Firmament, an¨¢lisis. Los creadores de Myst editan su nueva aventura

Vivimos una ¨¦poca de grandes retornos de ilustres nombres del pasado de esta maravillosa forma de ocio digital. Tras muchos a?os implor¨¢ndolo, por fin descubrimos el Secreto de la Isla de los Monos. Aunque con irregular resultado, disfrutamos de una nueva aventura a cargo del ilustre matrimonio Williams. Y este mismo mes, reviviremos nuestro inolvidable enfrentamiento con la inteligencia artificial Shodan en el esperado remake de System Shock. A este festival de enaltecimiento del pasado se suma la m¨ªtica compa?¨ªa Cyan Worlds, empresa americana fundada por los hermanos Rand y Robin Miller en 1987, principalmente conocida por el lanzamiento en 1993 de Myst, uno de los videojuegos m¨¢s influyentes y vendidos en la historia del medio. Firmament es la nueva apuesta de Cyan, y al igual que el ¨²ltimo t¨ªtulo de los mencionados Ken y Roberta, nos ha dejado un regusto un tanto amargo por ofrecernos una propuesta demasiado anclada en el pasado.

Firmament es una aventura en primera persona centrada en puzles de entorno y manejo de tecnolog¨ªa y mecanismos, muy inmersiva y que sigue a pies juntillas las se?as de identidad de la casa. Es decir, potente construcci¨®n de mundo y en contra de la tendencia actual del medio nada de llevar de la mano al jugador. Al contrario, lo que hace es soltarlo en un mundo extra?o, y que sea este quien se empape del mismo y descubra como avanzar sin tutoriales ni gu¨ªas, con una narrativa peculiar y esa sensaci¨®n de soledad y melancol¨ªa tan propias de Cyan. Si hemos jugado a Myst o cualquiera de sus secuelas, Riven y dem¨¢s, o al m¨¢s reciente Obduction, la f¨®rmula nos resultar¨¢ familiar, porque es calcada.

El problema de esto es que creemos que dicha f¨®rmula resulta un tanto anticuada para los tiempos que corren, y dif¨ªcilmente conectar¨¢ con el p¨²blico acostumbrado a un dise?o de videojuegos m¨¢s moderno. Firmament est¨¢ plagado de mec¨¢nicas obtusas, puzles complejos por un dise?o discutible o implementaci¨®n farragosa, y ofrece una narrativa difusa que se diluye entre tanto paseo y ofuscaci¨®n por superar unos rompecabezas de resoluci¨®n no siempre satisfactoria. Ya no es que se quede muy lejos de los reyes de los puzles en primera persona con fuerte carga narrativa como Portal 2 o The Witness, es que tambi¨¦n supone un paso atr¨¢s con respecto al ¨²ltimo t¨ªtulo de Cyan, Obduction de 2016, t¨ªtulo bastante m¨¢s satisfactorio, largo y pulido. En definitiva, Firmament es un juego recomendable para amantes de la f¨®rmula Myst o quien busque un juego de puzles muy de la vieja escuela, ¨¢rido y que no lleve de la mano al jugador, pero que dif¨ªcilmente conectar¨¢ con quien est¨¦ acostumbrado a propuestas m¨¢s modernas.

Descubre el Firmamento

Como no pod¨ªa ser de otra manera, el inicio de Firmament resulta desconcertante y muy misterioso. Ya desde la perspectiva en primera persona que no nos abandonar¨¢ en todo el juego, los primeros compases del t¨ªtulo nos muestran como despertamos de una suerte de ata¨²d steampunk, para ver c¨®mo una fantasma de acento franc¨¦s nos da la bienvenida al mundo, y nos informa de que somos el ¨²ltimo Guardi¨¢n y que tenemos una misi¨®n que cumplir para proteger un mundo del que nada sabemos. Sin m¨¢s informaci¨®n de quien somos o donde estamos, salimos al mundo avanzando sin ninguna indicaci¨®n, tratando de avanzar por el mero hecho de hacerlo.

La carga narrativa recae casi por completo en apariciones puntuales de la voz de esa fantasma que nos dio la bienvenida al mundo, que con cr¨ªpticas frases nos ir¨¢ poniendo en situaci¨®n. A parte de un par de libros que encontraremos, poca m¨¢s informaci¨®n vamos a obtener. Ni nos toparemos con otros personajes ni recabaremos informaci¨®n del mundo de Firmament en documentos o grabaciones como ocurre en otros t¨ªtulos. Para la ocasi¨®n, Cyan ha apostado la construcci¨®n del mundo de su ¨²ltimo t¨ªtulo en la potente recreaci¨®n visual del mismo, transmitiendo una sensaci¨®n de desolaci¨®n y abandono ante alg¨²n tipo de tr¨¢gico suceso que debemos enmendar.

Visitaremos tres reinos distintos y un nexo central que sirve como lugar de reposo de los Guardianes, todos ellos conectados por unas c¨¢psulas de transporte que nos llevar¨¢ a nuestro destino de modo inmediato. Desgraciadamente, como ya hemos comentado la casi inexistente y muy difusa narrativa pronto se diluye entre tanto paseo y frustraci¨®n por un dise?o de puzles discutible. Da la sensaci¨®n de que tanto a nivel de puzles como de narrativa Cyan se ha quedado demasiado anclada en el pasado, y no es consciente de las herramientas que el medio ofrece a d¨ªa de hoy.

