Espanyol, Bar?a, Espa?a y Catalu?a: la construcci車n de los ※mitos§
Historylab RCDE organiz車 el s芍bado unas jornadas fruto de sus estudios para explicar el origen de la identidad del Espanyol. ※Se utiliza al Espanyol como ant赤tesis del relato del Bar?a§.
En medio del bullicio de Barcelona y del calor de un s芍bado t車rrido, un rinc車n de Sants viaj車 al pasado, al convulso principio del siglo XX donde nacieron los primeros clubes de f迆tbol y se construyeron sus identidades. Una retrospecci車n interesante y necesaria sobre la imagen del Espanyol en Catalu?a, ※los mitos y las realidades§ forjadas a base de hechos, de silencios y de influencias, unas etiquetas que se colocaron en un mundo que funcionaba (y funciona) a trav谷s de la ※ant赤tesis§. La iniciativa de Historylab RCDE congreg車 a medio centenar de curiosos que pudieron disfrutar de tres charlas iluminadoras.
Fundado por universitarios catalanes en 1900, con ?ngel Rodr赤guez a la cabeza, lo primero que define al Espanyol (Espa?ol en sus inicios) es el nombre. Para David Gonz芍lez, historiador e impulsor de unas jornadas que contaron con el apoyo de la Fundaci車 Privada del Espanyol y de la Federaci車 Catalana de Penyes, la catalanidad de entonces no era la de ahora. ※Ese nombre era una reivindicaci車n local porque la mayor赤a de equipos eran extranjeros. Quiz芍s se lo pusieron por pragmatismo. El catalanismo regeneracionista de aquella 谷poca contaba con Espa?a; quer赤a liderarla, no excluirla§.
Un manifiesto reivindicativo y el inicio de la ※anticatalanidad§
El punto de inflexi車n ocurri車 entre diciembre de 1918 y enero de 1919, cuando Catalu?a propuso tener un Estatuto de Autonom赤a y el FC Barcelona, el otro gran club de la ciudad y con quien el Espanyol ya pugnaba deportivamente, se posicion車 a favor. ※Solo hubo tres entidades deportivas que lo apoyaron p迆blicamente. El 99% se abstuvieron, entre ellas el Espanyol§, resalta Gonz芍lez. Es ah赤 cuando el periodista Daniel Carb車 Santaeul角ria, conocido con el pseud車nimo de &Correcuita*, se?al車 en &La Veu de Catalunya* al Espanyol como club ※anticatal芍n§, lo que provoc車 una reacci車n de 124 (o 125, ya que ※hay un nombre que podr赤a estar repetido§) socios del Espanyol, que elaboran un manifiesto.
Entre los firmantes hab赤a de todo, desde jugadores como Pere Gibert a ex presidentes como Josep Bernades. El comunicado apareci車 赤ntegro en &Mundo Deportivo* pero solo se le atribuy車 a los primeros tres y reivindicaba la catalanidad de la entidad blanquiazul, como desgran車 Javier Robles, quien hizo una exhaustiva investigaci車n para averiguar las identidades de todos los firmantes como se aprecia en el documento adjunto e in谷dito en esta informaci車n. ※Tanto en el Barcelona como en el Espanyol hab赤a personalidades de todo tipo de ideolog赤as§, se explica en las jornadas.
La huella borrosa de la Pe?a Deportiva Ib谷rica
Con esa idea creada en la prensa de la 谷poca, en 1972 el escritor Joan Josep Artells explic車 en su famoso libro &Bar?a, Bar?a, Bar?a* al Espanyol con un pensamiento de derechas y anticatal芍n, ant赤tesis del club azulgrana, lo que se repite en la gran mayor赤a de obras historiogr芍ficas sobre el FC Barcelona, las cuales tienen en la obra de Artells un titulo de referencia. ※Coinciden en utilizar al Espanyol como ant赤tesis al relato del Barcelona§, a?ade Gonz芍lez, quien subraya ※una deficiencia en las fuentes de esos autores§ y que su interpretaci車n ※se acerca m芍s al mito que a la realidad§.
Todav赤a sin movernos de los a?os 20 de hace un siglo, hubo otro hecho que propici車 que se siguiera relacionando al Espanyol con la anticatalanidad. Jos谷 Fernando Mota, historiador, ha investigado sobre la Pe?a Deportiva Ib谷rica, considerada la primera agrupaci車n perica, que destacaba por su origen carlista y su praxis violenta, encabezada por Francisco Palau.
Provenientes todos de movimientos pr車ximos al posterior fascismo (sus declaraciones y escritos de la 谷poca causaron risas hilarantes mitigados por el paso del tiempo entre los asistentes a las jornadas), encontraron en el deporte la manera de hacerse notar y crearon la pe?a que sigui車 al Espanyol, por ejemplo, a la final de Copa de Valencia, de 1929, y que era asidua a Sarri角. ※Una semilla de lo que fueron luego los grupos ultras de los 80∪, puntualiza.
Aunque hay actos de la pe?a hasta 1950, su vida vinculada al Espanyol se concentr車 en los a?os 20 y 30, donde adem芍s crearon dos publicaciones en las que aportaron su mirada pol赤tica y su pasi車n por el equipo perico con pseud車nimos como Fustiga, Camorra o Tentetieso. La pe?a lleg車 a tener m芍s de 80 miembros, siempre presentes en actos violentos en la ciudad, y en la prensa de la 谷poca se destacaba su actitud desafiante en la grada alta de Sarri角. La revista sat赤rica Papitu, defini車 con su humor lo que ya se estaba generando en el ideario colectivo: ※Bar?a, viva Catalunya; Espa?ol, viva Espa?a§. Una asociaci車n que ha cuajado y que conecta con el inicio de las jornadas y la reflexi車n de Xavier Gibert: ※Hay mucho mito. Nos ha costado tener reputaci車n en Catalu?a y ha habido mala intenci車n para posicionarnos§.