Barcelona, un im¨¢n para las apasionadas del skate
El buen tiempo, la archiconocida arquitectura que parece pensada para el skate y su gente son algunas de las razones que atraen a chicas de todo el mundo.


Barcelona es una de esas ciudades que cualquier amante del skate tiene en su lista de viajes pendientes (o realizados). De hecho, incluso, su arquitectura o su clima -entre otras cosas- han provocado m¨¢s de una mudanza entre skaters. Seguramente por eso no es la primera vez que se habla de qu¨¦ tiene de especial la capital catalana para que gente de tan heterog¨¦neo origen acabe aqu¨ª. Pero s¨ª es una de las primeras en las que quienes hablan son ellas, una porci¨®n cada vez m¨¢s grande de las personas que viven la vida con un pat¨ªn bajo el brazo.
Leticia Nogueira - Aveiro, Portugal
En un piso compartido en el Born, al lado de un spot cl¨¢sico como el de Arco de Triunfo, vive Leti Nogueira (21 de julio de 1992, Aveiro). Le encanta patinar all¨ª, aunque todos saben que Spotter tiene un lugar preferente en su coraz¨®n. Sus primeros pasos en el pat¨ªn fueron con 14 a?os y de la mano del punk rock, un estilo musical muy conectado al skateboarding. De hecho, la primera vez que viaj¨® a Barcelona fue sin el pat¨ªn, por el Festival de Psychobilly de Pineda de Mar. Aquella vez se prometi¨® volver (con el skate, claro).
Cumpli¨®. Volvi¨® para las pr¨¢cticas del Master en Idiomas y Relaciones empresariales. "Comparada con cualquier otra ciudad, Barcelona ten¨ªa las pr¨¢cticas perfectas para m¨ª: ten¨ªa buen tiempo y skate. Los amigos todav¨ªa no, pero era una ciudad de skate... y donde hay skate, hay amigos". Una buena prueba es que su primera granamiga fue Mel: "Aparec¨ª en su piso, donde viv¨ªa una amiga de unos amigos, pas¨¦ el primer d¨ªa con ella y acab¨¦ qued¨¢ndome all¨ª. Ya no vivo con ella, pero seremos amigas para siempre".
Se iba a quedar seis meses... y ya han pasado seis a?os, tras los cuales la skater de origen portugu¨¦s afirma que "aunque la belleza del skate es que te arreglas con lo que tienes, la verdad es que en Barcelona tienes mucho, es un para¨ªso". Para¨ªso del skate y de las personas: "Venimos de todos lados, nos juntamos aqu¨ª y compartimos nuestros mundos, por eso Barcelona es tan especial". Tan especial que, a pesar de reconocer que est¨¢ inmersa en un cambio constante, "hoy en d¨ªa no tengo quejas, amo a Barcelona con todas sus fallas, es mi ciudad, la que me recibe cuando no tengo a donde irme, rom¨¢ntica, cruda, c¨®moda e imprevisible a la vez, la que me deja vivir en mi mundo de romance, aventura y libertad y me da la mejor vida que podr¨ªa pedir".

Tania Cruz - La Rioja, Argentina
Tania Cruz (26 de junio de 1997, La Rioja) empez¨® a patinar a una edad parecida, cuando ten¨ªa 15 a?os, porque a su hermana peque?a le regalaron una tabla de skate. A veces se lo dejaba y otras no, as¨ª que se puso a ahorrar para conseguir uno propio y desde entonces le cambi¨® la vida. Pero m¨¢s le cambi¨® todav¨ªa cuando en julio del 2019 decidi¨® dejar atr¨¢s a su tierra, su familia y sus amigos para venir a Barcelona. "No fue f¨¢cil, pero hoy en d¨ªa es un sue?o vivir aqu¨ª y a veces me cuesta creer que lo haya conseguido", explica.
Desde un piso en el centro de Barcelona, cerca de la estaci¨®n de Liceu (donde comparte piso con un Juan Ezequiel, tatuador argentino y Pauli, su hermana), se desplaza a muchos spots a golpe de pat¨ªn. Su preferido es la skateplaza del Born, que combina los elementos m¨¢s famosos de las calles de la ciudad en un mismo lugar: "El dise?o de las calles parece hecho a prop¨®sito por un arquitecto skater", afirma. Y cuando se cansa, explica que lo que m¨¢s le gusta es que "puedes tomar un tren y a media hora tienes paisajes tan diferentes como preciosos".
En la l¨ªnea de sus compa?eras, Cruz corrobora que otra clave de Barcelona es que es una ciudad skater y el skate te cruza con muchas personas en el camino. "Cuando buscaba alquiler en la ciudad, una amiga me ofreci¨® casa mientras ella estaba de vacaciones. Me recibieron sus amigos. Uno de ellos estaba preocupado y triste porque hab¨ªa perdido un vuelo a Berl¨ªn y la maleta con su skate. Nos fuimos a los bunkers del Carmelo y nos quedamos hasta el amanecer, charlando y alucinando por estar en Barcelona".

