CEO, vuelve a por otra

Vaya profeta.- Todd Boehly, CEO y due?o del Chelsea, se vino arriba tras la generosa ingesta de la comida de directivas celebrada en Zalaca¨ªn y vaticin¨®, sin despeinarse, que los blues iban a ¡°ganar 3-0 en el Bernab¨¦u¡±. No s¨¦ si mezcl¨® Rioja con Ribera o si el chulet¨®n de buey estaba poco hecho. El caso es que el dirigente norteamericano, due?o de mi equipo favorito de b¨¦isbol, los Dodgers, no valor¨® d¨®nde estaba ni con qui¨¦n se iba a jugar los cuartos horas m¨¢s tarde. Y mira que le sobran, porque tras hacerse con el club londinense tras irse Roman Abramovich se ha gastado m¨¢s de 600 millones de euros en las dos ¨²ltimas ventanas de mercado. El Madrid, apenas los 80 invertidos en un actual suplente (Tchouameni). Pero la clave es que Ancelotti maneja un EQUIPO con may¨²sculas, que se mueve en la Champions como si fuese un brazo extensor de su camiseta. La afici¨®n cambia el chip mon¨®tono de la Liga y acude con su traje de boda, los jugadores olvidan el m¨®vil por unas horas y viven las horas previas con la tensi¨®n de las grandes noches, los rivales salen con la mosca en la oreja y llegan al Bernab¨¦u como aterrizan los turistas en las pir¨¢mides de Egipto pregunt¨¢ndose donde est¨¢ la clave del misterio. La respuesta es f¨¢cil. Es el Real Madrid Club de F¨²tbol, Rey de la extinta Copa de Europa (seis t¨ªtulos) y Emperador de la Champions (ocho coronas con el nuevo formato). Todos esos elementos conjugados hacen que el 2-0 final, pese a la roja a Chilwell, sea consecuencia l¨®gica de la superioridad, futbol¨ªstica, esc¨¦nica y emocional, demostr¨¢ndole a mi admirado Todd Boehly que lo mejor es seguir amasando fortunas y olvidarse de su vocaci¨®n prof¨¦tica. Al Madrid conviene no menospreciarle nunca y menos despu¨¦s de varios brindis...

Karim y Courtois.- La clave de un equipo campe¨®n es tener al mejor portero y al mejor delantero centro. Eso pudimos constatarlo en un minuto de locura. Antes de la media de hora de juego, una magn¨ªfica pelota enviada por Carvajal (?partidazo del madrile?o!) permiti¨® a Vinicius meter su punterita para desarmar a Kepa, que bastante hizo con desviarla sin poder evitar que Benzema, que oli¨® la sangre como solo saben hacer los arietes talentosos e inmisericordes, empujase el esf¨¦rico para abrir la lata blue, muy fr¨¢gil pese a los tres centrales paquid¨¦rmicos ordenados por el legendario Lampard. Pues con la gente abraz¨¢ndose todav¨ªa en la grada lleg¨® una contra que termin¨® con un remate a bocajarro de Sterling. Gol de manual, pero ah¨ª irrumpi¨® la volada maravillosa de Courtois, salvando un tanto que hubiese apagado la caldera de Ancelotti. Esto es el f¨²tbol, un desarrollo de instantes y momentos en cuya jungla s¨®lo sobreviven los mejores. Y Tibu y Karim lo siguen siendo. Con mucha diferencia...

Danke, Antonio.- En alem¨¢n significa ¡°gracias¡±. R¨¹diger evit¨® en el descuento un gol de Mount que hubiese dejado fr¨ªos a todos. Y m¨¢s despu¨¦s de ese golazo de Asensio, el ni?o maravilla que ya lleva 9 dianas en Champions saliendo como revulsivo al campo. Se est¨¢ consagrando como el jugador n¨²mero 12, la antesala de la titularidad si sigue por ese camino. ?Renovaci¨®n ya! Pero si no llega a ser por R¨¹diger, otro suplente que sum¨® y aport¨® desde el banquillo, a estas horas estar¨ªamos diciendo que el Madrid ha desperdiciado una ocasi¨®n ¨²nica. Pero no es el caso. Un 2-0 es un tesoro y en Stamford Bridge hay que consumar el pase a semifinales. Apetece v¨¦rselas de nuevo con el City de Guardiola. Pep, el Bernab¨¦u te espera...