Guardiola y la droga en el colacao
En cualquier otro pa¨ªs, Guardiola habr¨ªa sido considerado para el Princesa de Asturias.

Sigue creciendo el n¨²mero de aficionados que prefieren abrazar la en¨¦sima teor¨ªa de la conspiraci¨®n a reconocer que Guardiola les ha dado una nueva lecci¨®n de f¨²tbol con las ventanas abiertas, es decir: con todo el mundo mirando. Y se habla, casi sin ning¨²n rubor, de una intoxicaci¨®n intencionada. Del envenenamiento de la primera plantilla del Real Madrid, ni m¨¢s ni menos. Se habla, en definitiva, de que a los blancos les echaron droga en el colacao como si el club citizen hubiese ca¨ªdo, recientemente, en manos de los herederos de Jos¨¦ Tojeiro, que en paz descanse: este es el nivel de estr¨¦s al que solo Pep Guardiola parece capaz de someter al club m¨¢s laureado de la historia.
Si el Madrid se jugase una de sus Copas de Europa contra Guardiola cada vez que se enfrentan, ya le saldr¨ªa una a deber: otro dato proyectado que nos da a entender la magnitud del elemento. O de la tragedia, seg¨²n se mire. Porque algo tr¨¢gico debe haber en ese empe?o irracional por despojar a Guardiola de todos sus m¨¦ritos, por negarle el pan y la sal, por no reconocer que ofrece algo bello al mundo, que ha cambiado el f¨²tbol y que gana m¨¢s que nadie. Cincuenta t¨ªtulos figuran en su palmar¨¦s. Y a pesar de ello, cada d¨ªa, en cada rinc¨®n del mundo, o en cualquier red social, aparece un repetidor de segundo de la ESO, un dictador en el exilio o un pianista sin piano a decir aquello de ¡°Pep Guardiola es un fracasado¡±. Es mejor creer en la teor¨ªa del envenenamiento, los chemtrails y la droga en el colacao, lo digo de verdad: la gente te respeta m¨¢s si cuentas eso.
En cualquier otro pa¨ªs ya habr¨ªa sido considerado para recibir el Princesa de Asturias de los Deportes, como su buen amigo Manel Estiarte. O quiz¨¢s no, porque el da?o infligido habr¨ªa sido el mismo y el madridismo es, a la postre, universal. Tampoco lo necesita. Es la bestia negra del equipo de los dioses. Es Sant Jordi encerrando al drag¨®n en su propia ¨¢rea. Es aquella actriz que reconstruy¨® el caso de Tojeiro para televisi¨®n y dec¨ªa: ¡°Abre, Jos¨¦. Que somos nosotras¡±. Un consejo, Jos¨¦: no abras.