Aprobados y suspensos del Real Madrid contra el C¨¢diz: alir¨®n del ¡®chef¡¯ Brahim
Gol y asistencia del malague?o para cocinar el alir¨®n. Courtois volvi¨® con acierto, Bellingham cerr¨® el partido con un tanto reconstituyente y Nacho regal¨® una cabalgada imperial.
Alir¨®n cocinado. El chef, Brahim. Un gol ¡®a lo Leipzig¡¯ y una asistencia a su ¡®bro¡¯ Bellingham. Trabajo hecho y sellado con el pinchazo del Bar?a. La guinda la puso una cabalgada imperial de Nacho que regal¨® el fin de fiesta a Joselu. Y antes, viaje al pasado. Con el duelo empatado, milagro de Courtois ante Chris Ramos. 335 d¨ªas despu¨¦s, nada ha cambiado con el muro de Bree. Todo buenas nuevas para Ancelotti, que mira a M¨²nich con la 36 en el bolsillo.
Courtois: y al fin, Courtois. 335 d¨ªas despu¨¦s de su ¨²ltimo partido oficial, la porter¨ªa blanca volvi¨® a hablar franc¨¦s. Ya lo hab¨ªa avisado Ancelotti y Tibu complet¨® su primer partido del a?o. A tiempo para mirar hacia Wembley. Porque el mi¨¦rcoles jugar¨¢ Lunin. Hasta ah¨ª quiso leer Carletto. El estado de forma del muro de Bree apenas pudo ser testeado en la primera parte. Sin intervenciones, ni de m¨¦rito ni pr¨¢cticamente de ning¨²n cariz en la primera parte, en la segunda demostr¨® que el oficio no se olvida: evit¨® en un mano a mano con Chris Ramos el 0-1. La primera piedra del alir¨®n.
Carvajal: rodaje para el leganense. No estuvo en M¨²nich por sanci¨®n, pero estar¨¢ este mi¨¦rcoles. No estuvo excesivamente exigido en defensa y su mapa de calor gan¨® intensidad en campo contrario. Con un G¨¹ler abandonando el perfil derecho para mediapuntear, Carva fue m¨¢s extremo que lateral. Aunque sin tener la incidencia habitual.
Militao: Ancelotti barrunta si colocarle en el once en Champions y sigue su puesta a punto. El brasile?o est¨¢ con confianza, valiente y aprovech¨® el planteamiento expectante del C¨¢diz para pisar campo contrario. Se atrevi¨® incluso con un chutazo que oblig¨® a volar a Conan y en el tramo final amenaz¨® con un testarazo. Sin embargo, cuando hubo de recuperar sufri¨® m¨¢s que su versi¨®n prime. Sobrino le super¨® en un cuerpeo donde le falt¨® potencia en el primer tiempo y en el segundo perdi¨® la posici¨®n en un contragolpe de Chris Ramos que pudo costar un disgusto. La lesi¨®n es historia, ahora necesita ritmo.
Nacho: una titularidad que pod¨ªa intuirse como ¡®condena¡¯ (Tchouameni como central es una opci¨®n seria)... y que termina en reivindicaci¨®n. Porque el capit¨¢n demostr¨® que est¨¢ a un nivel m¨¢s que ¨®ptimo. Los titubeos de un tramo de la temporada est¨¢n enterrados y sigue aprobando ex¨¢menes para ser titular el mi¨¦rcoles. En la primera parte corrigi¨® un error de Militao y opac¨® un ataque peligros¨ªsimo de Sobrino que ol¨ªa a gol. Encuentro sobrio y m¨¢s que notable del alcala¨ªno, sellado con una cabalgada imperial para asistir a Joselu.
Fran Garc¨ªa: los d¨ªas grandes est¨¢n siendo de otros, pero Fran acumula 16 titularidades. En encuentros como el del C¨¢diz, adem¨¢s, disfruta. Sin demasiado estr¨¦s en campo propio, vivi¨® en territorio hostil. Muy participativo y preciso en el pase, Fran est¨¢ aprovechando el tramo final de Liga para sacar pecho. Su centro de volea a Joselu pudo convertirse en un gol de museo. En defensa no es Mendy, pero en ataque tampoco.
Modric: un lujo. No puede entenderse de otra manera tener a Luka Modric como complemento. Cuando el equipo se asent¨®, el genio de Zadar empez¨® a aportar dinamismo al juego. M¨¢s de 90 env¨ªos acertados, con un 97% de acierto. M¨¢s de un centenar de apariciones, muchas de ellas con colmillo (cuatro pases decisivos). A Ancelotti le duele dejarle en el banco en las noches de tron¨ªo y actuaciones as¨ª lo atestiguan. Aunque salga desde el banquillo, su nivel actual puede ser diferencial ante el Bayern.
