Deathverse: Let It Die, análisis - Battle royale a medio gas

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El 28 de septiembre de 2022 llegó a PlayStation 4 y PlayStation 5 Deathverse: Let It Die, la nueva apuesta free to play de GungHo Online Entertainment y Supertrick Games. Este videojuego también estará disponible en PC en Steam a partir del 5 de octubre de 2022. En nuestro análisis os contamos todo lo que hay que saber sobre él: tanto sus virtudes como sus defectos. Vamos allá:

Deathverse: Let It Die, análisis - Una apuesta arriesgada con un futuro dudoso

Deathverse: Let It Die es el siguiente juego de los padres de Let It Die, aunque no estamos ante una secuela al uso; ni siquiera es un sucesor espiritual ya que estamos hablando de videojuegos de distinto género. Mientras que Let It Die era un souls-like free to play, Deathverse es, en cambio, un battle royale free to play. Cierto es que coge elementos de y hay gui?os a Let It Die, pero a grandes rasgos son títulos completamente independientes; en ningún momento es necesario haber jugado a Let It Die para ponernos a fondo con Deathverse.

Al ser un battle royale, en Deathverse: Let It Die no podemos hablar de trama al uso, sino de una premisa. Han pasado varios cientos de a?os tras el desastre conocido como la Ira de la Tierra (el cataclismo global que fue el punto de partida de Let It Die en el a?o 2026); para apaciguar a las masas surge el programa de televisión Death Jamboree, en el que solo ganará el último que quede con vida en cada certamen. Y ya está. Cada partida es un "episodio" de Death Jamboree; manejamos a un concursante (un personaje que podemos personalizar) que aspira a la gloria y la fama. A los que crecimos con títulos como Smash TV nos hará cierta gracia.

Supertrick Games, que son gran parte del personal de Grasshopper Manufacture que se quedaron con GungHo tras una separación forzosa, de nuevo muestran su buen hacer con Unreal Engine. A nivel técnico, Deathverse: Let It Die es considerablemente estable en PlayStation 5. No hemos notado ni caídas en la tasa de frames ni problemas de lag, si bien es cierto que no es un videojuego no muy ambicioso en lo visual.

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Sucede que las comparaciones con Let It Die, el "anterior capítulo" son inevitables. En Deathverse, los distintos escenarios jugables, aunque numerosos, son en esencia idénticos y solo se diferencian por su orografía. El apartado artístico es demasiado homogéneo y los niveles, pese a estar ambientados en ubicaciones variopintas, pecan de tener un aspecto demasiado similar. Los culpables aquí son el exceso de repetición de texturas y elementos del escenario tales como metal, óxido, tierra y sangre. Let It Die gozaba de mayor variedad.

En lo que sí que hay mejoras con respecto a Let It Die es en el aspecto de los avatares de los jugadores, haciendo hincapié en sus caras. Mediante un editor bastante rudimentario para los estándares de 2022 podemos crearnos un avatar que medio se puede diferenciar del resto, aunque las opciones de personalización iniciales son algo escuetas, entendemos que es porque precisamente se irán a?adiendo más con el paso del tiempo tal y como sucede con Nintendo Switch Sports.

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En cuanto al apartado sonoro, de nuevo, comparándolo con su "predecesor", sale perdiendo bastante por dos motivos: en esta ocasión no está Akira Yamaoka, y tampoco tiene una banda sonora con música licenciada de diferentes artistas japoneses. Las melodías originales de Deathverse pasan bastante desapercibidas, tanto las de los menús como las de las partidas en sí. El juego posee voces en inglés con textos en castellano.

Pero vayamos a lo que de verdad importa: el aspecto jugable. En esencia, Deathverse: Let It Die es un battle royale para hasta dieciséis jugadores enfocado en los ataques cuerpo a cuerpo. Las eliminaciones y los golpes con éxito en los jugadores enemigos nos regeneran salud, de modo que es posible que, un jugador que sea bueno y consistente, esté yendo de una pelea a otra y ganándolas. Las partidas tienen lugar en escenarios que, como es habitual en el género, se van "cerrando" con el tiempo (las zonas se llenan de veneno, para forzar a los jugadores a que se topen los unos con los otros) hasta que la acción se enfoca en una última zona central.

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Hay enemigos de la IA por los escenarios en forma de fauna salvaje; eliminarlos aumenta nuestra salud y nos sueltan materiales de fabricación. También aparece de vez en cuando un enemigo tremendamente poderoso denominado Cazador, que más que un rival de la IA sirve de peligro del escenario ya que pueden matarnos con suma facilidad.

Las partidas se mueven alrededor de una idea central: comenzamos siempre con la posibilidad de aumentar nuestra salud y nuestro poder de ataque a base de encontrar objetos por el escenario, eliminar a otros jugadores y liquidar a la fauna local; el procedimiento a seguir es "farmear" con tal de tener una ventaja significativa con respecto a otros jugadores para así poder alzarnos victoriosos. Tener más poder de ataque, mayor salud o la posibilidad de usar triqui?uelas como plataformas de salto o granadas cegadoras son algunas de las opciones que sirven como aliciente para la exploración.

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Deathverse: Let It Die coge elementos de Let It Die en lo jugable. Muchas armas han sido importadas de este título, algunas con varios cambios y otras siendo más fieles a sus versiones "originales". Como las armas se eligen siempre antes de cada partida y es imposible cambiarlas en mitad, su elección efectivamente determina nuestro estilo de juego. Cada una de ellas tiene sus pormenores, y dentro de cada "categoría" de armas hay subtipos con habilidades y movimientos especiales distintos. A priori parece un sistema muy profundo aunque en la práctica no es para tanto.

Los sistemas de Let It Die eran algo toscos, especialmente en lo que al combate se refiere, pero al menos daban la sensación de tener cierto nivel de cohesión. En Deathverse esa sensación es menor; hay armas que son excesivamente situacionales (y por tanto no recomendables) que efectivamente quedan eclipsadas por otras que son más polivalentes y fiables.

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Para rizar el rizo, Deathverse importa un sistema de fabricación de armas y objetos cosméticos muy similar al ya existente en Let It Die, algo que desde nuestro punto de vista no casa con el género battle royale y que complica bastante las cosas: hay demasiados tipos de monedas y recursos diferentes, por lo que en las primeras horas tal exceso de información nos abrumará y no tendremos ni idea de para qué sirve cada objeto.

Para concluir, Deathverse hace gala de elementos que ha popularizado Fortnite como una tienda con un dise?o muy similar a la del juego de Epic Games, un pase de temporada con más de un centenar de recompensas a desbloquear y multitud de retos y misiones tanto de temporada como semanales, todo esto dise?ados para mantener a los jugadores pegados todo el tiempo posible. Lo de siempre: el juego es gratuito, sí, pero se financia vía micropagos para conseguir objetos cosméticos.

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Sucede que, aunque tiene buenas ideas, no creemos que lo que propone Deathverse tenga recorrido a largo plazo, especialmente en un mundo en el que el mercado del género battle royale está más que saturado. No nos parece una propuesta especialmente original o innovadora. El tiempo nos dirá si nos equivocamos, y ojalá nos equivoquemos.

Por lo pronto, GungHo Online Entertainment tiene planes para que haya, al menos, tres temporadas del juego (hasta verano de 2023). Lo típico; irá siendo a?adido nuevo contenido en forma de más modos de juego (inicialmente solo está disponible todos contra todos para 16 jugadores) objetos cosméticos, armas, e incluso enemigos controlados por la IA.