Un 芍ngel y dos demonios en el may迆sculo fraude de Son Moix
Sufri車 el Espanyol cuatro penaltis -dos los detuvo Joan- y escaso tiempo a?adido, por parte de Quintero y del mismo VAR, Del Cerro Grande, del pol谷mico descenso de hace 22 meses en Mestalla.
Medio millar de pericos pueden presentarse como testigos, quienes acudieron a Son Moix. En realidad, cualquiera que lo viera por televisi車n. En poco m芍s de media hora, sufri車 el Espanyol el lanzamiento de cuatro penaltis (?cuatro!), por supuesto concluyentes en una derrota que se inici車 ese delirio era victoria, 0-1, con gol en propia puerta de Muriqi al inicio del segundo acto. Y un tiempo esquilmado al conjunto perico que no volver芍, igual que no volvi車 lo que se perdi車 en Mestalla hace 22 meses, el d赤a del descenso, curiosamente con el mismo responsable del VAR: Del Cerro Grande. Quintero Gonz芍lez, con apellido de dramaturgo ilustre, certific車 esta vez sobre el c谷sped la tragedia perica.
Poco se puede alegar sobre el primero de los penaltis, evitable, innecesario, de Omar El Hilali sobre Mojica, en que Joan Garc赤a escribi車 un nuevo cap赤tulo de su leyenda, el primero desde su m芍s que cuestionable ausencia en la convocatoria de Luis de la Fuente al frente de la Selecci車n espa?ola. Pero es que normal que faltase, porque Joan no es de este planeta.
Antes del segundo penalti llegar赤a el 1-1 de Asano, que aun siendo a bocajarro lleg車 a tocar el guardameta del Espanyol. Pero es que en la jugada previa, pudo se?alarse una posible pena m芍xima de Mojica sobre Jofre, a quien derriba primero con los brazos y acto seguido, desequilibr芍ndole con su pierna izquierda.
De merodear de nuevo el segundo gol, en los pies de Puado, ven赤a el Espanyol cuando Quintero pit車 otro penalti en contra, por una mano de Kumbulla en una posici車n tan natural que, esta vez s赤, el 芍rbitro tuvo que desdecirse a instancias del VAR. Pero es que el tercer penalti, ya flirteando con el final del tiempo reglamentario, fue igual de pol谷mico. Porque Cabrera abate a Abd車n Prats, s赤, pero es que viene el central desequilibrado por haber topado previamente con Muriqi.
Aun as赤, agrand車 Joan su leyenda al detener no solo su segundo penalti de la tarde sino tambi谷n el rechace, en una atajada todav赤a m芍s espectacular. Y se reanud車 el juego, hasta que unos minutos m芍s tarde, incomprensiblemente, Del Cerro avis車 desde la sala VOR a Quintero sobre alg迆n detalle tan ininteligible que ni la realizaci車n televisiva acertaba a encontrarlo.
Y resulta que se acogi車 el VAR, y por supuesto no le desminti車 Quintero, a que supuestamente Kumbulla hab赤a entrado antes de tiempo en el balc車n del 芍rea en el momento de ejecutarse la pena m芍xima, aunque no interfiriera en absoluto en la jugada. A la cuarta fue la vencida, y en el minuto 97 anot車 el Mallorca el definitivo 2-1, imparable, y eso que Joan acert車 la trayectoria.
Para colmo, se hab赤an decretado ocho minutos de a?adido que pr芍cticamente se perdieron con la revisi車n y sin embargo no se recuperaron una vez reanudado el juego. Adem芍s de penaltis, se le esquilmaron al equipo blanquiazul unos minutos preciosos.
Que la sombra del descenso de 2023 planea sobre el espanyolismo hasta el punto de que as赤 lo dej車 caer el director deportivo, Fran Garagarza, en una comparecencia ins車lita en los cobardes tiempos de Rastar Group, contundente, dur赤sima, por parte del director deportivo. La respuesta que merec赤a el delirio vivido, entre un 芍ngel llamado Joan y dos demonios, que no son la mascota del Mallorca sino Del Cerro y Quintero.
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