor que por tener una mala vida. Escribo letras duras.

El otro d¨ªa un chaval me dijo que Hielo era su canci¨®n favorita, pero que solo se la pon¨ªa cuando quer¨ªa romperse. Y yo recuerdo haberla escrito liber¨¢ndome al m¨¢ximo y sintiendo much¨ªsima paz al terminar. Me pasa lo mismo con los poemas. Tambi¨¦n es cierto que mi forma de escribir y de proyectar el mensaje siempre ha sido triste, melanc¨®lica y nost¨¢lgica. Mi forma de ser es as¨ª; y mi forma de ver el arte tambi¨¦n. Seguir¨¦ siendo un poco maldito.

-?Te consideras m¨¢s rapero, freestyler o escritor?

-Una mezcla de todo, como una p¨®cima: en un caldero hay una pizca de freestyle, un poco de poes¨ªa y un poco de m¨²sica. No obstante, si me tuviera que quedar con una creo que ser¨ªa la escritura. Siempre lo he dicho: creo que soy m¨¢s un escritor que rapea que un rapero que escribe. Se me da mucho mejor escribir que rapear. Y creo que mi ¨¦xito ha llegado por c¨®mo manejo la palabra y las emociones.

Me di cuenta de peque?o. Cuando escribo entro en trance. Termino y hay cosas de las que ni me acuerdo. La gente que me conoce me suele decir que tengo una manera diferente de expresarme oralmente a la que tengo de escribir. No s¨¦. Es cierto que ves un directo m¨ªo de Twitch y ves un poema y no parece la misma persona.

-La dualidad del artista. ?Son Pablo P¨¦rez Rueda y Blon la misma persona?

-Cada vez lo son m¨¢s. Uno es mi nombre original y el otro, el art¨ªstico. Me gusta que salgan los dos en el libro. Blon es la persona que escribe, y Pablo es la persona que vive. Porque sin vivencia no hay escritura; y seguramente sin escritura tampoco habr¨ªa vivencias. Se complementan.

-Si nos sentamos en un bar dentro de 25 a?os, ?qu¨¦ te gustar¨ªa decirme?

-Que me han ido incre¨ªble las ¨²ltimas diez giras que he hecho. Siempre lo he dicho, aunque tampoco he hecho mucho porque sea as¨ª. Me encantar¨ªa poder pasar unos a?os dedic¨¢ndome a la m¨²sica. Y s¨¦ que hay mucha gente que lo lleva esperando mucho tiempo, s¨¦ que tuve un momento que lo llegu¨¦ a petar mucho, pero me gustar¨ªa. Eso a nivel profesional. A nivel personal me gustar¨ªa sentarme contigo y decirte: ¡®qu¨¦ tranquilo he vivido estos a?os, qu¨¦ feliz he sido y qu¨¦ bien me lo he pasado¡¯.

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