Era el personaje estelar de todo inicio de pretemporada blanca: la figura enjuta pero fibros¨ªsima de Antonio Pintus. Con una gorra o luciendo su caracter¨ªstica calva, el italiano era el que met¨ªa la primera marcha al Real Madrid cada verano. Pero ya no. El gur¨² de la preparaci¨®n f¨ªsica con Zidane y en la segunda etapa de Ancelotti se ha ca¨ªdo de la foto con la llegada de Xabi Alonso. El primer entrenamiento en Palm Beach dej¨® una postal elocuente: el tolosarra controlando la sesi¨®n del equipo muy de cerca junto a su mano derecha tra¨ªda del Leverkusen para esta materia, Ismael Camenforte, y a 40 metros de distancia, Pintus. A la puerta del gimnasio, sin intervenir. Casi como si estuviera en el banquillo...

El club sigue d¨¢ndole vueltas a c¨®mo resolver la situaci¨®n de Pintus. Un profesional muy valorado por las m¨¢s altas instancias de la entidad, que han lucido durante mucho tiempo al sargento de hierro (el apodo cari?oso del italiano en el vestuario) como un activo muy valioso. Que sobrev¨ªv¨ªa a maremotos en el banquillo. Y con un contrato top que a¨²n mantiene, en parte justificado porque bajo su responsabilidad estableci¨® la metodolog¨ªa tambi¨¦n para el resto de equipos de Valdebebas. Y ha sido un a?o t¨¦trico. Ra¨²l lleg¨® a acumular once lesionados en el Castilla al mismo tiempo y La F¨¢brica se uni¨® al terror¨ªfico serial de roturas de cruzado. Le ocurri¨® a Joan Mart¨ªnez y a C¨¦sar Palacios, ambos bajo el cuidado de Pintus cuando sufrieron el grave percance la pasada pretemporada.

Pintus ahora ostenta a efectos oficiales un t¨ªtulo llamativo (Performance Manager) pero por ahora se mantiene en una labor secundaria, presente en las sesiones de gimnasio, pero la central de datos ir¨¢ a las manos de Camenforte. Fue una petici¨®n expresa de Xabi, como las de Sebas Parrilla (su inseparable segundo), Alberto Encinas y Be?at Labaiena (analistas). S¨®lo mantiene a Luis Llopis, a cargo de los porteros, una instituci¨®n en Valdebebas y al que conoci¨® en San Sebasti¨¢n.

Una diferencia generacional

Apenas son los primeros pasos, pero el enfoque, seg¨²n se dice internamente, var¨ªa. Como pasaba entre Ancelotti y Xabi, son generaciones muy distintas. Pintus (62 a?os) apostaba por palizas f¨ªsicas de inicio y grupales mientras que la idea de Camenforte (40) es m¨¢s individualizada. Aunque este verano le supone un reto, le toca intervenir con retoques sobre la preparaci¨®n ya lanzada por Pintus que inclu¨ªa este Mundial de Clubes en un curso planeado para durar once meses. No hay tiempo material para revoluciones (por ahora).

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