La de Antonio Percassi es una de esas historias que responden tan bien a esas frases hechas de "lucha por tus sue?os" o "no hay nada imposible" de las tazas de h¨ªpsteres. Con 23 a?os renunci¨® a lo que cualquier ni?o querr¨ªa, ser futbolista profesional, para hacerse empresario. ?l no empez¨® en un garaje, sino en los duros tiempos de posguerra italianos. Desde que lleg¨® al mundo hasta este 2020 han pasado 67 a?os y ahora es uno de los hombres m¨¢s ricos del planeta. Se retir¨®, se hizo rico y compr¨® el club de sus amores para ser su presidente.

Ha cambiado su vida, pero tambi¨¦n la del Atalanta. Ahora es uno de los clubes de moda de Europa, de los que todos identifican su estilo de juego y al que la mayor¨ªa de los aficionados neutrales apoyar¨¢n ante el PSG en los octavos de final de la Champions League el pr¨®ximo d¨ªa 12. Un club interesante y divertido, de los que necesitaba para refrescarse la ¨¦lite europea. Antonio Percassi es su creador y esta su historia.

Las madres siempre quieren que sus hijos jueguen al f¨²tbol pero que no dejen de lado los estudios. Que se formen de cara al mundo laboral en el caso de que no sean tan buenos con los pies como se piensan. No era el caso de Antonio Percassi, que dej¨® el f¨²tbol profesional despu¨¦s de jugar m¨¢s de cien partidos para hacerse rico.

Naci¨® en Clusone, una peque?a localidad que no alcanzaba los siete mil habitantes en Lombardia, en tiempos de posguerra. De origen humilde, ahora a sus 67 a?os aparece en el puesto 1990 de millonarios de 2020 de Forbes con una fortuna de 1.100.000.000$. Una historia real, la del emprendedor que comienza con una peque?a empresa y acaba olvidando los ceros que tiene en el banco que no se ha cansado de vender la mentalidad estadounidense.

Su punto de partida fue la colaboraci¨®n con su compatriota Luciano Benetto, antes de que el apellido de este se expandiese por todo el mundo. Ahora no aparece en la web de Percassi como uno de sus colaboradores, y tampoco Inditex, pero la de Amancio Ortega fue otra de sus grandes amistades. Detr¨¢s del Duomo de Mil¨¢n, en una de las calles m¨¢s emblem¨¢ticas de la ciudad de la moda italiana, impuls¨® tiendas de Zara, Zara Home, Massimo Dutti, Oysho, Pull and Bear, Bershka y Stradivarius. Nike, Kiko Milano o Benneton tambi¨¦n se encuentran en el Corso Vittorio Emanuele II. Tambi¨¦n ha trabajado con marcas de la talla de Ralph Lauren, Tommy Hilfiger, Ferrari, Philipp Plein¡­

Percassi presume de tener oficinas en todo el mundo. Adem¨¢s de la sede de B¨¦rgamo, cuenta con instalaciones en Mil¨¢n, Par¨ªs, Londres, Berl¨ªn, Madrid, Lisboa, St. Moritz, Z¨²rich, Varsovia, Nueva York, Shangh¨¢i, Hong Kong, Nueva Dehli, Estambul, Mosc¨² o Dubai que dan empleo a m¨¢s de nueve mil personas. En 2016 super¨® el millar de tiendas abiertas por ellos. Ahora tiene hasta un pueblo, Crespi d'Adda, un municipio considerado en 1995 patrimonio de la humanidad por la UNESCO para instalar all¨ª la sede de su imperio.

Divorciado, tiene seis hijos y cinco de ellos est¨¢n colocados en la empresa. Stefano se encarga de las marcas cosm¨¦ticas, Matteo las de moda y restauraci¨®n, Giuliana ayuda a Matteo con la restauraci¨®n, Federica de las relaciones p¨²blicas de las firmas cosm¨¦ticas y Luca la constructora. Este ¨²ltimo, CEO del club, hizo la misma carrera que el padre. Lleg¨® a debutar en el Chelsea de Zola, pero se retir¨® tambi¨¦n a los 23. Michael, de siete a?os, todav¨ªa espera su momento.

"El f¨²tbol me encanta y era feliz. Lo que sucedi¨® es que ten¨ªa otras prioridades. Ganar dinero. Quer¨ªa ser rico". Lo ten¨ªa claro con 23 a?os, cuando dej¨® su amado f¨²tbol, el que estaba sacando a su familia de los problemas econ¨®micos desde que debutase con 17 a?os. Tambi¨¦n es cierto que su carrera estaba lejos de tener los ¨¦xitos de la de Scirea, compa?ero suyo en las inferiores del Atalanta. Cuando lo dej¨®, no era protagonista ni en el Atalanta ni en el Cesena, a donde le mandaron su ¨²ltimo a?o.

En 1990 ya tuvo una peque?a etapa como presidente, cuando el club era propiedad de la familia Bortolotti. Cesare administr¨® el equipo despu¨¦s de su padre Achille, quien fuera presidente durante la etapa de jugador de Percassi. Lamentablemente, falleci¨® en un accidente de tr¨¢fico y Antonio se vio con la responsabilidad de coger las riendas del club hasta 1994.

