Towns, marcado en los Knicks
Cr¨ªticas internas a la labor en New York Knicks de Karl-Anthony Towns, el ¨²ltimo titular en llegar, despu¨¦s de la eliminaci¨®n a manos de los Pacers un a?o m¨¢s.


Con la eliminaci¨®n de los Knicks, por segundo a?o consecutivo a manos de los Pacers, llegan los primeros ajustes de cuentas. La franquicia est¨¢ en la senda correcta, con un grupo repleto de calidad y que est¨¢ emocionando hasta a los aficionados m¨¢s viejos del lugar. El recuerdo de los tiempos de Ewing, Marbury, John Starks o Allan Houston retumba en las mentes de los Knickerbockers m¨¢s leales, en un equipo golpeado por el acusado espectador casual que se pasea de vacaciones por el Madison Square Garden, y el mejor esp¨ªritu posible ha sido recuperado por los chicos a los que dirige Tom Thibodeau. Al menos, por lo que parece. Dentro se libran peque?as batallas que salen a la luz cuando la derrota te elimina para la eternidad.
Jalen Brunson quiso echarle un capote al entrenador en la rueda de prensa pospartido del Gainbridge Fieldhouse. ¡°Me preguntas si es el adecuado para ese trabajo? S¨ª lo es¡±, espet¨® antes de soltar el micr¨®fono, quej¨¢ndose por la pregunta, y abandonar la sala donde confrontaba con los medios de comunicaci¨®n. Tanto el presidente, Leon Rose, como el jugador-franquicia est¨¢n en el barco de Thibs, que es criticado y amado all¨¢ donde se mire. La estrategia extremista que ha desarrollado en los banquillos, tanto en Chicago y Minnesota como en ¨¦ste, lleva a ello. Pocos jugadores le valen, acostumbra a disponer a los titulares y escasos minutos al resto, y en el pecado lleva la penitencia. Porque la superalineaci¨®n que cuadraron en verano gracias al traspaso de Towns no ha funcionado.
Es de ah¨ª de donde necesita salir casi toda la producci¨®n. Y hasta alguien tan cerrado como Thibodeau se vio obligado a cambiar de parecer y, como se dice coloquialmente, mover el avispero. En esta ¨²ltima serie contra los Pacers quit¨® al maratoniano Josh Hart e introdujo a Mitchell Robinson, incluso despu¨¦s de que el p¨ªvot quedara marcado ante Boston por la debilidad en los tiros libres. Han resucitado para el baloncesto hombres como Delon Wright o Landry Shamet, tarde quiz¨¢, porque la idea principal hac¨ªa aguas por todos los lados. Ser¨¢ interesante, de contar con el benepl¨¢cito del due?o James Dolan y continuar en su puesto, ver c¨®mo se toma una nueva temporada al completo, si el camino es el de ampliar la rotaci¨®n o el que ha tomado durante tantos a?os.
Ataque y defensa, a examen. Porque, a pesar de pisar las finales de conferencia, subir un pelda?o m¨¢s en el Este, posicionarse como uno de los favoritos sin discusi¨®n, ha habido agujeros a tapar y a las bravas. En The Athletic los reporteros James Edwards y Fred Katz sacan a la luz algunos de los problemas que se han encontrado en privado. Hubo derrotas sin maquillaje, duras, en las que el combinado de La Gran Manzana no mostr¨® el colmillo al que acostumbra. El problema son las estrellas, ya que no hay mucho m¨¢s all¨¢. Un dato: en el a?o natural la alineaci¨®n titular que forman Towns, Anunoby, Bridges, Hart y Brunson est¨¢n en negativo, se eleva por encima del punto de d¨¦ficit por cada cien posesiones que se contabilicen. ?Qu¨¦ es lo que ha ido fallando?
En la rotaci¨®n el papel de Miles McBride, clave estos dos a?os para fortalecer los minutos de descanso de Brunson, se ha ensuciado. ?nfimo aporte conforme se han acercado los momentos decisivos. Hart, relevado de sus funciones. El escuadr¨®n de Villanova, con menor impacto por la irregularidad de Bridges, uno de ellos. Son varios los nombres, Anunoby se salva por el extraordinario aporte realizado d¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n, pero las cr¨ªticas dentro del plantel confluyen en uno solo. Towns es mirado con lupa por su condici¨®n, la del jugador que deb¨ªa ayudar a dar el salto definitivo y a hacer de ese quinteto uno casi invencible, y hasta el ¨²ltimo d¨ªa se han visto las dos caras del p¨ªvot de origen dominicano. Brillante por momentos ante Pistons y Pacers, pero cayendo igualmente.
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¡°Los jugadores de los Knicks hicieron comentarios velados p¨²blicamente durante toda la temporada sobre la mala comunicaci¨®n y las inconsistencias en el juego de Towns. Entre bastidores, tanto ellos como el cuerpo t¨¦cnico expresaron su frustraci¨®n con los h¨¢bitos defensivos de Towns. No tanto por el talento, sino por c¨®mo se lo tomaba. Frecuentemente ejecutaba coberturas incorrectas que no avisaba o no explicaba. Despu¨¦s de que se convirtiera en algo recurrente, a los jugadores les empez¨® a preocupar que Towns no comprendiera la importancia de este tema¡±, reza la informaci¨®n. Haciendo la guerra por su cuenta. A su aire aun habiendo sido entrenado por Thibodeau en el pasado, en los Timberwolves, por lo que los sistemas no les son ajenos. Eso, atr¨¢s; en ataque la cr¨ªtica procede de la incapacidad del interior y Brunson para jugar con bloqueo y continuaci¨®n (hasta el aro o con tiro exterior), ambos son r¨¢pidos y con recursos en todas las distancias, un m¨¦todo sencillo que no ha gozado de la importancia suficiente a lo largo de la campa?a.
P.J. Tucker, como elemento integrador
Dentro y fuera hay discusiones a afrontar. Uno de los temas que destacan los insiders es el n¨²mero de reuniones privadas entre jugadores durante los playoffs, algo habitual en otras partes del calendario pero no tanto entre partidos de entidad. Y era necesario. La comunicaci¨®n es un aspecto a mejorar en estos Knicks. Josh Hart hab¨ªa sido claro de manera p¨²blica con la implicaci¨®n que requer¨ªa de sus compa?eros. Mikal Bridges critic¨® tambi¨¦n la estrategia de alto minutaje por parte del cuerpo t¨¦cnico. Dos jugadores a los que se ha pasado factura en los ¨²ltimos encuentros. Para las problem¨¢ticas aqu¨ª mencionadas siempre viene bien contar con la presencia de algunos veteranos de largo recorrido que ni siquiera tienen que pisar el parqu¨¦ para volverse imprescindibles. P.J. Tucker, de 40 a?os, campe¨®n en 2021 con los Bucks, firmado como temporero en marzo con un contrato de diez d¨ªas y renovado posteriormente, es esa persona. Se quede o no, figuras integradoras como ¨¦l ser¨¢n necesarias para un grupo que debe ser compacto en su escalada hacia el puesto m¨¢s honroso de la NBA.
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