Pirri for President
Fue el jugador que personific¨® una revoluci¨®n tranquila, la transici¨®n del Madrid cl¨¢sico al Madrid moderno, el equipo yey¨¦ que defin¨ªa esa nueva ola del Real Madrid.

No puedo dejar de mirar la foto que el maestro Ra¨²l Cancio le hizo a Pirri el d¨ªa de su homenaje en el Bernab¨¦u, en un partido que ¨²nicamente la imaginaci¨®n de un ni?o pod¨ªa so?ar, un Real Madrid-Selecci¨®n Espa?ola. Solo en el vestuario, con las botas en las manos, m¨¢s futbolista que nunca sabiendo que, sin embargo, el f¨²tbol se acaba, con un abatimiento resignado, una profunda dignidad. Es una imagen universal: veo a mi padre cuando se retir¨®, e incluso, a distancia sideral, me veo a m¨ª mismo cuando ya no me aguanten las piernas y no pueda jugar m¨¢s.

Un a?o antes de aquella estampa de h¨¦roe grecorromano, el ¨²ltimo partido oficial de Pirri en Espa?a (la final Madrid-Castilla del 80) fue un ba?o tal de madridismo que, como a Ob¨¦lix, le otorg¨® el superpoder blanco para toda la eternidad. Pero no necesitaba poci¨®n m¨¢gica, Pirri se com¨ªa el campo. Todocampista de la escuela Di St¨¦fano, calidad y entrega en una sola persona: lleg¨® como joven delantero en una alineaci¨®n de 5 puntas, pas¨® a mediocentro de ¨¢rea a ¨¢rea, a organizador, y acab¨® de l¨ªbero. De Jos¨¦ Mart¨ªnez S¨¢nchez a Doctor Mart¨ªnez, todas sus vidas han pasado por el club: m¨¦dico, secretario t¨¦cnico, director deportivo¡
Fue el jugador que personific¨® una revoluci¨®n tranquila, la transici¨®n del Madrid cl¨¢sico al Madrid moderno, el equipo yey¨¦ que defin¨ªa esa nueva ola del Real Madrid, la Nouvelle Vague del f¨²tbol. Era un tipo diferente: aficionado a las c¨¢maras en las concentraciones, Pirri, cuyo apodo molestaba a Bernab¨¦u, fue un Antoine Doinel, como el rebelde de Truffaut, que se llev¨® m¨¢s de 400 golpes con los que mereci¨® la Laureada del club por no reblar jam¨¢s (en la final de Copa del 68 jug¨® con fiebre y la clav¨ªcula rota). Adem¨¢s, estudiaba: medicina, nada menos, y se enamor¨® de Sonia Bruno, la Anna Karina espa?ola, el rostro del cambio en el cine espa?ol.
Ha querido el destino que el nombramiento del nuevo Presidente de Honor del Real Madrid coincidiera con una campa?a electoral encarnizada y ha sido un alivio ver que aqu¨ª s¨ª que hay quorum. No hay discusi¨®n: ha sido elegido el mejor.