Estados Unidos saca los tanques

El Team USA tuvo que sacar los tanques a la cancha de Bercy para evitar lo que hubiera sido una mancha hist¨®rica. Una r¨¢faga final demoledora (32-15 en el ¨²ltimo cuarto) tumb¨® la resistencia heroica de Serbia, que estuvo cerqu¨ªsima de generar el mayor se¨ªsmo de los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs. Durante un buen rato, estuvo en cuesti¨®n el quinto oro consecutivo del Dream Team; el cuarto de Kevin Durant. Y, sobre todo, la hegemon¨ªa simb¨®lica del baloncesto mundial. Todo eso se ventilaba en la noche del Bercy Arena, que vivi¨® con electricidad unos ¨²ltimos minutos en los que las tres grandes leyendas, Curry, LeBron y Durant, se conjuraron para que el honor de los inventores del juego quedase a salvo. El fen¨®meno de los Warriors firm¨® 36 puntos; la leyenda de Akron, 16 puntos y 10 asistencias). Y ¡®Dur¨¢ntula¡¯ hizo la canasta que abroch¨® la final ol¨ªmpica. Este s¨¢bado, a las 21:30 horas, a Estados Unidos le espera Francia en el infierno del Bercy.

Con Nikola Jokic cocinando balones para todo el equipo en la noche de Bercy, y Bogdanovic y Avramovic como killers, Serbia se march¨® al descanso con un insospechado 37-50 que castig¨® cierta desidia estadounidense. S¨®lo Stephen Curry, 20 puntos en los dos primeros cuartos, estuvo a la altura de las circunstancias. Seguramente confiado por el pl¨¢cido paseo en la primera fase de Lille, y la nula resistencia de Brasil, el Team USA pens¨® que se colgar¨ªa el oro sin necesidad de sudar. No contaba con el orgullo serbio. Desde el presidente de su Comit¨¦ Ol¨ªmpico, Bozidar Maljkovic, hasta su entrenador, Svetislav Pesic, pasando por el presidente de su Federaci¨®n, Predrag Danilovic, son competidores feroces. Y ahora tienen un jugador genuino como Jokic, capaz de poner en jaque a un imperio del baloncesto, con todos sus generales sobre la pista. Despu¨¦s de acumular la mayor desventaja en los ¨²ltimos 20 a?os (no estaba 17 abajo desde los ominosos Juegos de Atenas), a Kerr, Spoelstra y compa?¨ªa no les quedaba m¨¢s remedio que poner firmes a sus jugadores en el vestuario.

El simple lenguaje gestual de LeBron James en las dos primeras jugadas tras el descanso fue una declaraci¨®n de intenciones sobre lo que pretend¨ªa Estados Unidos: intimidar. Jrue Holiday se puso con todo sobre Bogdanovic y pareci¨® poner las cosas en orden, otra vez con Curry al mando. Pero Serbia se mantuvo estable en su proyecto de conseguir algo hist¨®rico y se escap¨® hasta el punto de estar cerca de algo muy grande (61-76). A Estados Unidos s¨®lo le quedaba morder atr¨¢s y empezar a meter. Lo hizo. Dos triples de Durant y Booker en la misma acci¨®n dejaron el partido en un apretado 73-78 con siete minutos por jugar y Jokic instalado en las cuatro personales. Problemas para Serbia, que tir¨® tambi¨¦n de un Bogdanovic soberbio, para mantener a salvo una distancia de seguridad.

Estados Unidos sac¨®, finalmente, los tanques a pasear. Embiid ayud¨® durante un buen rato, aprovechando la amenaza de la eliminaci¨®n que limit¨® a Jokic. LeBron entr¨® como un b¨²falo en la zona serbia, la dej¨® con la izquierda y empat¨® el partido (84-84) a 3:39 del final. Una cascada de canastas imparables de los yankees llevaron el partido al 91-86. Una canasta de Kevin Durant y dos tiros libres de Curry terminaron por aliviar el trago de un equipo que, por una vez, pareci¨® humano.