Daniela Molina - Caracas, Venezuela
Daniela Molina (12 de junio de 1991, Caracas) es la tercera de cuatro hermanas que crecieron en la capital de Venezuela. El skate era el refugio al que acud¨ªa para huir de los problemas en la escuela y en su pa¨ªs. Tras un viaje a Madrid pas¨® por Barcelona y se enamor¨®. En la actualidad vive en el Poble Sec, donde comparte piso con Raisa Abal, fot¨®grafa de la revista Dolores y de este reportaje. Trabaja de monitora en una escuela, de camarera en el bar cultural de La Iguana y patina. Mucho.
"Barcelona es el sue?o de cualquier skater", afirma tajantemente Molina, quien a?ade que "desde el segundo uno sobre el pat¨ªn ya tienes donde patinar, miles de spots y cada vez m¨¢s skateparks". En uno de ellos vivi¨® su primera historia de amor con la Ciudad Condal: "La primera vez que vine estuve patinando en Mar Bella con poca gente porque eran las fiestas locales... y en un momento dado empezaron los fuegos artificiales. Fue un momento ¨²nico".
Si tuviera que criticar algo, la skater de origen venezolano se decantar¨ªa por el cambio de actitud que ha visto en muchos ni?os que patinan: "Veo a demasiada gente queriendo ser los mejores, destacar como sea, conseguir seguidores... y esa no es la base del skateboarding". La base del skateboarding es precisamente la integraci¨®n. Hacer amigos es muy f¨¢cil. Y es por ello que Molina asegura que Barcelona tiene ¨¦xito en el mundo del pat¨ªn: "Vivir aqu¨ª es diferente por su cultura, su idioma, su historia, su arquitectura... siempre me he sentido integrada y parte de la sociedad".

Raisa Abal - Pontevendra, Espa?a
Los amigos de Raisa Abal (20 de febrero de 1991, Pontevedra) siempre patinaron, pero no fue hasta que hizo un curso de la universidad en Burdeos que empez¨® a patinar todos los d¨ªas. Con un cruiser de ruedas grandes. Luego pas¨® por Madrid y, al terminar el Master, cuando las cosas no le iban como quer¨ªa, el destino la llev¨® a encontrarse un sobre con dinero tirado en una alameda (a las dos de la tarde y a 40?C) que le permiti¨® mudarse. Eligi¨® Barcelona, donde ten¨ªa muchos amigos de Galicia.
Desde el piso que comparte con Daniela afirma tambi¨¦n que el factor clave de Barcelona "es la archiconocida arquitectura 200% patinable", as¨ª como "el buen clima, aunque eso atrae a todo el mundo, no solo a skaters". Y por desgracia, reconoce que le preocupan "la suciedad y la inseguridad", as¨ª como que la ciudad ha cambiado: "La polic¨ªa ya no da tanto margen, antes pod¨ªas estar patinando hasta las 12 en verano y molaba mucho, pero se pusieron muy estrictos, supongo que hac¨ªamos un jaleo horrible...".
Pero como no pod¨ªa ser de otra manera, se queda con las buenas historias. Desde su primera visita en noviembre del 2013 a casa de Adri Villar, en la que alucin¨® al ver patinando juntos a Gus, Su¨¢rez, Migue y Adri (lleg¨® a pensar "de d¨®nde han salido estos cuatro enfermos del skate"); hasta esa vez que se colaron en las piscinas de Montju?c de madrugada y acabaron huyendo, semidesnudos y mojados, como si fuera una competici¨®n de downhill; pasando por este ¨²ltimo a?o, en el que ha descubierto un poco m¨¢s Catalunya "y eso me hace muy feliz".

Cristina S¨¢nchez - Badalona/Barcelona, Espa?a
Los padres de Cristina S¨¢nchez (7 de julio de 1990, Badalona), gallega y salmantino, se conocieron en Barcelona, donde se instalaron y dieron a luz a sus dos hijos. Su historia con el pat¨ªn no empezar¨ªa hasta 2010, cuando empez¨® con el longboard downhill. Y no ser¨ªa hasta 2015 cuando le regalaron su primera tabla de skate, la cual ya no ha dejado jam¨¢s. Hoy en d¨ªa ejerce de enfermera y vive en un barrio tranquilo en esta Meca del skate con un compa?ero de piso, Marcel; y su perrita Nay.
Cristina, cuya carrera en el pat¨ªn se ha desarrollado en la ciudad, tiene claro que "las calles de Barcelona son f¨¢ciles de patinar para ir de un spot a otro y cada poco encuentras uno de nuevo. Si a ello le sumas el clima, la gente, la cultura del skate... se convierte en una ciudad ¨²nica". M¨¢s all¨¢ del skate, asegura que "en Barna nunca te aburres". Y a nivel personal confiesa: "Que tenga mar es imprescindible para m¨ª".
Si le preguntas por lo mejor de la ciudad, responde sin pensar que aqu¨ª "he conocido a gente maravillosa". Si le haces elegir un spot, reconoce que "le tengo un cari?o especial a la Mar Bella, que fue donde empec¨¦ a patinar, pero hay muchos m¨¢s skateparks y spots que engorilan como el DIY Spotter o Carib¨²". Mientras como punto a mejorar menciona que "hay muchos ladrones que aprovechan que est¨¢s patinando para robar, es bastante triste pero no puedes estar tranquila si no controlas tus pertenencias constantemente".

Cinco historias distintas con dos nexos de uni¨®n: Barcelona y el skate. Dos nexos de uni¨®n que se pueden encontrar a menudo en la revista Dolores Magazine, en el colectivo Asiplanchaba o en cualquier spot de la ciudad como Mar Bella o el Macba, entre muchos otros. ?Y que no pare!