Dos trenes en estaci¨®n intermedia

Flick y Ancelotti. Bar?a y Madrid son estos d¨ªas dos trenes en una estaci¨®n intermedia. El Bar?a parece ir en la direcci¨®n y hacia el destino del que viene el Madrid, aunque el cruce de caminos de hoy en Montju?c le d¨¦ una oportunidad m¨¢s al campe¨®n. Flick est¨¢ empezando algo en Barcelona. Ancelotti lo est¨¢ acabando en el Real. Esto no estaba en los planes el verano pasado. Ganador de todo, al Madrid se le auguraba un reinado largo, porque a?ad¨ªa Mbapp¨¦ a su colecci¨®n de fant¨¢sticos. Las previsiones para el Bar?a eran fatales, especialmente despu¨¦s de un 0-3 descorazonador en un d¨ªa tan especial como la presentaci¨®n ante su gente en el Gamper. El club, a punto de cumplir 125 a?os, parec¨ªa condenado a alargar sine die su traves¨ªa del desierto en mitad de un ruido institucional insoportable y un exilio prolongado por las obras en su casa del Spotify Camp Nou. Sonaban campanas electorales. Lo que ha pasado estos meses ha tenido algo de extraordinario y lleva grabado la marca Flick. Pero ahora, parad¨®jicamente, tampoco se ve tan extra?o. El Madrid se llen¨® de estrellas y se olvid¨®, hu¨¦rfano de Kroos y con Modric ya exprimido, del resto de funciones vitales que mueven a un equipo de f¨²tbol, especialmente en la construcci¨®n. El Bar?a ha superado las expectativas, pero revisando su equipo uno choca con cuatro campeon¨ªsimos de la Eurocopa (Pedri, Olmo, Lamine y Ferran), tres oros ol¨ªmpicos (Eric, Ferm¨ªn y Cubars¨ª), y un grupo de maduros y veteranos (Kound¨¦, Raphinha, De Jong, I?igo, Lewandowski...) que han corrido al ritmo que exig¨ªa el ¡°patio de colegio¡±, como les bautiz¨® Olmo. Es tan extra?o el f¨²tbol que pese a no haber recortado puntos desde que la diferencia qued¨® en cuatro en la jornada 30, al Madrid le ha dado un impulso moral la eliminaci¨®n del Bar?a en la Champions. Viaja con un entrenador de despedida y un vestuario consciente de que vienen cambios, pero seguro de que a¨²n puede darle un zarandeo final al guion de LaLiga.

Lamine y Mbapp¨¦. LaLiga 2024-25, pues, todav¨ªa no ha puesto su apellido. Las predicciones apuntaban a Mbapp¨¦ y el franc¨¦s, con sus altos, bajos, y el perd¨®n federativo despu¨¦s de su espeluznante entrada a Antonio Blanco, todav¨ªa est¨¢ a tiempo de hac¨¦rsela suya. Tiene a tiro los 25 goles de Lewandowski y su aparici¨®n en la final de La Cartuja tuvo un efecto desestabilizador en el Bar?a, que no pod¨ªa con ¨¦l. Y luego est¨¢ Lamine, que se sienta ya por derecho en la mesa de los grandes, pero que el martes sufri¨® una de las primeras grandes decepciones de su carrera. Hoy descubriremos si se levanta como las aut¨¦nticas leyendas.

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