En 2010 lleg¨® al club de forma m¨¢s serie y, desde entonces, es su presidente. El primer a?o, en Serie B, ascendieron a Primera y no decepcion¨® como exc¨¦ntrico millonario. En la fiesta que organiza la afici¨®n para dar inicio a la temporada cada verano apareci¨® ¨¦l montado en un caza MiG-21, una aeronave de combate sovi¨¦tica. El lema de la fiesta era "bombardeemos la Serie A". Lo acompa?aron algo parecido a un par de soldados del ej¨¦rcito imperial brillantes. Otro a?o lleg¨® en un globo gigante y en 2013 us¨® un tanque estadounidense de la II Guerra Mundial que entr¨® por encima de dos coches pintados con los colores de la Roma y el Brescia. "Era solo una broma, no quer¨ªamos meter a nadie en problemas". Despu¨¦s del carro de combate, apareci¨® una cosechadora para destruir una pila de peri¨®dicos.

Institucionalmente ha dotado de estabilidad a una afici¨®n que se acostumbr¨® a ser un club ascensor en la d¨¦cada de los 2000 y deportivamente dio en el clavo con Gian Piero Gasperini. El t¨¦cnico italiano lleg¨® en 2016 y perdi¨® cuatro de sus cinco primeros partidos en liga. Sin embargo, su equipo empez¨® a funcionar y termin¨® aquella temporada cuarto y, as¨ª, clasificarse para Europa veintis¨¦is a?os despu¨¦s. En 2019 no era la Europa League, sino la Champions League, y el premio a entrenador del a?o (Panchina d'Oro) elegido por sus propios compa?eros de banquillo.

Ya nadie puede dudar de un equipo que elimin¨® por un global de 8-4 al Valencia en octavos de final de la Champions. Adem¨¢s, sus partidos son divertid¨ªsimos por el ida y vuelta en el que convierten sus encuentros de principio a fin. Con 98 goles, es el equipo m¨¢s goleador de las cinco grandes ligas solo por detr¨¢s de Manchester City (102) y Bayern M¨²nich (100). El d¨ªa 12 les espera el PSG, realmente algo impensable cuando Percassi cogi¨® el club en Serie B hace diez a?os.

Percassi se ha aprovechado de la globalizaci¨®n como nadie, pero nunca ha descuidado su ciudad. La sede de su imperio est¨¢ en B¨¦rgamo, no quiso jugar fuera del Atalanta hasta que no le qued¨® otra opci¨®n y, cuando pudo, no olvid¨® sus ra¨ªces y se hizo cargo del club. Como todos los clubes que se encuentran cerca de un transatl¨¢ntico, en el Atalanta odiaban que sus mejores jugadores fuesen a parar a los grandes equipos. "En mi ¨¦poca controlaban los pueblos de sus zonas y los mejores se iban a la Juve o a los clubes de Mil¨¢n", recordaba hace a?os Antonio, lamentando, entre otros, la marcha a Tur¨ªn del mencionado Scirea.

"El club no puede romper su v¨ªnculo con los hinchas y, si quiere competir, necesita tener jugadores de la casa". Por ello, y aunque el poder de atracci¨®n del club es el que es, la idea es aguantar a los canteranos lo m¨¢ximo posible y dejar de ser un club vendedor. Evidentemente, que Mil¨¢n, Roma, N¨¢poles y Tur¨ªn se fijen en los futbolistas de B¨¦rgamo es un indicativo de que est¨¢n haciendo las cosas muy bien en la secretar¨ªa t¨¦cnica del club, pero a largo plazo es dif¨ªcil ver un equipo ganador si cada verano se llevan a tus mejores jugadores.

Percassi insiste en la idea de la cantera y le da much¨ªsimo valor a la ciudad deportiva, el Centro Bortolotti que no ha dejado de crecer. Las instalaciones son espectaculares, con 120.000 metros cuadrados de campos de juego e instalaciones. Un espacio moderno en el que no deja de invertir la direcci¨®n del club. Y la cantera de la Dea ya da sus frutos por s¨ª misma. La temporada pasada ganaron la liga de filiales, un t¨ªtulo que amenazaban con repetir (iban l¨ªderes) este a?o antes de suspenderse la liga por el coronavirus.

Pero la joya de la corona de las instalaciones es, como no pod¨ªa ser de otra manera, el estadio. Ha recibido numerosos nombres y ahora mismo toma el apellido de la empresa el¨¦ctrica Gewiss. En 2015 se lleva a cabo una importante modernizaci¨®n del estadio, as¨ª como en 2019 y 2020. Pero m¨¢s all¨¢ de las instalaciones que, poco a poco, ir¨¢n mejorando, lo que llama la atenci¨®n es que en 2017 el club compr¨® el estadio. Por algo m¨¢s de 8 millones de euros, el Percassi se hizo con el estadio municipal, siendo de los pocos equipos italianos con un estadio en propiedad. Una m¨¢s que evidente declaraci¨®n de intenciones de que el Atalanta quiere ser grande.