Sergio Busquets ¡®despach¨®¡¯ su adi¨®s en tres minutos
Poco amante de los discursos grandilocuentes, anunci¨® su marcha al grupo en un abrir y cerrar de ojos. Ni Laporta ni Alemany estuvieron presentes.
Sergio Busquets anunci¨® su despedida este mi¨¦rcoles en el vestuario con la discreci¨®n que siempre ha hecho gala. Acompa?ado del resto de capitanes, y con Xavi Hern¨¢ndez, uno de sus mejores amigos, a su lado, el de Badia salt¨® al ruedo para confirmar su marcha. Con su escueto ¡°me voy¡± empez¨® su discurso, que apenas se alarg¨® unos minutos. Empleando un tono bajo y sin pocos artificios, el capit¨¢n desgran¨® su etapa en el FC Barcelona, agradeciendo el trabajo y la ayuda de los compa?eros y entrenadores que ha tenido. Tuvo palabras de agradecimiento a Xavi, una persona con la que ha convivido pr¨¢cticamente durante los quince a?os que ha vestido la camiseta blaugrana.
Busquets, amante de la austeridad y al¨¦rgico a los artificios, quiso anunciar su marcha acompa?ado de sus ¨ªntimos, sus amigos, los que ha compartido buenos y malos momentos durante esta temporada. No hab¨ªa ning¨²n miembro de la directiva, ni el presidente Joan Laporta ni tampoco el vicepresidente Rafa Yuste. De hecho, tampoco estaban ni el a¨²n director de f¨²tbol, Mateu Alemany, ni el secretario t¨¦cnico, Jordi Cruyff, pese a encontrarse en la Ciutat Esportiva.
Se trat¨® de un acto estrictamente privado entre miembros de la plantilla, sin injerencias exteriores de ning¨²n tipo, justamente en el ecosistema que mejor se ha movido Busquets durante su carrera, poco amante de los fastos y de las grandilocuencias.
Su intenci¨®n era comunicar su despedida con el t¨ªtulo de LaLiga ya ganado, pero la velocidad con la que se propag¨® su posible marcha, le ha obligado a avanzar unos d¨ªas el anuncio. El de Badia aprovech¨® su viaje a Marbella el pasado fin de semana, acompa?ado de Ter Stegen y Sergi Roberto, tambi¨¦n capitanes, y del t¨¦cnico Xavi Hern¨¢ndez, para avanzarles su decisi¨®n de no seguir en el club la pr¨®xima temporada. Una decisi¨®n que fue aceptada por todos, aunque dej¨® un poso de resignaci¨®n a su ¡®amigo¡¯ Xavi, que hasta el ¨²ltimo instante ten¨ªa la esperanza de poder convencer al centrocampista.