Puzles de la vieja escuela

Nada m¨¢s comenzar el juego recibiremos una herramienta llamada adjunto, una suerte de guantalete con un rayo de energ¨ªa que nos permite interactuar con las conexiones de los diversos dispositivos y artilugios que pueblan el universo de Firmament. La verdad es que este sistema de interacci¨®n no resulta especialmente efectivo, y supone m¨¢s un quebradero de cabeza que un a?adido interesante al juego. A lo largo del mismo obtendremos 3 habilidades que potencian el Adjunto, pero lejos de que esto suponga nuevas mec¨¢nicas para la jugabilidad o resoluci¨®n de puzles, simplemente nos dar¨¢n acceso a lugares de los reinos que nos estaban vetados antes de obtenerlas. Los puzles est¨¢n integrados en el entorno, consistiendo en activar dispositivos, emplear artilugios o completar procesos.

Dichos puzles ofrecen una peculiar dicotom¨ªa. Por un lado, refuerzan la sensaci¨®n de abandono y tragedia del mundo, ya que resulta cre¨ªble que tengamos que resolverlos al encontrarnos en una situaci¨®n tras alg¨²n tipo de suceso repentino que caus¨® un gran pesar en este mundo. Por otra parte, resultan excesivamente farragosos y en muchas ocasi¨®n su implementaci¨®n es discutible, siendo m¨¢s una suerte de prueba y error o encontrar la perspectiva adecuada que una resoluci¨®n plenamente satisfactoria una vez damos con la soluci¨®n. El ¨¢rido control del juego no ayuda en demas¨ªa, y en general dan la sensaci¨®n de ser rompecabezas propios de otra ¨¦poca donde las posibilidades eran las que eran. Nada de mec¨¢nicas chulas y variadas, nada de puzles sorprendentes basados en conceptos interesantes. En general, lo que se trata es de entender la obtusa l¨®gica o el funcionamiento de alg¨²n tipo de artilugio extra?o para tratar de avanzar.

Lo que s¨ª que nos ha gustado es la libertad de exploraci¨®n que ofrece el juego, ya que nos permite explorar a nuestro ritmo, y podemos ir avanzando por cualquiera de los 3 reinos a nuestro ritmo. No hay un orden concreto para avanzar, si bien como ya hemos comentado para acceder a ciertas zonas ser¨¢n necesarias las nuevas habilidades a obtener para el Adjunto. Nunca estar¨¢ nada claro cual es el siguiente paso a dar ni qu¨¦ se espera que hagamos, y este tipo de desarrollo tan de la vieja escuela s¨ª que nos gusta, ya que estamos cansados de que los juegos modernos nos lleven de la mano. La aventura nos durar¨¢ entre 10 y 15 horas, dependiendo de nuestra pericia y suerte a la hora de enfrentarnos a los complejos rompecabezas que se nos presentan.

Otro de los graves problemas de Firmament es lo poco pulido que se encuentra en el momento del lanzamiento. Hemos sufrido bugs graves que nos han llevado a salir de los l¨ªmites f¨ªsicos del juego, y que nos han costado perder horas de avance. Hemos sufrido salidas repentinas al escritorio, hemos visto varias roturas del juego que provocan situaciones imposibles, e incluso hemos superado alguna secci¨®n vali¨¦ndonos de dichos errores. El juego puede ser disfrutado en pantallas convencionales y en Realidad Virtual, y aunque no hemos probado dicha versi¨®n, s¨ª se han reportado problemas importantes a la hora de disfrutar el t¨ªtulo en dispositivos de RV. En los d¨ªas previos al lanzamiento del juego se lanzaron dos pesados parches, de 12 y 6 GB respectivamente, pero todav¨ªa queda mucho por pulir desgraciadamente. El t¨ªtulo cuenta con traducci¨®n de sus textos al castellano, con una localizaci¨®n un tanto irregular en algunos t¨¦rminos.

Bello y ¨¢spero

Otra dicotom¨ªa que ofrece Firmament la encontramos en un apartado gr¨¢fico capaz de ofrecer estampas sumamente bellas en sus exuberantes parajes, pero al que a la vez se le notan much¨ªsimo las costuras y resulta muy justito t¨¦cnicamente para los tiempos que corren. Ciertas texturas y modelados son propios de otros tiempos, y en general se le nota que estamos ante un desarrollo que comenz¨® hace mucho (se esperaba el lanzamiento en 2018-2019). Cierto es que se dise?¨® con la realidad virtual en mente, y es ah¨ª donde m¨¢s lucir¨¢. Cyan son expertos en construir mundos ¨²nicos, y con Firmament no se han quedado atr¨¢s. Los tres reinos ofrecen localizaciones de naturaleza muy distinta, que nos dejan vistas de extrema belleza, salpicados de detalles que lo deslucen bastante. En cualquier caso, estamos ante un ejercicio de imaginaci¨®n excelente a la hora de recrear un mundo extra?o y misterioso.

Pese a que en los requisitos t¨¦cnicos se recomienden la barbaridad de 32 GB de RAM para ejecutarlo, Firmament corre perfectamente en equipos modestos, aunque alg¨²n peque?o ajuste necesite tambi¨¦n en el campo de la optimizaci¨®n, ya que presenta ca¨ªdas en la tasa de im¨¢genes por segundo que no vienen muy a cuento, aunque nada excesivamente grave. El apartado sonoro es bastante minimalista, con una presencia muy secundaria y que pasa casi desapercibida.