Camavinga (80¡ä): a priori, su posici¨®n favorita. Como pivote, el zurdo de Cabinda comenz¨® pel¨ªn precipitado. Tuvo alg¨²n error en el pase y fallo en la colocaci¨®n. No obstante, se repuso. Y de qu¨¦ manera. Camavinga se adue?¨® de la sala de m¨¢quinas, con mucha presencia tanto en construcci¨®n como en la escasa destrucci¨®n que hubo de afrontar. En los duelos fue una roca y apareci¨® incluso en campo rival para buscar el tanto desde la distancia.
Ceballos: cada minuto es oro para el utrerano. Y los aprovech¨®. Desde el pitido inicial mostr¨® su cara m¨¢s reactiva. Siempre voluntarioso, Ceballos estuvo adem¨¢s preciso en el reparto de juego, firmando cifras muy similares en participaci¨®n y pases que Modric. Tras una temporada donde no ha tenido incidencia, estos duelos finales son un oasis en el que Ceballos debe ba?arse. Ya sea para ganar preponderancia en curso pr¨®ximo o conquistar el mejor destino posible en el mercado (el Milan le quiere). Este es el camino.
G¨¹ler (66¡ä): las primeras veces siempre se recuerdan. El estreno de Arda como titular en el Bernab¨¦u tambi¨¦n. Lo har¨¢ el de Altindag y los aficionados de la grada, que le dedicaron varios ¡®oh¡¯ a acciones de post¨ªn. Alg¨²n eslalon, una croqueta para desactivar la presi¨®n cadista, un tac¨®n a su maestro Modric en la frontal... Y personalidad al pedir, y acariciar el gol, con una falta directa en la frontal. El turco es una exprimidora de minutos y un generador de hype.
Joselu: quiz¨¢ el futbolista que menos luci¨® en el Bernab¨¦u. Hasta que lo hizo. Su presencia obliga a los centrales a estar fijos y ello permite que futbolistas como Arda y Brahim disfruten con m¨¢s huecos, aunque ello penalice su propio brillo. Tras un centro estupendo de Fran, el ariete no lleg¨® por cent¨ªmetros, pero se regal¨® el 3-0 rematando una obra de arte de Nacho.
Brahim (73¡ä): bienvenidos al plan B. Con B de Brahim. Sin Vinicius, Bellingham y Rodrygo, el malague?o alza la voz. En la primera parte bail¨® a la zaga y regate¨® por todo el frente de ataque. Actuaci¨®n a la que puso una guinda que se celebr¨® como alir¨®n. Por el contexto y por el c¨®mo. Control con la izquierda, zapatazo ¡®a lo Leipzig¡¯ con la derecha. Conan s¨®lo pudo mirar c¨®mo el esf¨¦rico limpiaba su escuadra. El d¨¦cimo del cuso. Nueve de ellos al salir de inicio, demostrando que le sienta bien el traje de titular. Y complet¨® su fiesta con la asistencia a Bellingham para abrochar el duelo. La sexta en una temporada llena de reivindicaci¨®n y confirmaci¨®n.
Tambi¨¦n jugaron
Bellingham (66¡ä): su partido ante el C¨¢diz fue su temporada. Llegar, ver y vencer. Apenas se hab¨ªa agujereado las medias y saltado al campo cuando ya hab¨ªa celebrado el 2-0. Brahim, con el que se entiende a las mil maravillas, le encontr¨® en el ¨¢rea y remat¨® con su ¡®alma de 9¡ä. El virus le lastr¨® y llega a M¨²nich con la confianza al alza... y de nuevo en lucha por el pichichi (lleva 18 tantos, a uno de Dovbyk). Otro abrazo de gol en el d¨ªa del potencial alir¨®n.
Vinicius (73¡ä): descanso sin perder ritmo. Era el plan de Carletto que aplic¨® a la perfecci¨®n con Vini. Con el C¨¢diz entregado, aprovech¨® sus minutos para regalar un centro de rabona que casi enjaula Carvajal y acariciar el gol propio.
Valverde (80¡ä): entrada anecd¨®tica bajo la misma premisa que la de Vinicius. Sin incidencia, pero para que las piernas no se relajen de cara al mi¨¦rcoles.
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