Duro golpe de realidad
El error de Leclerc llega en pleno debate sobre las prioridades y Sainz ha vuelto. ¡°Podemos ganar las pr¨®ximas diez carreras¡±, asegura Binotto.


Tanto ruido acompa?¨® a la victoria de Sainz en Silverstone y su competitividad en Austria, por eso de que Leclerc pudiera ser prioritario para luchar por el t¨ªtulo seg¨²n ciertos sectores de la Prensa, que el grave error del joven Charles en Paul Ricard ha ca¨ªdo con estruendo en el paddock. Nadie quiere que el t¨ªtulo de Verstappen est¨¦ finiquitado con media temporada por delante, pero el monegasco se estrell¨® solo cuando lideraba el GP de Francia en una postal que recuerda a Hockenheim 2018, cuando Vettel tir¨® por tierra sus remotas opciones de batir aquel a?o al campe¨®n, entonces Hamilton.
Con Leclerc el debate tiene m¨¢s aristas: es un piloto muy r¨¢pido, no hay duda, genial a una vuelta (16 poles en su corta carrera, siete en 2022) y algo menos s¨®lido el domingo, pero competitivo igualmente. ?Madera de campe¨®n? Ferrari cree que s¨ª y tambi¨¦n Italia y Francia, sus pa¨ªses de adopci¨®n. Pero la tasa de conversi¨®n es baja, son solo cinco victorias en este tiempo y muchas ocasiones perdidas por razones diversas. Mucho por demostrar a¨²n, con 24 a?os. Adem¨¢s, poco le separa de Sainz: el a?o pasado Carlos acab¨® el a?o por delante y en este curso, con problemas de adaptaci¨®n al F1-75 por parte del madrile?o, ya se puede decir que est¨¢ al mismo nivel. La enorme actuaci¨®n de Carlos en Le Castellet contrasta con la imagen de un derrotado Leclerc. Si Sainz cuaja un buen GP de Hungr¨ªa, aquello de las prioridades puede quedar definitivamente desterrado antes del par¨®n de verano.

Binotto, jefe de la Scuderia, no hizo sangre del fallo humano: ¡°Charles es un piloto fant¨¢stico que esta vez cometi¨® un error¡±. El ingeniero suizo de origen italiano se queda con el enorme potencial del F1-75, otra vez dominante sin premio. ¡°Lo que le he dicho a Charles: ahora es m¨¢s dif¨ªcil pero no es imposible. Si ganamos (el t¨ªtulo), lo disfrutaremos m¨¢s¡±. Uno escucha a Mattia y parece que no es consciente de los 63 puntos de ventaja que tiene Verstappen en el campeonato. Es correcto: ¡°No lo s¨¦, no estoy contando puntos. No s¨¦ cu¨¢l es la desventaja. Estoy centrado en lograr el mejor resultado posible en cada carrera. No fue posible en Paul Ricard, vamos a por Hungr¨ªa. Todas las carreras cuentan lo mismo y haremos la suma al final de la temporada. Con este paquete, no hay razones para no pensar que podemos ganar las pr¨®ximas diez carreras¡±. Sea mensaje de motivaci¨®n o huida hacia adelante, Ferrari no ha sido menos fuerte que Red Bull en las primeras doce carreras de esta temporada. Queda otra decena, es cierto.
Sainz, el estratega desde el coche
Al otro lado del garaje, otra vez qued¨® la sensaci¨®n de que Sainz correg¨ªa decisiones del muro sobre la marcha: retras¨® la segunda parada tanto como pudo, y eso que le ped¨ªan entrar en boxes mientras peleaba el tercer puesto a P¨¦rez con agresividad, y pudo aspirar al podio de haberse mantenido en la pista. ¡°Carlos no ten¨ªa toda la informaci¨®n y es dif¨ªcil juzgar desde ah¨ª. Los neum¨¢ticos no llegar¨ªan al final de carrera y era un riesgo quedarse. Adem¨¢s, no habr¨ªa tenido ritmo suficiente para abrir cinco segundos (por la penalizaci¨®n)¡±, matiza Binotto. Dijo que ¡°el coche era competitivo, la carrera de Carlos lo demuestra¡±. No llovieron los elogios por los 19 adelantamientos y la remontada desde el hasta el quinto puesto desde el fondo de la parrilla. Pero la F1 sigue, viaja a Hungaroring, y all¨ª Sainz debe hacer valer una ventaja, la nueva unidad de potencia que le brindar¨¢ unas cent¨¦simas extra en clasificaci¨®n. En Francia, su equipo por primera vez le vio como el piloto m¨¢s r¨¢pido de manera consistente. Hay partido.