Daniel Kenedy, el exfutbolista arruinado de PSG y Oporto que hoy es conductor de VTC
El que fuera defensa de la selecci¨®n portuguesa durante los Juegos Ol¨ªmpicos de 1996 arruin¨® su vida con la ludopat¨ªa y ahora se declara insolvente ante la justicia lusa.
La d¨¦cada de los noventa fue para Daniel Kenedy un manantial de oportunidades que brotaban de su papel como joven promesa del f¨²tbol portugu¨¦s: milit¨® cinco temporadas en el Benfica, fich¨® por el PSG y, un a?o despu¨¦s, aterriz¨® en el Oporto (en estos a?os participar¨ªa con la selecci¨®n lusa en los Juegos Ol¨ªmpicos de 1996. Continuar¨ªa hasta 2005 en la liga portuguesa, pasando por Estrela Amadora, Mar¨ªtimo, Sporting Braga y Acad¨¦mica ¡ªcon el curioso par¨¦ntesis de tres partidos en el Albacete¡ª, para despu¨¦s emigrar a Grecia, previo paso por Ucrania.
Su carrera no estuvo anclada a la mayor ¨¦lite futbol¨ªstica, pero fue inevitable esconder la sorpresa que supuso la revelaci¨®n sobre las lindes que recorri¨® su vida despu¨¦s del f¨²tbol: hab¨ªa perdido todo por su adicci¨®n al juego. Ahora su nombre vuelve a salir a la luz tras haberse declarado insolvente ante la justicia portuguesa y, adem¨¢s, por anunciar que ha decidido emplearse a fondo en su nuevo trabajo. Ser¨¢ conductor de Uber en Lisboa.
Una ca¨ªda lenta y gradual
Tal y como ha revelado Correio da manha, el exfutbolista ha tocado fondo con sus deudas, situ¨¢ndose entre sus acreedores la Autoridad Tributaria y Aduanera, la Seguridad Social, Hefesto STC S.A (una sociedad de titulizaci¨®n de cr¨¦ditos) y JLL Residencial (una empresa de mediaci¨®n inmobiliaria). El tribunal consider¨® que Kenedy se encontraba en paro al registrar sus datos en el Centro de Empleo, que la insolvencia era ¡°fortuita¡± y que, adem¨¢s, tampoco ten¨ªa ning¨²n bien que liquidar.
Toca fondo despu¨¦s de un largo calvario que encontr¨® en la ludopat¨ªa el ancla que le sumergi¨® violentamente. ?l mismo reconoci¨® en 2020, frente a los micr¨®fonos de Record, que su mala situaci¨®n naci¨® ah¨ª. ¡°Lo perd¨ª casi todo en el juego. Y cuando no tenemos, recurrimos a otras personas. En cierto momento se convierte en una bola de nieve. En la fase final, antes de dejarlo, iba m¨¢s al casino para cumplir con las responsabilidades que hab¨ªa asumido con esta gente¡±, dijo entonces.
Su ca¨ªda empez¨® en 2002, cuando todav¨ªa era futbolista de primer nivel, casi diez a?os antes de su retiro, y se alarg¨® hasta el presente, de manera lenta y gradual. ¡°Yo no era esa persona que iba al casino y dejaba fortunas all¨ª. Durante mi carrera tampoco gan¨¦ millones. Fue poco a poco... Y esos pocos, casi cada d¨ªa, me llev¨® a la situaci¨®n en la que estoy hoy¡±, a?adi¨® en aquella confesi¨®n hace cuatro a?os.
Kenedy ha logrado enderezar su situaci¨®n laboral, reinserci¨®n que se ha producido casi a la par que la comentada declaraci¨®n de insolvencia; el exfutbolista ha sorprendido a propios y extra?os al anunciar que ha empezado a trabajar como conductor en una empresa de VTC. ¡°Tengo mis sue?os. Mi sue?o es el f¨²tbol, me encanta el f¨²tbol. Pero mis sue?os est¨¢n a la puerta. Hoy comenzar¨¦ mi trabajo en Uber con gran honor y dignidad¡±, ha dicho a trav¨¦s de sus redes sociales.
Encara as¨ª el exfutbolista una nueva etapa en su vida, con una sonrisa en el rostro y tras hacerse p¨²blico que su infierno econ¨®mico no puede excavar m¨¢s. ¡°?Ser¨¦ el mejor Uber de Lisboa!¡±, se despide aquella promesa portuguesa que ahora alumbra la proyecci¨®n de un nuevo comienzo.
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